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Page evita el choque con Ferraz: "Estoy de acuerdo con el 90% de lo que hace el Gobierno"
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En las Cortes de Toledo

Page evita el choque con Ferraz: "Estoy de acuerdo con el 90% de lo que hace el Gobierno"

El presidente de Castilla-La Mancha pide "respeto" a su posición "minoritaria" sobre la amnistía y asegura que nadie de la dirección del PSOE se ha puesto en contacto con él

Foto: El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page. (EFE/Ángeles Visdómine)
El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page. (EFE/Ángeles Visdómine)

Emiliano García-Page ha optado por bajar el diapasón después del cruce de declaraciones del miércoles con la dirección del PSOE a cuenta de la amnistía y las decisiones que ha tomado en los últimos meses la cúpula de Ferraz. "Estoy de acuerdo con el 90% de lo que hacen el Gobierno y el partido", ha dicho el presidente de Castilla-La Mancha en declaraciones en las Cortes de Toledo. Después de asegurar que el partido está en el "extrarradio" de la Constitución y llevarse una reprimenda formidable, el barón socialista rebajado el tono y ha recuperado una idea que ya ha lanzado antes y que consiste en que está alineado con las políticas sociales del Gobienro de Pedro Sánchez y que el disenso está en su política territorial.

"Mis adversarios son los independentistas", ha dicho el jefe del Ejecutivo castellano-manchego, que ha asegurado que a pesar de las múltiples respuestas que ha recibido desde Moncloa, Ferraz e incluso desde otros territorios, nadie de la cúpula socialista se ha puesto en contacto con él desde ayer. La diatriba sobre el lugar que ocupa el PSOE respecto a la Carta Magna fue respondida por Óscar Puente, que situó a García-Page en el "extrarradio del PSOE desde hace mucho tiempo" y provocó que el líder territorial entrase al trapo para asegurar que él se dedica a "ganar al PP y a la extrema derecha".

Unas horas después, se ha limitado a asegurar que no hay "ningún problema" después del choque. "En el PSOE se puede opinar, al final no pasa nada", ha asegurado el presidente de Castilla-La Mancha, que ha pedido "respeto" para su posición respecto a la ley de amnistía y los pactos de Pedro Sánchez. Sí ha admitido que se trata de una posición "claramente minoritaria". "Lo que hoy es minoritario a lo mejor el día de mañana no lo es", ha deslizado el dirigente socialista, que ha recordado que lleva militando en el PSOE desde los 16 años y ha defendido que nunca ataca "personalmente" en sus críticas a las decisiones de Ferraz. "Creo que se me tiene que permitir decirlo, pero dicen que ese no es el camino; esa es otra opinión, otra opinión más", ha zanjado.

Desde Ferraz descartan cualquier medida disciplinaria por las críticas lanzadas el miércoles por García-Page después de mantener una reunión informal con tres barones del PP, Juanma Moreno, Fernando López Miras y Carlos Mazón. En ese encuentro, además de alinearse con los presidentes populares en materia de financiación autonómica, se desahogó con sus homólogos de Andalucía, Murcia y la Comunidad Valenciana. "A mí están a punto prácticamente de extraditarme", bromeó el castellano-manchego, que recibió el apoyo de sus colegas, para enfado, por ejemplo, de José Luis Ábalos, exnúmero 3 del PSOE.

"Yo no puedo temer nada de mi partido", ha dicho el presidente de Castilla-La Mancha, que ha admitido que el momento "es delicado a nivel nacional". Se refiere así al "debate político muy agrio" sobre los acuerdos del PSOE con los independentistas y la presión que Junts per Catalunya somete al Gobierno de Pedro Sánchez para darle su apoyo en el Congreso. "Me importan las políticas, no los políticos", ha dicho antes de responder sobre la acusación que ha lanzado María Jesús Montero, que ha considerado que el barón socialista quiere notoriedad. "Es muy buena amiga y está haciendo muy buena política económica", ha zanjado después de asegurar que no tiene intención de ser "protagonista".

Tras la respuesta inicial de Óscar Puente, José Luis Ábalos y Santos Cerdán, este jueves se han sumado a la respuesta ministros como Ana Redondo o Fernando Grande-Marlaska. También lo ha hecho Ximo Puig, que ha mostrado su rechazo a las formas de Emiliano García-Page. "Yo le tengo que decir, es que en mi vida política jamás intenté hacer daño para beneficiarme", defendió. Puig, que en las últimas elecciones autonómicas mejoró el resultado del PSPV, pero no pudo gobernar por el hundimiento de Compromís y de Podemos, descartó que se deban tomar medidas contra el presidente de Castilla-La Mancha porque "cada uno se expresa como es y demuestra su talante".

Emiliano García-Page ha optado por bajar el diapasón después del cruce de declaraciones del miércoles con la dirección del PSOE a cuenta de la amnistía y las decisiones que ha tomado en los últimos meses la cúpula de Ferraz. "Estoy de acuerdo con el 90% de lo que hacen el Gobierno y el partido", ha dicho el presidente de Castilla-La Mancha en declaraciones en las Cortes de Toledo. Después de asegurar que el partido está en el "extrarradio" de la Constitución y llevarse una reprimenda formidable, el barón socialista rebajado el tono y ha recuperado una idea que ya ha lanzado antes y que consiste en que está alineado con las políticas sociales del Gobienro de Pedro Sánchez y que el disenso está en su política territorial.

Emiliano García-Page
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