La letra pequeña del primer día de legislatura en Galicia: la incógnita de los consejeros y el capote del BNG al PSOE

Plácida y previsible. Así fue la constitución de la XII Legislatura este lunes en el Parlamento gallego, reflejo de los resultados del pasado 18-F con una cómoda mayoría para el PP. Una cámara autonómica pintada de azul donde Rueda manda, tras heredar la presidencia de Alberto Núñez Feijóo, con el respaldo de las urnas (40 escaños) y un porcentaje de votos por encima de 47,36%, que lo ha sentado en la mesa de los barones del PP a la altura de Juanma Moreno e Isabel Díaz Ayuso.

Tranquilo y sonriente, Rueda, ocupó su asiento sin dar pistas de los perfiles que ultima para conformar el próximo Gobieno de la Xunta, más allá de la salida de Ethel Vázquez tras una década sentada en el Consello de la Xunta. Pasa a ser secretaria primera, mientras que Miguel Ángel Santalices, a sus 69 años, revalida la presidencia del Parlamento que ocupa desde 2016 -es diputado desde 1997- para encarar su "última legislatura" en su "segunda casa"."Esta primera gran mayoría de Alfonso Rueda nos refuerza para toda la legislatura, para seguir haciendo las cosas bien para Galicia", proclamó Diego Calvo (PP), vicepresidente en funciones.

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Enfrente, la portavoz nacional del BNG, Ana Pontón consolidada como líder de la oposición al mando de un grupo de 25 diputados, entre los que se cuentan los más jóvenes de la Cámara que optaron por el "imperativo legal" como fórmula para prometer sus cargos. Al lado, un grupo socialista minúsculo, reducido a nueve asientos y comandando por José Ramón Gómez Besteiro, que se confirmó la pasada semana como el único aspirante a liderar el PSdeG en el próximo congreso extraordinario de abril. Busca tratar de consolidar un proyecto autonómico del PSOE en Galicia después de cosechar peores resultados electorales.

Besteiro, que renunció al escaño del Congreso por Lugo, y a la visibilidad que le había brindado Pedro Sánchez en el hemiciclo como presidente de la Comisión de Transportes, prometió una oposición "constructiva y firme" al frente de grupo parlamentario socialista en la Cámara del Hórreo.

Cede un puesto en la Mesa

Con todo, el BNG echó un capote al PSdeG y le cedió uno de los dos puestos en la Mesa del Parlamento. "Espero que no se confunda mayoría absoluta con absolutismo y se pase el rodillo", advirtió Pontón a los populares, que justificó la cesión de un asunto a la socialista Patricia Iglesias en una Mesa a cinco en aras de una mayor “pluralidad”.

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