Susana Díaz cerraba con C's su presupuesto mientras el PSOE se rompía en el Congreso

La política es rara. Capaz de conseguir que PSOE se enfrente y vote contra una iniciativa de Ciudadanos en un tema en el que están básicamente de acuerdo como es Cataluña mientras que se pliega a las exigencias del partido naranja en otro asunto como la rebaja del Impuesto de Sucesiones y Donaciones donde, supuestamente, las diferencias de calado ideológico deberían de ser mucho mayores. El partido de Albert Rivera en Andalucía ya tiene su gran victoria: sólo quienes hereden por encima del millón de euros, dos millones teniendo en cuenta el patrimonio previo al hacer la liquidación ante Hacienda, pagará impuestos. Esto supone en la práctica casi eliminar un tributo que tenía a miles de andaluces en pie de guerra.

Susana Díaz presenta hoy su tercer gran acuerdo con Ciudadanos, tras el pacto de investidura, para sacar adelante unos presupuestos en Andalucía. Ese pacto conlleva una reforma de calado en la política fiscal andaluza y dejará exento de tributar a las herencias hasta un millón de euros, confirman fuentes del partido de Rivera. Era la gran condición de la formación naranja para aprobar el Presupuesto de 2018 y dar estabilidad al Gobierno andaluz. La presidenta andaluza gana mucho con este pacto y puede ya decidir con libertad si agota o no la legislatura. Su acuerdo con C’s aleja las sombras sobre su Gobierno.

Díaz compareció en San Telmo para celebrar un acuerdo que da "estabilidad" política y proclamó: "Horizonte despejado". Los socialistas ponen el acento en las políticas sociales del Presupuesto ante las críticas de la izquierda por esta rebaja fiscal. El impacto de suprimir Sucesiones será de 90 millones de euros. Díaz no quiso valorar la votación del Congreso un día antes y emplazó a la semana próxima para hablar al respecto. Preguntada sobre las actuaciones llevadas a cabo por el Gobierno de Rajoy hoy en Cataluña no dejó lugar a dudas: "El Estado de Derecho tiene la obligación de restablecer la ley". "El Estado somos todos", enfatizó.

Mientras que en el Congreso una PNL de Ciudadanos para dar apoyo al Gobierno del PP frente al desafío catalán hacía estallar las costuras y exhibía la división interna en las filas socialistas, en Andalucía estaban sentados a la misma mesa cerrando los últimos flecos del Presupuesto. Estaban reunidos el número dos del PSOE-A, Juan Cornejo, el portavoz parlamentario Mario Jiménez, y el vicepresidente Manuel Jiménez Barrios con una delegación de Ciudadanos encabezada por Juan Marín.

TE PUEDE INTERESAR

La moción de Rivera estalla las costuras del PSOE y rompe el frente constitucionalista

Juanma Romero Paloma Esteban

Cuando se supo que cuatro diputados del PSOE habían roto la disciplina de voto y que los andaluces Antonio Pradas, Gregorio Cámara y José Juan Díaz Trillo, todos del círculo más cercano a Susana Díaz, se habían abstenido por error de la iniciativa de Ciudadanos, en Andalucía ambos partidos estaban sentados a la misma mesa. De hecho, los dirigentes del PSOE andaluz se levantaron del encuentro ante la insistencia de sus teléfonos para dejar claro que ellos no estaban detrás de lo ocurrido en el grupo socialista en el Congreso y que estaban dedicados a cerrar los presupuestos. Eso mismo trasladaron desde el núcleo duro de Susana Díaz en el Gobierno andaluz. Se apresuraron a desvincular a la andaluza de la división en el grupo socialista, dejaron claro que en ese momento su prioridad era sacar adelante las cuentas autonómicas y aseguraron que no supo de la división en las filas del PSOE hasta que se produjo al votación.

El PP, sin bandera

Finalmente la supresión del Impuesto de Sucesiones y Donaciones, una demanda que ha movilizado a miles de andaluces reunidos en plataformas como Stop Impuesto de Sucesiones y con la que el PP ha hecho bandera durante años, llegará a Andalucía de forma importante de la mano de Ciudadanos.

Susana Díaz denunció en la última Conferencia de Presidentes el ‘dumping’ fiscal en España con otras comunidades como Madrid que tiene bonificado al 99% este tributo que pesa sobre las herencias. Su demanda hasta ahora es que este impuesto fuera rescatado por el Gobierno de la nación en la próxima reforma del sistema de financiación autonómica y que se armonizara en todas las comunidades. Finalmente, la necesidad de sacar adelante el Presupuesto de 20018 lleva al Gobierno andaluz a aceptar las condiciones de Ciudadanos y rebajar de forma muy importante este impuesto.

En el último Presupuesto, de la mano de Ciudadanos, la Junta elevó de 175.000 a 250.000 euros el mínimo exento en el impuesto de sucesiones. Ahora se elevará al millón de euros por heredero. Hasta hace poco, el Gobierno andaluz negaba el dato, difundido por el PP, de que hasta 40.000 andaluces se empadronan al año en Madrid para sortear el gravamen. La Junta esgrimió que no podía bajar el impuesto por falta de recursos y exigió al Gobierno mayor financiación.

Hasta ahora, la Consejería de Hacienda aseguraba que sólo los “muy ricos” tributaban por heredar en Andalucía a pesar del reguero de casos que ha ido saliendo a la luz pública para presionar en contra del impuesto. La Junta insistía en que solo un 7% de quienes heredan en Andalucía va a tener que pagar este impuesto y que el 93% está exento.

Podemos e Izquierda Unida han criticado con dureza al PSOE de Susana Díaz por pactar su Presupuesto con Ciudadanos, agujereando la cesta de impuestos y perdiendo ingresos mientras que pide más dinero al Gobierno central ante el próximo sistema de financiación autonómica. Lamentan "un giro más a la derecha" del PSOE. Podemos tendió la mano a Díaz para negociar el Presupuesto dejando al margen a Ciudadanos pero la presidenta de Andalucía no ha abierto ninguna mesa ni se fía en ningún caso de esta oferta de la formación morada.