El plan de la España vaciada para volver a la 'primera división' de la política

Ya han pasado tres meses desde el 23-J, la noche que desinfló las aspiraciones políticas de la España vaciada. Pese a estar en todas las quinielas para conseguir escaño en el Congreso, las formaciones que encabezan el movimiento, Teruel Existe y Soria ¡Ya!, no supieron leer la polarización de la campaña y se quedaron sin nada. Con el varapalo ya digerido, los partidos contra la despoblación trabajan en el rearme del proyecto. Quieren recuperar la voz más allá de sus territorios, volver a estar en la Cámara Baja. Para ello, aunque sobrevuele la duda de si pasó su momento, tienen un plan.

Tanto turolenses como sorianos sostienen una situación parecida: ambos tienen presencia en sus parlamentos autonómicos, si bien ninguna de las dos formaciones es decisiva a la hora de tomar medidas de envergadura ni recoger grandes inversiones. Sin embargo, no es una situación que a nivel estratégico les incomode, sino que consideran que puede ser una oportunidad para resurgir. Al no tener responsabilidades o tener que apoyar a un partido de gobierno, pueden actuar como outsiders.

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Enrique Delgado

Esta circunstancia les permite ubicarse en la centralidad del tablero y volcar toda su actividad sobre los asuntos que afectan a los intereses de sus provincias, esquivando polémicas propias del escenario más ideológico que les puedan pasar factura luego en las urnas. "Hay que dar guerra a nivel de Aragón dentro de ese bloque transversal que no está ni en la derecha ni en la izquierda", explican fuentes cercanas a Teruel Existe, donde son conscientes de la oportunidad: "Estar en minoría es una oportunidad para seguir haciendo esas propuestas que interesen a la gente".

Al margen de reforzar la imagen de partidos con fuerte carácter provincialista y centrados en conseguir inversiones más allá de cuestiones ideológicas, los puntales políticos de la España vaciada también han realizado cambios en sus equipos en estos meses. El más significativo quizá sea el nombramiento de Juan Antonio Palomar como presidente de Soria ¡Ya!, tras la salida de Silvia Largo. Palomar era uno de los tres procuradores que representa a la formación en las Cortes de Castilla y León y avanza, en conversación con El Confidencial, que en las próximas semanas se incorporarán diez personas más a una organización que necesita manos para seguir trabajando y que aproximadamente cuenta con 100 afiliados tras poco más de un año de vida.

En Teruel Existe también sufren este problema: no es demasiado sencillo encontrar personas solventes que quieren abandonar el sector privado para embarcarse en la defensa de proyectos así. Por ello asumieron el coste de incluir como jefa de gabinete de la vicepresidenta de la Diputación a Nieves Sánchez, mujer de Tomás Guitarte. Al margen de esta polémica, y una vez asentados en el Palacio de la Aljafería y en la Vicepresidencia de la Diputación de Teruel, han realizado otros cambios de calada en sus estructuras, como el nombramiento de Marian Rebolledo como nueva directora de Comunicación.

"Mallar el territorio"

"Estamos en la oposición, no somos decisivos, pero sí que estamos llevando propuestas para intentar sacarlas adelante, cosa que poco a poco vamos consiguiendo", insiste el nuevo presidente de Soria ¡Ya!, convencido de que el camino pasa por volver a ser fuertes en sus plazas. Al margen de explotar la transversalidad, apunta también que para llegar al Congreso es decisivo tener la capacidad de arrastre de voto que les llevó a arrasar en las autonómicas y eso pasa, indudablemente, por la capilaridad en todo el territorio.

En esta línea, Soria ¡Ya! apostará por reforzar su presencia en la provincia e intentar dominar en los pueblos, el factor que decantó la balanza a favor de PP y PSOE en las generales. Al ser un partido nuevo que apenas tiene dos cursos de vida, son conscientes de que deben "mallar el territorio". "Hay que estar en los pueblos, recorrer toda la provincia para poder crecer", asegura Palomar. En Soria ¡Ya!, por lo tanto, volverán a coger la carretera para dejarse ver por los pequeños pueblos de su provincia, la fórmula que les dio el éxito en la campaña de las autonómicas.

Autocrítica

Con su paso por el Congreso, Teruel Existe puso sobre la mesa el problema de la despoblación, pero la pasada legislatura también tuvo un coste para ellos. Las fuentes consultadas admiten que el paso de plataforma ciudadana a partido político, así como el apoyo a Pedro Sánchez en algunas votaciones parlamentarias, les pudieron pesar el 23-J en un escenario de polarización. Sin embargo, también piden tiempo y están convencidos de que volver a la Carrera de San Jerónimo no es una quimera. "La gente no valora realmente lo que tiene hasta que le falta", subrayan las fuentes consultadas, que estiman que desde su nuevo rol en las Cortes de Aragón podrán resurgir.

"Está claro que algo hicimos mal", reflexiona Palomar, quien admite que no supieron reaccionar a una campaña tan fuertemente polarizada entre el PSOE de Sánchez y el miedo a Vox. Pese a obtener casi el 20% de los apoyos en su provincia, fueron barridos por PP y PSOE: "La gente votó miedo".

Al margen de la arena política, la calle será también clave para los dos puntales de la España vaciada. Tradicionalmente, Teruel Existe y Soria ¡Ya! han sido capaces de unir a los ciudadanos de sus provincias en torno a temas claves como la falta de servicios o infraestructuras. Esta pata se debilitó cuando dieron el salto a los parlamentos y la consideran fundamental para aspirar a cotas más altas y dejar a un lado el lamento que repiten sus dirigentes estos días al ver cómo partidos canarios minoritarios se antojan decisivos en el nuevo equilibrio de fuerzas del Congreso.