El PSC regalará a Aragonès el acuerdo de presupuestos de la Generalitat en Reyes

El PSC le regalará a Pere Aragonès unos presupuestos de la Generalitat para Reyes, según apuntan fuentes políticas conocedoras de la negociación entre ERC y los socialistas. Es buen regalo. En realidad, es como entregarle toda una legislatura, que el presidente catalán podrá retener con solo 33 diputados. Acabar el mandato en esas condiciones no tiene precio, aunque el partido encabezado por Salvador Illa necesita su grado de protagonismo, que hasta ahora se le ha negado, pese a tener los mismos parlamentarios que la formación de Oriol Junqueras.

Fuentes del PSC aseguran que están "lejos" de cerrar un pacto en firme. Desde el Palau de la Generalitat, señalan que los socialistas tienen toda la información desde hace días, pero que están mareando la perdiz. Lo mismo, por cierto, que se dice de JxCAT. Solo los comunes han firmado un acuerdo para aprobar las cuentas.

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José Antonio Zarzalejos

Aragonès se pasó meses ignorando al PSC. Lo hizo para la investidura. Lo repitió en sus primeros presupuestos y también cuando Salvador Illa pedía, una y otra vez, una mesa de partidos catalanes para complementar la mesa de diálogo. Los socialistas también fueron ninguneados cuando el pasado mes de agosto Illa volvió a ofrecerse para respaldar las cuentas de 2023. Haciendo la negociación más agónica, están pasando ahora todas las facturas.

Ahora es cuando el PSC reivindicará su papel de partido central de la política catalana. Lo que implica que no se acordarán los presupuestos de la Generalitat antes de Navidad, como deseaban los republicanos.

Ahora es cuando el PSC reivindicará su papel de partido central de la política catalana

El Partido Socialista busca un cambio a fondo de los presupuestos. Fuentes cercanas a las conversaciones detallan que Salvador Illa ha sumado al equipo negociador a Martí Carnicer, que fue mano derecha del conseller socialista Antoni Castells y que ya hacía el control de los presupuestos de la Generalitat cuando estaba en la oposición al Ejecutivo de Jordi Pujol. Carnicer ha obligado a una negociación con cambios profundos, no solo superficiales, sobre determinados impuestos o partidas para temas específicos.

Desde la Generalitat, se insistió tras el último Consell Executiu en que "las negociaciones se mantienen abiertas y que todavía es posible un acuerdo a cuatro". Es decir, incluyendo a JxCAT, algo que parece del todo improbable.

Optimismo y escenificación

"Esperamos que no se alargue ni un día más de lo necesario. No hay a día de hoy ningún elemento suficientemente sustancial que impida cerrar un acuerdo en los próximos días", advirtió tras el Consell Executiu la portavoz, Patrícia Plaja, en la rueda de prensa del Palau.

Mientras que desde el PSC y en JxCAT aseguran que las conversaciones se encuentran estancadas, Plaja manifestó todo lo contrario al afirmar que las negociaciones "objetivamente están yendo bien". Lo dijo el mismo día que se prorrogaron los presupuestos de 2022, aunque con estas conversaciones en marcha se considera una prórroga técnica.

Calendario previsto

El calendario previsto es un acuerdo para Reyes. El proyecto de presupuestos se aprobaría entonces en el primer Consell Executiu después de fiestas y se enviaría al Parlament. A partir de ahí se ha de tramitar en la Cámara catalana, un proceso que tarda unos 45 días, con lo que habría cuentas en vigor a finales de marzo, de manera que la economía catalana no se vería especialmente perjudicada.

Si todo va según lo previsto, habrá presupuestos de la Generalitat para finales de marzo

El PSC y Salvador Illa quieren escenificar el acuerdo de manera que resalte el papel central de los socialistas catalanes, claves en el nuevo clima social en Cataluña, capaces de pactar con casi todos los partidos y que lo hacen, según esta formación, para beneficiar a la mayoría. Justo lo contrario que JxCAT, que se ha colocado en una posición en la que no puede negociar con nadie.

En la formación, saben que Junts y la CUP hablarán de reedición del tripartito. Pero son conscientes de que la situación es diferente y que el PSC se ha colocado en una posición en que será capaz de pactar los presupuestos con Pere Aragonès y la alcaldía de Barcelona con Xavier Trias.