Es noticia
Bildu pone Pamplona en el punto de mira tras su primer gran pacto territorial con el PSOE
  1. España
Los socialistas descartan una moción

Bildu pone Pamplona en el punto de mira tras su primer gran pacto territorial con el PSOE

Un cambio en el ayuntamiento solo sería posible con el apoyo de los socialistas. La coalición radical trabaja en convencerlos tras haber conseguido su apoyo para presidir la Federación Navarra de Municipios

Foto: Otegi, con Joseba Asiron detrás, interviene en un mitin de la campaña del 28-M. (EFE/Jesús Diges)
Otegi, con Joseba Asiron detrás, interviene en un mitin de la campaña del 28-M. (EFE/Jesús Diges)

Fue un antes y un después, un cambio de paradigma. El PSOE dio a Bildu el pasado viernes la presidencia de la Federación Navarra de Municipios y Concejos. Fue un apoyo explícito ―la izquierda abertzale radical necesitaba los votos a favor y no una abstención para arrebatarle el órgano a UPN― y el primer gran acuerdo entre los dos partidos. El pacto ha sacudido los cimientos de la política de la comunidad foral y este lunes Arnaldo Otegi expresaba su deseo de apear al partido foralista de la alcaldía de Pamplona y que el ayuntamiento caiga en sus manos. El movimiento sería posible siempre y cuando los socialistas apoyen una moción de censura, que de momento no contemplan en este momento.

Bildu trabaja ahora en convencer al PSOE, según apuntó Otegi y corroboró la portavoz de la formación en el Parlamento navarro. "Nos mantenemos serenos porque hay muchos intereses de por medio, pero vamos a ver si somos capaces de hacerlo. Desde el principio ya dijimos que María Chivite tenía que ser la presidenta del Gobierno de Navarra y Joseba Asiron el alcalde de Pamplona", defendió el líder de la izquierda abertzale radical en una entrevista en Radio Euskadi.

Foto: El nuevo presidente de la FNMC, Xabier Alcuaz, durante la Asamblea General Extraordinaria. Foto: EP

En la misma línea que Bildu, Geroa Bai, marca vinculada al PNV en Navarra, recordó que su compromiso es facilitar gobiernos “progresistas” en el mayor número de instituciones. Es decir, replicar, aunque con matices, la fórmula que ha permitido a María Chivite encadenar dos legislaturas al frente del Gobierno foral. Los ingredientes no son los mismos. Los ejecutivos navarros han sido posibles tras un pacto a tres entre socialistas, Geroa Bai y Podemos, y el apoyo externo de Bildu. Ese mismo equilibrio de fuerzas sería posible en el Ayuntamiento de Pamplona, con una diferencia sustancial: Bildu es la segunda fuerza municipal y no está dispuesto a cederle la alcaldía al PSOE, tercero en número de concejales. Y ahí reside la negativa de los socialistas. Un cambio en el consistorio pasa invariablemente por darle a Bildu el bastón de mando y el Partido Socialista no se puede permitir facilitar una institución como la alcaldía de Pamplona a la izquierda radical.

Y aunque en las filas socialistas aseguran que la moción de censura en el ayuntamiento no está encima de la mesa, extraoficialmente reconocen la “debilidad” del Gobierno municipal que lidera Cristina Ibarrola. El PSOE ha sido especialmente duro con la gestión de UPN al frente del consistorio en lo que va de mandato y hay quien ha querido ver en estos posicionamientos un aviso ante lo que puede suceder de aquí a unos meses. Sin embargo, fuentes socialistas sostienen que ese no es el escenario en el que se mueve el partido. A lo que apuntan es a un “bloqueo” del consistorio si la alcaldesa no se abre a “pactos transversales”.

Foto: La presidenta de Navarra, María Chivite, junto a las candidatas de Contigo Navarra y EH Bildu. (EFE/Jesús Diges)

Desde UPN, sin embargo, no descartan que las fuerzas de izquierdas ―Bildu, PSOE, Geroa Bai y Podemos, con un total de 16 concejales, dos por encima de los 14 que marcan la mayoría absoluta en el pleno― otorguen a la coalición abertzale la alcaldía. "No está en nuestra mano lo que vaya a ocurrir. Eso forma parte de una estrategia que, obviamente, no controlamos y no quisiéramos", reconoció el vicealcalde de Pamplona, Carlos Salvador. Los lazos de la formación con el PSOE están completamente rotos, a pesar de que hasta hace relativamente poco eran frecuentes los pactos entre ambos partidos.

El pacto con Bildu

El acuerdo entre Bildu y el PSOE para la presidencia de la Federación Navarra de Municipios tiene un hondo calado. La importancia de la institución, un órgano consultivo, puede ser relativa, pero el simbolismo es inmenso. Es el primer gran pacto entre los dos partidos que se salda con un beneficio tangible para la izquierda abertzale radical. Hasta ahora, Bildu había permitido los gobiernos de Chivite, además de aprobar sus presupuestos, sin ningún cargo a cambio. De hecho, la coalición se había resignado a perder la alcaldía de Pamplona. El PSOE permitió la investidura de la alcaldesa de UPN el pasado mes de junio y Bildu facilitó el segundo Ejecutivo de Chivite en agosto.

Foto: La socialista María Chivite toma posesión del cargo de presidenta del Gobierno de Navarra. (EFE)

Las explicaciones del PSOE han sido confusas. Este lunes, Ramón Alzórriz aseguró que el acuerdo “no suponía un cambio de postura”. El único objetivo, según el socialista, era ganar “mayor representatividad en los órganos de gobierno”, aunque añadió que el partido no podía dar la presidencia a UPN y permitir así que use una institución para “atacar” al Gobierno navarro. Mientras que para los foralistas el movimiento en la Federación de Municipios responde al pacto oculto que el PSOE ha suscrito con Bildu para garantizarse la investidura de Pedro Sánchez y la de Chivite. “En política, nada es gratis”, zanjó Javier Esparza.

Fue un antes y un después, un cambio de paradigma. El PSOE dio a Bildu el pasado viernes la presidencia de la Federación Navarra de Municipios y Concejos. Fue un apoyo explícito ―la izquierda abertzale radical necesitaba los votos a favor y no una abstención para arrebatarle el órgano a UPN― y el primer gran acuerdo entre los dos partidos. El pacto ha sacudido los cimientos de la política de la comunidad foral y este lunes Arnaldo Otegi expresaba su deseo de apear al partido foralista de la alcaldía de Pamplona y que el ayuntamiento caiga en sus manos. El movimiento sería posible siempre y cuando los socialistas apoyen una moción de censura, que de momento no contemplan en este momento.

Noticias de Navarra PSOE
El redactor recomienda