Felicitación navideña de Junts: Laura Borràs desaparece de la foto con Puigdemont

El divorcio entre la presidenta de Junts per Catalunya (JxCat), Laura Borràs, y Carles Puigdemont va de mal en peor. Para felicitar el nuevo año, la cúpula del partido distribuyó una fotografía en la que se ve al expresident rodeado por varios dirigentes de la formación. “Os deseamos un buen año nuevo y que el 2023 nos traiga la libertad de nuestro pequeño gran país y la vuelta del presidente legítimo de Cataluña”, dice el texto que acompaña a la imagen, pero en la instantánea ni rastro de Borràs. Sí aparece, en cambio, el secretario general del partido, Jordi Turull.

Si una imagen vale más que mil palabras, esa foto es un libro abierto en el que se puede leer y casi palpar la división que se vive dentro del partido. Fuentes internas de Junts consultadas por El Confidencial tratan de quitar hierro al asunto. “Esa fotografía es de los grupos del Congreso y del Senado. Es lógico que estén los representantes del partido en esas instituciones y no la presidenta”, señalan estas fuentes. Pero, de ser así, ¿por qué Jordi Turull está en primera fila, junto a la portavoz en el Congreso, Miriam Nogueras?. Turull no es diputado ni senador. Por ello, su presencia en la foto queda cuestionada, según comentan en algunos círculos del partido.

Fuentes críticas argumentan que la respuesta hay que buscarla en las tensiones internas de la formación. “No ha estallado una guerra interna porque no interesa a nadie, pero las relaciones son tirantes, especialmente después de la defenestración de Borràs del Parlament y de sus comentarios sobre que determinados sectores no la defendieron lo suficiente”, subrayan las fuentes consultadas.

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La fotografía de fin de año es un retrato de ese distanciamiento: en la instantánea están los cinco senadores, pero faltan cuatro diputados, alineados con el PDeCAT (sí están otros cuatro alineados con Puigdemont), que en su día concurrieron en las listas de Junts per Catalunya (en aquel momento aún no se había materializado esta formación como partido político y sólo era la marca electoral del PDeCAT). Por tanto, se deduce que los que aparecen son los que apoyan incondicionalmente al expresident. La presencia de Turull se interpreta como un gesto de Puigdemont hacia uno de sus favoritos además de escenificar su peso dentro de la formación. “Sólo hay que echar un vistazo para darse cuenta de que los que están con Puigdemont provienen de la vieja guardia de Convergència. Borràs es un personaje aparte, ya que no tuvo cargos de responsabilidad en la Convergència original. La han descabalgado de la cúpula con una sola fotografía”.

División en el Parlament

Esa circunstancia corre paralela a la situación que el grupo parlamentario vive en la cámara legislativa catalana. “Borràs ha perdido a la mayoría de los diputados. Sólo están a su lado un grupo de cuatro o cinco diputados. Los demás han hecho piña con el presidente del grupo parlamentario, Albert Batet, y con la dirección oficialista del partido que encabeza Turull”, explican las fuentes.

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Junts tiene 32 diputados en la cámara catalana. Pero los exiguos electos que todavía se pueden considerar del cupo de la presidenta de Junts son muy pocos. Uno de ellos es Francesc Dalmases, que compartió despacho con Borràs en la anterior legislatura y se convirtió luego en su sombra. Dalmases fue sancionado con una multa de 600 euros y apercibimiento público por propasarse con una periodista de TV3, a la que abroncó por las preguntas que formuló a Borràs en una entrevista. El diputado se reincorporó este martes al Parlament después de dos meses de baja, tras el escándalo mayúsculo de su comportamiento, ratificado por algunas de las diputadas de su propio grupo.

Otra incondicional de Borràs es Aurora Madaula, a la que la cesada metió en la Mesa del Parlament. El día en que la presidenta se vio despojada de su cargo, Madaula lloró durante la reunión, y apeló a los sentimientos personales de cada uno de los diputados presentes para que no votasen a favor de la medida. Al margen de ellos dos, sólo se han alineado con Borràs en determinadas ocasiones dos diputados más que han sido de aluvión, es decir, reclutados no por su pertenencia al partido, sino por diversas circunstancias, tras el beneplácito de Carles Puigdemont: Joan Canadell, expresidente de la Cámara de Comercio de Barcelona, y el representante por Girona Salvador Vergès. Muy esporádicamente, algún otro miembro del grupo se ha mostrado a favor en público de seguir la estrategia de Borràs. Sin embargo, tras el poco edificante espectáculo del cese, los parlamentarios optaron por ir alejándose paulatinamente de ella.

“El resto de los diputados, en mayor o menor medida, apoyan sin fisuras al presidente del grupo parlamentario y a la dirección representada por Jordi Turull. Algunos de ellos incluso fueron críticos con la estrategia de Borràs de aferrarse al sillón, desgastando la imagen del Parlament, pero también, especialmente, la imagen de JxCat”, critica una de las fuentes consultadas por este diario.

Es cierto, no obstante, que Borràs aparecía en otro anuncio ese día 30 de diciembre, en el inicio de una campaña de publicidad. “El procés no ha acabado. Somos y seremos. Hay alternativa, hay esperanza. Nuestra propuesta para llegar a la independencia”. El vídeo mostraba una breve panorámica de la clausura del último cónclave de Junts, con la nueva dirección, recién elegida, aplaudiendo encima del escenario, Por unos segundos, se veía la figura de Borràs junto al resto de dirigentes. Tras esas breves imágenes, varios textos enumeraban las principales propuestas, entre ellas “reactivar el espacio estratégico entre partidos y entidades independentistas para definir una nueva hoja de ruta”, preparar a la Hacienda catalana “para recaudar todos los impuestos, así como todas las medidas necesarias para desconectar política y económicamente del Estado español a todos los niveles institucionales”, alcanzar la soberanía energética, cooperar con el Consell de la República, “hacer un frente común en el Congreso, el Senado y Europa para no estabilizar al Gobierno español y deslegitimarlo internacionalmente” y mantener en el tiempo “la confrontación no violenta y la desobediencia civil”. El protagonismo de la figura de Borràs en el vídeo es nulo. En la política, ese protagonismo también va decayendo, tendencia que incluso afecta su propio partido, JxCat.