La Cámara de Barcelona promocionó en TV3 mascarillas 'indepes' no homologadas a 13€

El presidente de la Cámara de Comercio de Barcelona, el independentista Joan Canadell, ha creado la tormenta perfecta para estar en el ojo del huracán. Sus apariciones en la televisión autonómica (en un programa de hora punta como ‘Faqs’) le han supuesto acerbas críticas de una parte del empresariado catalán. Pero esta vez no es por sus opiniones políticas, aunque la ideología pueda estar en el trasfondo del asunto.

Esta vez es por recomendar unas determinadas mascarillas de protección durante la crisis del coronavirus. En la emisora pública, Canadell no se cortó un pelo al recomendar, el pasado 2 de mayo, unas mascarillas “fabricadas 100% en Cataluña”, publicitando la marca del producto y las empresas que lo comercializan. El asunto ha provocado que Empresaris de Catalunya, una plataforma empresarial que agrupa a unas 500 pymes y empresarios constitucionalistas, tomase cartas en el asunto y denunciase la propaganda descarada ante la consejera de Trabajo, Àngels Chacón, y ante la propia Cámara de Comercio.

El producto, que lleva el inconfundible nombre de Maskcat, cuesta unos 12 euros en el mercado. Y el presidente de la Cámara de Comercio no solo lo recomendó a través de la televisión pública sino que en su cuenta de Twitter lanzó una relación de empresas y webs donde podría adquirirse.

“La función de la Cámara de Comercio no es hacer teletienda ni promocionar productos de terceros. El máximo responsable de la institución no puede hacer propaganda de unos productos perjudicando a otras empresas que también venden mascarillas y que están afiliadas a la Cámara. Yo he debatido con él y se lo he dicho cara a cara. Y me respondió que era una idea, que su intención era ayudarnos y dar una solución. Pero si quería dar una solución, podía hacer lo que hicieron otras instituciones con productos similares: realizar cursos o coger los archivos de diseño y de plano técnico y regalarlos para que cualquiera se lo pueda hacer con una impresora 3D”, explica a El Confidencial Carlos Rivadulla, presidente de Empresaris de Catalunya.

El colmo del asunto llega por otro dato: las mascarillas publicitadas por el presidente de la Cámara de Comercio no están homologadas. Y, por tanto, es una insensatez recomendarlas sin advertirlo. “Si se utilizan las mascarillas en el transporte público, han de estar homologadas. Así lo dispone el decreto del Gobierno. Y, por tanto, no deberían recomendarse sin advertir de que ese producto puede complementar la protección, pero no sustituir al producto homologado”, subraya Rivadulla.

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"¿Por qué promociona solo una marca?"

Por eso, en sendas cartas a la consejera Chacón y al secretario general de la Cámara, Xavier Coronas, el presidente de Empresaris de Catalunya pide explicaciones y lanza una batería de preguntas. “¿Es función de la Cámara de Comercio la promoción y publicidad de productos comercializados por terceras empresas, sean o no miembros de la Cámara? ¿Está incumpliendo el señor Canadell con la normativa reguladora de la Cámara? En tal caso, ¿qué sanción se aplicaría al señor Canadell?”, dice la misiva.

El texto pregunta también, en todo caso, por qué Joan Canadell no promueve también la venta de otros materiales sanitarios y por qué precisamente lo hace con Maskcat. “No quiero decir que hace publicidad para sus amigos, porque no sé si es amigo de los empresarios que fabrican estas mascarillas, pero no deja de sorprender que en sus tuits incluya una librería. ¿A santo de qué viene el hacer propaganda de determinadas marcas? Esperamos que nos digan algo para saber si esto tiene recorrido jurídico”, añade Rivadulla.

Otras dos cartas fueron enviadas a los mismos interlocutores para denunciar el conocido tuit de Joan Canadell en el que decía que “España es paro y muerte. Cataluña es vida y futuro”. Esta segunda carta explica que esas palabras del presidente de la Cámara son “abominables”. El tuit hacía referencia a que si el Gobierno español hubiese hecho caso al presidente catalán, Quim Torra, y se hubiese aislado Cataluña del resto de España, se hubieran “salvado miles de vidas”.

En la misiva, sin embargo, Rivadulla expone que mientras la crisis sanitaria se iba expandiendo, los independentistas convocaban “manifestaciones multitudinarias” en Perpiñán, en referencia al mitin de Carles Puigdemont que reunió a 150.000 personas en el sur de Francia el 29 de febrero. “Igualmente, obvia Canadell que era y sigue siendo competencia de la misma Generalitat proveer de materiales y equipos sanitarios a nuestros profesionales sanitarios, residencias y Mossos, pero durante los meses de enero y febrero no se hizo nada (…) incluso a partir de la declaración del estado de alarma tampoco se impedía la compra y gestión de material y equipos al Govern”.

Así, llega a la conclusión de que “en todo caso, contraponer vida y muerte es simplemente falso. Además, repito, de una grave ofensa, si no un delito de odio contra el resto de los españoles”. Y pide a la consejera y al secretario general de la Cámara, para rematar, “si tales declaraciones suponen una vulneración de la normativa reguladora de la Cámara o del ordenamiento jurídico vigente. Y, en tal caso, qué medidas se le aplicarían al presidente Canadell”.