La amnistía dificulta el apoyo de Coalición Canaria a Sánchez y se inclina por la abstención

El apoyo de Coalición Canaria a la investidura de Pedro Sánchez no será tan fácil, aunque se asuman sus exigencias. Los nacionalistas canarios han añadido una cláusula sobre la amnistía en el hipotético acuerdo. Pesa el rechazo entre su electorado al acuerdo con el PSOE y quieren saber "antes de subirnos en ese tren" qué pactarán los socialistas con los independentistas catalanes. Fuentes del partido que dirige el presidente de Canarias, Fernando Clavijo, sostienen que "a día de hoy" no se entendería ni en el partido ni entre su electorado un pacto con Sánchez si finalmente acepta una ley de amnistía.

En este escenario, y aun aceptando sus exigencias basadas en la agenda canaria y el traspaso de partidas pendientes en los presupuestos, las mismas fuentes se inclinan por una abstención. Su lectura es que, de echar a andar la legislatura, el PSOE tendrá que acudir igualmente a ellos para conseguir su voto. Cuando se debata la primera ley o cuando se presenten los siguientes presupuestos.

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El valor de su única diputada en el Congreso, Cristina Valido, es que sería crucial para que el Ejecutivo solo necesitase la abstención de Junts o alguno de otros grupos del bloque soberanista en lugar de su voto a favor. Un apoyo que facilitaría la gobernabilidad a Sánchez cuando la aritmética parlamentaria cierra la puerta a la geometría variable. Si se abre el debate sobre el modelo territorial durante esta legislatura, como demanda el PNV, los nacionalistas canarios también entrarían en la ecuación. Coalición Canaria se posiciona a favor de afrontar este debate. Tanto para reforzar su perfil más identitario como para reivindicar el cumplimiento íntegro de los "derechos adquiridos" en el Estatuto de Autonomía de Canarias como para aspirar a garantizar el tratamiento de región ultraperiférica reconocido por la UE.

Su objetivo pasa por situarse como bisagra y no encuadrarse en ningún bloque, tras apoyar la investidura de Feijóo y abrirse a hacer lo propio en la de Sánchez. "En esos dos bloques nosotros no estamos", explicó Valido durante su intervención en el debate de investidura de Feijóo con un alegato en contra de la polarización. Asimismo, subrayó que "el mandato de los canarios es que se solucionen sus problemas". Muestra de esta versatilidad es que ya se desmarcaron del PP en la primera sesión plenaria para apoyar el uso en el Congreso de las lenguas cooficiales. Entonces se sumaron al bloque conformado por el PSOE y sus potenciales socios de investidura (Sumar, ERC, Junts, EH Bildu, PNV y BNG).

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De abstenerse finalmente en la investidura de Sánchez, los socialistas no podrían abaratar el precio de Junts al seguir precisando su voto a favor. Con todo, en la Moncloa aseguran que el acuerdo con el partido de Carles Puigdemont no variará, aunque valga con su abstención. Otra cosa sería durante la legislatura, que le otorgaría un mayor margen. El Gobierno de Pedro Sánchez rompió moldes esta legislatura al conseguir aprobar tres presupuestos consecutivos con una coalición en minoría. Sin embargo, contó con cierto margen para intentar una geometría variable en leyes que no apoyaron algunos de sus socios o decretos como el de la reforma laboral. Ahora, no tiene alternativas y los minoritarios hacen cuentas para anticipar cuándo serían imprescindibles ante la abstención de algún otro grupo.

Guiños y recelos

Los negociadores del Gobierno están convencidos de poder atraer a los nacionalistas canarios. Según avanzan, están dispuestos a firmar la denominada agenda canaria. La misma lista de exigencias que los nacionalistas canarios pactaron con el PP a cambio de su voto en la investidura de Alberto Núñez Feijóo. Asimismo, fuentes de la cúpula de Hacienda aseguran que tampoco tienen inconveniente en sentarse con la formación para repasar las transferencias pendientes a este territorio en los actuales presupuestos. Un pago por adelanto sin el que CC ni siquiera accederá a negociar.

Opinión

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Como primer guiño, Interior ha accedido a convocar a Canarias a las reuniones de inmigración, con el objetivo de reforzar la colaboración entre administraciones. Una presencia que vienen reclamando de forma insistente desde que accedieron al Ejecutivo autonómico en las pasadas elecciones.

Los recelos de Coalición Canaria con el PSOE se deben también a que, en primer lugar, llevan sin reunirse con los socialistas desde la semana previa a la conformación de la Mesa del Congreso. Entonces, no llegaron a un acuerdo, tras ofrecer el PSOE un "pacto de mínimos" basado en extender la gratuidad del transporte público, y optaron por apoyar a la candidata del PP a la presidencia del Congreso. En segundo lugar, porque exigen una doble garantía para asegurar las partidas presupuestarias que todavía no han recibido. Esto es, que se transfieran de forma inmediata las que puedan ejecutar en plazo, antes de final de año, y que el resto se comprometan en las cuentas de 2024.