La investidura de Feijóo desnuda el pulso entre Sumar y Podemos entre críticas a Yolanda Díaz

Una portavoz parlamentaria cuestionada por propios y extraños; las dos ministras en funciones de Podemos enmendando la estrategia y señalando importantes ausencias, y una líder diluida, alineada con Pedro Sánchez y decidida a no marcar perfil propio. Las dos primeras sesiones del pleno de investidura de Alberto Núñez Feijóo, que se reanuda el viernes, y que previsiblemente se saldará con su fracaso, han servido para mostrar, con total crudeza, la dimensión del pulso del partido de Ione Belarra con Sumar. Hasta el punto de que la propia secretaria general morada y ministra de Derechos Sociales en funciones, llegó a criticar la hoja de ruta de Díaz, este miércoles, desde una de las salas del grupo parlamentario al que pertenece.

El entorno de Díaz asumía que el discurso de Marta Lois, el martes, no estuvo a la altura, como reconocían desde distintos partidos dentro de la coalición. "Faltaba nervio democrático", dijo el diputado morado Javier Sánchez Serna el jueves, en RNE. Y Podemos aprovechó el vacío comunicativo para insistir en que se han visto silenciados, también, en lo que toca al pleno de investidura. Reclamaron intervenir, sin que Sumar diera su visto bueno. "Lo hemos solicitado, es una decisión de Yolanda Díaz, que no ha querido que intervengamos en este pleno", afirmaba la ministra de Igualdad en funciones, Irene Montero, cuando convocó a la prensa en los pasillos del Congreso, diez minutos antes de que arrancara la sesión de este miércoles. La consigna en Sumar es que ahora no toca ir más allá, que Díaz había decidido intervenir sólo si lo hacía el presidente, y que el aura triunfalista del candidato que no tiene los apoyos necesarios para ser presidente se extinguirá pronto. Sin embargo, hasta ellos reconocían que Feijóo salía fortalecido de estas jornadas.

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La propia Montero alabó la estrategia del PSOE -"Podría haber sido un discurso que hubiera hecho Podemos"- , enmendando la plana a Díaz, que acogió el discurso del socialista Óscar Puente con gesto serio, sin aplaudir. Puso un tuit criticando este "espectáculo", y el miércoles repitió estas palabras, cuestionando que los "problemas" de la ciudadanía hubieran "quedado fuera" de la Cámara. No fueron Lois, Enrique Santiago (IU) o Aina Vidal (Comunes) quienes defendieron sus recetas, más allá de la ley de amnistía para los involucrados en el procés, y ambos se centraron en repeler los ataques de Feijóo y en intentar recomponer el relato que había tratado de tejer Lois.

Cuando Sumar le dejó fuera del reparto de portavocías, Podemos ya advirtió de que sus palabras seguirían teniendo eco. El miércoles, Belarra recuperaba este llamamiento, desgranando el contenido de su enmienda a Díaz desde la televisión de Pablo Iglesias, Canal Red, como después haría el líder histórico de los morados. "Sobró bipartidismo, faltó feminismo y ecologismo", "propuestas y hablar de los problemas reales de la gente", abundó. "Creo honestamente que faltó la voz de Podemos", "para poner al PSOE contra el espejo". "Hay cosas que sólo se dicen si nosotras salimos a la tribuna", insistió, reciclando sus críticas a Díaz por "silenciar" a su partido.

La mención a la ausencia del ecologismo en los discursos no es casual. Alianza Verde, el partido de Juantxo López de Uralde, criticó este miércoles que ninguna formación se hiciera eco de recetas para enfrentar la crisis climática. "Se ha hablado muy poco de la lucha climática y la única referencia relevante la ha hecho el candidato Feijoo, pero para ratificar el retardismo del Partido Popular", denunció, criticando el "escaso compromiso ecologista" de sus señorías, también de la coalición de la que forma parte, aunque lo dejaran fuera de las listas.

No es la primera vez que los de Uralde aprecian esta ausencia de "compromiso ecologista" en los discursos de Sumar, pero hasta ahora no habían sido tan explícitos. Y, durante la tarde, Iglesias aprovechaba su televisión para recuperar intervenciones de exportavoces de Podemos -Montero, Pablo Echenique, o Rafa Mayoral- para compararlas con la que protagonizó Lois. "Es una recién llegada", dijo Belarra sobre la portavoz hace tres semanas, para explicar el intento por "silenciar a las fuerzas políticas estatales". También criticó su "falta de conocimiento de cómo funciona el sistema parlamentario".

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"Hay gente que multiplica la herencia y otra que la dilapida porque no sabe gestionarla. Vivir de las rentas sin tener un plan tiene fecha de caducidad", escribió Martina Velarde, una de las cinco diputadas moradas, en su perfil de la red social X, antes Twitter. El presidente de la fundación de Podemos y exjefe de Gabinete de Iglesias en la vicepresidencia del Gobierno, Julio Rodríguez, deslizó la palabra "pagafantas" en las redes, y Juan Carlos Monedero, cofundador del partido, afirmó que Sumar yerra "dejando al PSOE representar la crítica dura contra el PP". "La izquierda real se desvanece", avisó.

Alberto Garzón, líder de IU y ministro de Consumo en funciones, esperaba a Díaz a su entrada en la primera jornada del debate, cerrando filas después de endurecer el tono de sus reivindicaciones a la líder de Sumar, el pasado viernes. Y Mónica García (Más Madrid), apoyaba con su presencia en la tribuna de invitados, ya durante la tarde. Avalaban públicamente a Díaz en un momento complicado, en el que Sumar ha quedado fuera de foco, y en el que las críticas de los morados arrecian.