Dimite por motivos personales el jefe de gabinete de Conde-Pumpido

El jefe del gabinete del presidente del Tribunal Constitucional, Cándido Conde-Pumpido, acaba de presentar su dimisión por motivos personales, informan fuentes jurídicas. El cese de Antonio Ramos ha sido acordado por el presidente a petición propia del asistente. Pumpido tendrá ahora que nombrar a una nueva persona para dirigir un gabinete que lleva las riendas de la secretaría particular del presidente y realiza, fundamentalmente, labores de asistencia.

El nombramiento es de libre designación, ya que se trata de un cargo de confianza. La relación personal del presidente con su jefe era excelente y desde la Presidencia siempre se ha valorado mucho su trabajo, apuntan las fuentes consultadas. Las funciones del jefe de gabinete se centran, según describe el propio TC, en la custodia los archivos del presidente, la recopilación de información de interés para los magistrados, las relaciones del tribunal con los medios de comunicación, la organización de los actos de carácter institucional y cualquier otra tarea específica que le sea encomendada por el presidente.

Entre sus funciones está custodiar los archivos del presidente, recopilar información para los magistrados o las relaciones con los medios

Pumpido llegó a la presidencia en enero de 2023, después de una renovación parcial del órgano que se produjo en medio de la polémica y con oposición de una parte del Consejo General del Poder Judicial, que debía designar a sus candidatos. Arrancó con el propósito de "devolver el prestigio" al tribunal y eliminar retrasos intolerables e incomprensibles como el que arrastraba por entonces el recurso contra la ley del aborto de la etapa Zapatero. Su objetivo, reivindicado desde entonces en varias ocasiones de forma pública, es que los amparos se resuelvan en un plazo razonable, sin que se produzcan situaciones en las que las sentencias terminan por dictarse cuando el asunto abordado ha perdido la trascendencia inicial.

En esta última etapa, el TC se encuentra de forma inevitable en el foco a consecuencia de las negociaciones entre el Gobierno en funciones y Junts de cara a la investidura. Carles Puigdemont exige para prestar su apoyo una ley de amnistía que acabará de forma inevitable en el Constitucional. El tribunal cuenta con mayoría progresista desde la mencionada renovación.

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Pumpido conoce a fondo los asuntos vinculados con el procés. Se ocupó de coordinar la gestión de todos los recursos vinculados con el 1-O, que alcanzaron en una determinada etapa un volumen descomunal. Durante el proceso de su nombramiento, dejó claro que considera que bajo la carta magna no tienen cabida procesos secesionistas ni de autodeterminación.

Una dilatada trayectoria

Ramos Membrive, que ahora abandona el tribunal, es licenciado en Derecho por la Universidad de Granada y en 2004 superó las pruebas de acceso a la Carrera Diplomática. Hasta dar el salto al Constitucional, ejerció como consejero técnico en la subdirección general de Asuntos de Justicia e Interior de la Secretaría de Estado de la Unión Europea, consejero en la Misión Permanente de España ante la OSCE en Viena, encargado de los asuntos Consulares en la Embajada de España en Kiev, consejero en la embajada de España en Santo Domingo y consejero técnico en la subdirección de Europa Oriental de la Secretaría de Estado de Asuntos Exteriores.

Entre 2016 y 2019, bajo las presidencias de los magistrados Francisco Pérez de los Cobos y Juan José González Rivas, Ramos Membrive ya ejerció como jefe de sus respectivos gabinetes, pero hace cuatro años abandonó el tribunal para convertirse en cónsul general de España en Quito, Ecuador. En 2021, volvió de nuevo al tribunal para ocupar el mismo puesto, desempeñando así el cargo bajo las presidencias tanto de Pedro González-Trevijano como, en esta última etapa, el propio Conde-Pumpido.