Una hora con Obama: "¿Para esto hemos pagado 2.000 euros?"

Los hay que ya tendrían preparado el titular de ‘Bienvenido, Míster Obama’, pero la expectación por la participación del expresidente de EEUU en un evento tecnológico en Málaga este martes pronto se desvaneció. Desde que el pasado fin de semana el exmandatario desembarcase en la Costa del Sol han ido trascendiendo detalles de su estancia. Ha jugado al golf, se ha alojado en la lujosa Finca Cortesin de Casares y la cita de hoy debería haber sido el broche de oro, pero no. Muchos de los asistentes trasladaron la idea de que tan sólo estuvo una hora hablando de “generalidades” en el Palacio de Ferias y Congresos de Málaga.

Obama, cómo no, era la estrella del Digital Enterprise Show (DES). Este evento se organizó durante un lustro en Madrid y aterrizó en la ciudad andaluza con vocación de permanencia al menos durante cinco años. El exdirigente de EEUU tendría que haber empezado su intervención a las 11.30 y no lo hizo hasta las 11.50. Y tras una hora, el público salió de la sala decepcionado. “¿Para esto hemos pagado 2.000 euros? Ha sido como si mi cuñado se pone en Nochevieja a hablar de estas cosas”, comentó a El Confidencial un político relevante. Las entradas de la categoría ‘Honour Pass’ del DES se elevan a 1.990 euros por persona.

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Un directivo de prestigio, en la misma línea, apuntó: “Me esperaba algo más, sinceramente. Ha estado muy flojito”. Otros echaban de menos que el expresidente de Estados Unidos no conociera “el ecosistema tecnológico malagueño”, ahora puntero en Europa. “Han sido obviedades, pero es Obama y, ojo, porque gracias a él ha habido mucho dinero”.

14.000 asistentes

Al final sí encaja aquí lo de ‘Bienvenido, Míster…’: su presencia ha generado un impacto económico en la provincia de 30 millones de euros. Los hoteles de Málaga capital están llenos estos días y se han desplazado visitantes a establecimientos turísticos de Torremolinos y Benalmádena. El congreso recibe a 14.000 asistentes: 12.000 se alojarán tres días en la ciudad.

— ¿No pasará luego por aquí, verdad?

— Bueno, algo de vuelta por los stands sí hará, ¿no?

— ¡Qué dices! Imagínate la que se puede armar aquí con tantas personas.

El diálogo anterior entre varios asistentes resumía la expectación por Obama. Muy delgado, relajado y sonriente. Llevaba traje gris oscuro, camisa blanca y sin corbata empezó su charla con un efusivo "I love Spain!". Le aplaudieron a rabiar antes de que dijera que es partidario del “capitalismo inclusivo” que reduce desigualdades, que las nuevas tecnologías son sinónimo de éxito, que estamos en un mundo “global y conectado” y que hay mucha información que puede ser “tóxica”.

Tanto Sánchez como Moreno tuvieron encuentros de unos minutos con Obama, pero por separado

De la Casa Blanca habló poco. Que él estaba en las cosas “difíciles”, en el Ala Oeste, y que los viernes y sábados le gustaba degustar martinis y que a Michelle Obama le fascinaba el vino. Y ya. Al acabar el acto, empezó la inauguración del evento en sí, donde intervinieron, por este orden, Francis Salado, presidente de la Diputación de Málaga; Francisco de la Torre, alcalde de la ciudad; Juanma Moreno, presidente de la Junta de Andalucía, y Pedro Sánchez, presidente del Gobierno. Tanto Sánchez como Moreno tuvieron encuentros de unos minutos con Obama, pero por separado. El presidente del Ejecutivo tuvo paseíllo por varios stands del evento, pero no coincidió con el candidato del PP a la Presidencia andaluza.

Apoyo a la Expo 2027

Además, el Ejecutivo central se alió con el resto de las administraciones para impulsar a Málaga como “gran centro europeo de Innovación digital en el sur de Europa”, en palabras de Sánchez, quien volvió a respaldar la candidatura de la ciudad como sede de la Exposición internacional de 2027. “Siempre que vengo a Málaga, el alcalde me insiste”, bromeó.

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¿Y de qué habló con Obama? De los cambios geopolíticos derivados de la guerra en Ucrania. “Han compartido la necesidad de convertir en oportunidades para nuestras sociedades la actual aceleración histórica, política y tecnológica; y hacer con éxito la transformación digital y la transición ecológica para combatir la emergencia climática”, indicaron en el Ejecutivo. El presidente, al contrario que ocurrió con Joe Biden en Bruselas, no tuvo que forzar el encuentro con Obama. Estaba agendado. Se sentaron en un sofá y hablaron brevemente. Sánchez tenía la fotografía.

Y Moreno, por su parte, destacó cómo Málaga y toda la comunidad autónoma están decididas a ser líderes de la revolución tecnológica que está cambiando el mundo. “Málaga, como gran capital tecnológica de España, simboliza la aceptación de ese desafío, que consiste en poner en hora al mundo y crear un entorno mejor”. Y ofreció un dato: Andalucía ha ganado 82.000 nuevos habitantes. “Es un motivo de satisfacción porque ya no sólo quieren visitarnos, sino también convivir, producir y generar riqueza”.

Moreno se fue a hacer más campaña y Sánchez no parecía tener mucha prisa en abandonar el Palacio de Ferias y Congresos. Obama no volvió a aparecer en escena, pero no descarta venir más veces. “En España me siento en casa porque es un país cálido”, dijo. En Málaga, 27 grados.