Detenidos tres hermanos por intentar apuñalar a dos policías en un desalojo en Málaga

La Policía Local de Málaga ha detenido a tres hermanos de entre 44 y 53 años armados con cuchillos después de que uno de ellos apuñalara a dos agentes durante el desalojo de su vivienda, si bien los guardias resultaron indemnes gracias a las prendas de protección que llevaban.

Los arrestados están acusados de un delito de atentado a agentes de la autoridad, que podría llegar a pasar a ser homicidio en grado de tentativa en uno de los casos, según ha informado este martes la Policía Local. Los hechos tuvieron lugar ayer lunes, 24 de octubre, en un domicilio situado en el distrito de Palma-Palmilla, donde a las 09:00 horas se personaron agentes municipales para desalojar a los residentes del piso, para proceder a la limpieza e higienización debido al estado de insalubridad en el que se encontraba, ya que padecen los síndromes de Diógenes y Noé.

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Cuando los policías llegaron, uno de los hermanos, un hombre de 47 años, se encontraba sentado en el sofá con dos hachas en sus manos, aunque acabó depositándolas en el suelo por orden de la policía. Tras el desalojo de los tres hermanos, a los que se informó de que podrían volver a la vivienda tras llevarse a cabo la limpieza y desinfección de la misma, llegaron a la casa agentes del Grupo de Protección de la Naturaleza (GRUPRONA) de la Policía Local, apoyados por operarios del Centro Zoosanitario Municipal, que rescataron cinco perros en muy malas condiciones higiénico-sanitarias.

Los animales, además, carecían de microchips identificativos, de documentación y de tratamiento veterinario y no estaban vacunados, por lo que fueron trasladados al Centro Zoosanitario Municipal para recibir asistencia. Sobre las 17:30 horas, la Policía Local de Málaga fue alertada de que tres de los hermanos estaban intentando acceder de nuevo al domicilio portando cuchillos, por lo que se montó un dispositivo de seguridad en el que participaron miembros del Grupo Operativo de Apoyo (GOA), que disponen de medios oportunos para la neutralización de un posible peligro, así como otros especiales de protección.

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Equipados con chalecos antibala, cascos y escudos de protección, los agentes del GOA entraron en el edificio y encontraron a los tres hermanos en el rellano. Uno de ellos, el mismo que por la mañana había blandido las hachas, avanzó hacia los agentes con las manos detrás en la espalda. A pesar de los avisos para que depusiese su actitud, mostrase las manos y dejara de avanzar hacia ellos, el individuo hizo caso omiso, sacó las manos repentinamente y atacó con un cuchillo con una hoja de unos 19 centímetros de longitud a los agentes que se encontraban en cabeza.

Una de las puñaladas llegó a perforar la almohadilla de protección del pantalón de un agente y otra atravesó levemente la parte posterior del chaleco antibalas y antipunzón que portaba otro policía.

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Tras ello, otro de los hermanos se dirigió hacia los agentes, aunque fue reducido antes de que tuviera la oportunidad de sacar el cuchillo que llevaba, con unos 20,5 centímetros de hoja.

El tercer implicado, que también fue reducido por los agentes, portaba un cuchillo de trece centímetros de longitud de hoja. Dos de los policías locales del GOA que participaron en la intervención precisaron ser asistidos por facultativo, uno con motivo de una erosión en la comisura labial y otro por contusiones en antebrazo, costado y muslo. Los tres hermanos fueron detenidos y trasladados a dependencias, mientras que se está gestionando el ingreso no voluntario de la madre en un centro asistencial.