Es noticia
El independentismo más radical llama a boicotear a los comercios y bazares de no catalanes
  1. España
  2. Cataluña
'Cuarto espacio' soberanista

El independentismo más radical llama a boicotear a los comercios y bazares de no catalanes

El Front Nacional de Catalunya (FNC), considerado como una de las formaciones más extremistas, celebró la victoria de la ultraderecha en Suecia: “Los catalanes hemos de tomar buena nota”

Foto: Una asistente en la celebración de la Diada. (EFE/Marta Pérez)
Una asistente en la celebración de la Diada. (EFE/Marta Pérez)

El Front Nacional de Catalunya (FNC), el partido liderado por el presidente del Cercle Català de Negocis (CCN), Albert Pont, no esconde su satisfacción con los resultados electorales de la ultraderecha en Suecia, donde Demócratas de Suecia se situó en segundo lugar. No es una reflexión casual. Las similitudes ideológicas entre ambas formaciones son notables, así como sus postulados radicales. Tanto, que el FNC, publicó un artículo en su web bajo el título ‘¿Podemos hacer algo los catalanes?’ en el que aboga por preservar el hecho de ser catalán y secundar un boicot a empresas y establecimientos que sean regentados por no catalanes.

Las felicitaciones a Jimmie Akesson, líder de Demócratas de Suecia, va en la misma línea. “La ajustada victoria del bloque opositor a la socialdemocracia expresa la disconformidad con las políticas ‘progres’ y con el multiculturalismo, del que aquel país ha hecho bandera durante décadas. Los catalanes hemos de tomar buena nota para preservar nuestra identidad, estilo de vida y seguridad”, lanzó por las redes el partido catalán, uno de los grupos más extremistas del independentismo.

Foto: El empresario Santiago Espot, uno de los asistentes a la reunión. (EFE/Víctor Lerena)

El escrito sobre el boicot a las empresas y comercios no deja lugar a la duda. “¿Tanto cuesta ser cliente de empresas, compañías y comercios que respeten el país, es decir, que respeten la lengua, y con trabajadores del país o integrados? ¿Es preciso ir a comprar al bazar chino, al kebab (sic) o al supermercado pakistaní sabiendo que así contribuimos a la explotación laboral, al fraude y a la competencia desleal y la degradación del barrio?”. También apunta que se deben “contratar empleados del país o, si son forasteros, darles indicaciones para que se comporten como harían en cualquier otro país”. Y mirar, antes de traspasar un piso o un negocio, a quién se le vende o alquila. “Tú, catalán de La Seu d’Urgell, o de Alcoy, Manacor o El Soler, tú y tus hijos lo tenéis crudo si queréis continuar siendo catalanes en vuestra tierra”.

La parroquia del FNC lo tiene muy claro. “Cualquier 'Govern' con un mínimo sentido nacional tendría como objetivo número 1 la recatalanización de la nación, y eso pasa por aumentar la natalidad autóctona, incentivar el retorno de catalanes que viven en el extranjero, una moratoria de inmigración y hacer necesario el catalán”, condensaba este miércoles su ideario un conocido activista cercano a las tesis radicales del Front, una reflexión que luego distribuyó por redes la formación.

"Cualquier 'Govern' con un mínimo sentido nacional tendría como objetivo número 1 la recatalanización de la nación"

El Front, pese a ser minoritario, es uno de los principales partidos soberanistas extraparlamentarios. Y precisamente por ello y por sus últimos movimientos estratégicos es también es una de las organizaciones que integran el llamado ‘cuarto espacio independentista’. La alusión a este término se debe a que ese es la definición con la que los impulsores de una lista rupturista, fuera de los tres grandes partidos (ERC, JxCat y CUP), denominan a la alternativa más radical del nacionalismo.

La lucha por el espectro ‘indepe’

Ese espectro de votos, que en las últimas autonómicas fue a parar a la abstención, está en el punto de mira del ‘cuarto espacio’. El CCN de Albert Pont emitió un comunicado firmado colectivamente por su junta directiva tras la Diada del 11 de septiembre de este año en el que subraya que “comienza a aparecer un ‘cuarto espacio’ en el horizonte. Pronto, los cientos de miles de votos soberanistas que abonan el abstencionismo y el desencanto se convertirán en el suculento objetivo de aquellos que quieren conservar el statu quo. Ningún partido en el poder quiere perder la centralidad política; razón por la cual no pueden asumir una pérdida de votos tan importante. Así, es fácil prever que ellos mismos intenten articular ‘alternativas afines’ mientras continúan vetando y silenciando cualquier opción independiente con la recurrente finalidad de controlar la disidencia”.

Su filosofía parte de la base de que los grandes partidos han traicionado ya a los catalanes y “nos inoculan la moral de derrota”. En los últimos meses, también han aflorado disensiones de este sector soberanista con la ANC, a la que acusan de estar inmersa de nuevo en otro ‘procés’ similar al anterior. Para Jordi Casacuberta, secretario general del FNC, las propuestas y el discurso de la presidenta de la ANC, Dolors Feliu, es exactamente igual que el de Carme Forcadell cuando estaba al frente de la organización. “Que si hace falta una hoja de ruta, que si una conferencia, que si un nuevo referéndum, que si lista cívica, que si un estado mayor independentista… Diferentes actores, mismo teatro”.

Foto: Manifestación a favor de la inmersión lingüística en catalán. (EFE/Quique García)

Ese distanciamiento tiene su razón de ser. El FNC está inmerso en una estrategia de conversaciones con otras fuerzas políticas para conformar el ‘cuarto espacio’ dentro del independentismo. Entre esos actores se encuentra un grupo de exdirigentes de la ANC que abandonaron esa entidad por considerarla demasiado “blanda” y crearon la plataforma Donec Perficiam, que intentó a finales de 2020 una lista única de todo el soberanismo.

Las conversaciones comenzaron el pasado 29 de mayo, con una cumbre a la que asistieron el cabeza de lista del Front, Albert Pont; el activista Joan Matamala, muy próximo a Carles Puigdemont (es hermano del senador Josep Maria Matamala, que acompañó al fugado durante los primeros meses en Bruselas); el empresario Jordi Roset, presidente de Petrolis Independents y socio de Joan Canadell, diputado de JxCAT; Víctor Terradellas, exresponsable de relaciones internacionales de Convergència y exmilitante de Junts; Jaume Marfany, exvicepresidente de la ANC; Jordi Casacuberta, secretario general del FNC; Joan Manuel Ximenis, exconcejal de la CUP; y Santiago Espot, conocido activista, presidente de Catalunya en Acció e impulsor de campañas como las pitadas al Rey y las denuncias a comercios por no rotular en catalán.

El Front Nacional de Catalunya (FNC), el partido liderado por el presidente del Cercle Català de Negocis (CCN), Albert Pont, no esconde su satisfacción con los resultados electorales de la ultraderecha en Suecia, donde Demócratas de Suecia se situó en segundo lugar. No es una reflexión casual. Las similitudes ideológicas entre ambas formaciones son notables, así como sus postulados radicales. Tanto, que el FNC, publicó un artículo en su web bajo el título ‘¿Podemos hacer algo los catalanes?’ en el que aboga por preservar el hecho de ser catalán y secundar un boicot a empresas y establecimientos que sean regentados por no catalanes.

Esquerra Republicana de Catalunya (ERC)