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SOS Rural: la rebelión de los granjeros holandeses ha llegado al campo español
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DENUNCIAN QUE EL CAMPO NO AGUANTA MÁS

SOS Rural: la rebelión de los granjeros holandeses ha llegado al campo español

La plataforma ha convocado una manifestación para este domingo en Madrid. "No somos ni de izquierdas ni de derechas", aseguran. Denuncian la inacción política ante la sequía, así como el proteccionismo excesivo

Foto: Manifestación del mundo rural en Madrid el año pasado. (EFE/Luca Piergiovanni)
Manifestación del mundo rural en Madrid el año pasado. (EFE/Luca Piergiovanni)

El mundo rural español argumenta estar harto y, para alzar su voz, ha organizado un movimiento ciudadano para parecerse al partido de los granjeros holandeses, que recientemente ganaron las elecciones provinciales en el país. Para los españoles, las ayudas públicas anunciadas recientemente no han sido suficientes para calmar el descontento del sector. Tanto es así que se ha conformado esta plataforma “de forma espontánea” con la intención de hacer mella en la política española. Por el momento, no se definen como parte de ninguna ideología concreta —"no somos ni de izquierdas ni de derechas"—, sino defensores de lo suyo. Ya tienen contacto con partidos en defensa de lo agrario como Holanda, Alemania y Francia.

Foto: La líder del BBB reacciona a los resultados de las últimas elecciones holandesas. (EFE/Sem van der Wal)

Actualmente, se encuentran ya en Bruselas trabajando con holandeses, franceses y alemanes para establecer algún tipo de corriente común y hablar conjuntamente de problemas similares en las diferentes naciones. Y no dudan en oficializarse en los próximos meses para tener baza en las elecciones europeas del 2024. Todo dependerá, en gran parte, del éxito o fracaso de la manifestación convocada en Madrid el próximo domingo 14 de mayo.

Los holandeses son su gran inspiración. El Movimiento Campesino Ciudadano (BBB) neerlandés ganó las elecciones provinciales el pasado mes de marzo. Los granjeros de Países Bajos contaron con una carismática líder que allanó el camino: la característica Van der Plas. El discurso es similar al de esta nueva plataforma española: las dificultades para sobrevivir en el mundo rural, la subida de precios por la inflación, el todavía impacto económico que dejó la pandemia y la ausencia de representantes sólidos en la política nacional que responda a sus intereses. SOS Rural mira con esperanza a BBB y confían en que el proyecto pueda, también, consolidarse en España.

Foto: Ganaderos durante su tramo final hacia Madrid. (EFE/Raúl Sanchidrián)

Una deriva interesante sobre la que surgió el partido BBB fue la cuestión del nitrógeno. El Gobierno holandés quieren hacer desaparecer este gas contaminante —este país es uno de los grandes emisores europeos—. Para ellos, se apostó por el cierre de granjas del país, lo que causó un tremendo descontento entre los ganaderos. “El nitrógeno que emite una vaquita es parte del ciclo de la vida. Lo que sí contamina es el puerto de Róterdam”, señala Viciedo, defendiendo claramente a los agrícolas neerlandeses.

Foto: Unas vacas pastan con sus terneros en un prado en Ribera de Arriba (Asturias). (EFE/J. L. Cereijido) Opinión

En su página web aparecen como “una organización apolítica que reivindica las actividades del mundo rural”, pero aseguran que el objetivo sí es participar e influir en la vida política y reconducir el interés hacia lo rural. “Queremos estar presente de forma permanente en el ámbito político y social, y trabajar en articular una red de movimientos similares en Europa”, señalan. Víctor Viciedo, portavoz de la plataforma y agricultor de cítricos y aguacates, argumenta que “no hay ideología, a no ser que las políticas agrarias sean de derechas o de izquierdas”. Y señala directamente la Agenda 2030 y Red Natura 2000, asegurando que proteger espacios solo les “perjudica”, quitándoles terreno para cultivar. Además, también critica la desaparición de presas y azudes en tiempos de sequía, aunque este artículo de El Confidencial explicaba que gran parte de ellos son "obstáculos fluviales".

El trasfondo del movimiento es que, según argumentan, básicamente nadie les hace ni caso. Por ello, han convocado una manifestación para el próximo domingo 14 de mayo en Madrid con tractores, caballos y demás parafernalias. La idea es dar un paso más allá después de la protesta que se organizó en Madrid el pasado 20 de marzo de 2022. Ahora, además, atraviesan la baza de la sequía. Un problema horizontal en todo el país con especial incidencia en todo el sector primario. Por ello, el Consejo de Ministros anunció este jueves un paquete de ayudas de 2.190 millones al mundo rural por la crisis del agua.

Foto: Luis Planas, Isabel Rodríguez y Teresa Ribera en rueda de prensa. (EFE/J. P. Gandul)

Para SOS Rural, no es suficiente ni eficaz. “Reacciona justo ahora, a horas de la manifestación, después de meses y meses de sufrimiento en el campo sin que nadie nos escuchara, ni el Gobierno ni las comunidades autónomas”, afirma SOS Rural, replicando que “las sequías son cíclicas en España y se solucionan conservando el agua cuando llueve y distribuyéndola cuando no lo hace gracias a un plan hidrológico solidario y vertebrador”.

SOS Rural representa todas las actividades del campo: agricultura, ganadería, pesca, caza…, y está formado por unas 300 asociaciones. De hecho, y siempre según fuentes de la propia organización, algunas de estas formaciones han tenido que desligarse de la manifestación del 14 de mayo porque están “están recibiendo presiones y amenazas” y “advirtiendo de que podrían revisarse ayudas y subvenciones que permiten la existencia de estas organizaciones profesionales”.

El mundo rural español argumenta estar harto y, para alzar su voz, ha organizado un movimiento ciudadano para parecerse al partido de los granjeros holandeses, que recientemente ganaron las elecciones provinciales en el país. Para los españoles, las ayudas públicas anunciadas recientemente no han sido suficientes para calmar el descontento del sector. Tanto es así que se ha conformado esta plataforma “de forma espontánea” con la intención de hacer mella en la política española. Por el momento, no se definen como parte de ninguna ideología concreta —"no somos ni de izquierdas ni de derechas"—, sino defensores de lo suyo. Ya tienen contacto con partidos en defensa de lo agrario como Holanda, Alemania y Francia.

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