Claves de la erupción del volcán en La Palma: ¿Cómo se produjo? ¿Cuánto durará? ¿Qué puede pasar?

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"Esto no es un simulacro". Eso es lo que gritaban agentes de la Guardia Civil la noche del domingo mientras patrullaban en coche por La Palma. Horas antes, ese mismo mediodía, las predicciones de los expertos se cumplieron y el volcán Cumbre Vieja entró en erupción. Miles de vecinos tuvieron que ser evacuados con urgencia, así como animales de ganado, mientras observaban con tristeza e incredulidad cómo sus casas y muchas de las calles por las que tan solo un día antes habían paseado, se sometían a la lengua de lava del volcán o, simplemente, desaparecían bajo su paso.

Después de las advertencias que unas semanas antes ofrecieron los vulcanólogos y geólogos al detectar un ejambre sísmico con miles de pequeños terremotos, ahora son muchas las preguntas que nublan los pensamientos de expertos y ciudadanos. Aquí una recopilación de las principales claves para entender qué es lo que está pasando en la isla canaria de La Palma:

¿Cómo se produjo la erupción del volcán?

Desde el pasado 11 de septiembre, la isla de La Palma experimentó más de 4.000 eventos sísmicos, de los cuales, unos 900 se originaron bajo el volcán Cumbre Vieja, lo que provocó que el Gobierno de Canarias activara dos días más tarde el Plan Especial de Protección Civil y Atención a Emergencias por Riesgo Volcánico (Pevolca). Según determinó el Comité Científico, los datos registrados de emisión de Helio-3 confirmaban el carácter magmático de este proceso, al registrarse el mayor valor observado de los últimos 30 años.

Lo que estaba sucediendo entonces es lo que se conoce como un enjambre sísmico, una sucesión de actividad en el subsuelo que puede durar días, semanas o meses; un fenómeno que ya se había dado en Canarias en ocasiones anteriores. Sin embargo, tal y como destacó el geólogo Nahúm Méndez a este medio, en este caso es diferente debido a que la profundidad de los terremotos es menor, puesto que "el movimiento del magma hacia arriba".

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En ese momento, el experto ya advirtió que los terremotos podían estar relacionados con la actividad volcánica por dos motivos: la superficie de la isla se había deformado 10 centímetros desde el inicio del enjambre sísmico y que desde el Instituto Volcanológico de Canarias (Involcan) localizaron un reservorio magmático de 11 millones de metros cúbicos (11 Hm3) en el interior de Cumbre Vieja. En declaraciones de Méndez, el reservorio de magma de este volcán es pequeño, pero sí es destacable que se sitúa a poca profundidad, ya que eso significa que el magma está cada vez más cerca de la superficie.

Ese fue, por tanto, la antesala de la erupción del volcán que se desató en la zona conocida como Cabeza de Vaca y que pertenece al municipio de El Paso. Hasta que el domingo, 19 de septiembre, la isla fue sacudida por una serie de terremotos que comenzaron antes de las siete de la mañana y, finalmente, a las 15:20 horas (hora local) se desató lo que se conoce como una erupción fisural en la superficie del volcán. Un momento que fue capturado por el Involcan, cuyas señalas sísmicas grabaron el sonido de "un tremor continuo" que precedió a la expulsión de la lava.

En tan solo unos segundos, una gran columna de cenizas generada por el magma del volcán —a 1.075 grados centígrados de temperatura— dio paso a diversas lenguas de lava que emergían a borbotones desde varias bocas eruptivas, que actualmente se han fijado en un total de ocho.

¿Cuánto puede durar?

Esta es la pregunta más popular entre los expertos y la más difícil de diagnosticar. Según ha apuntado el director del Instituto Vulcanológico de Canarias, Nemesio Pérez, a Cadena Ser, el tiempo de la erupción del volcán puede durar "desde varias semanas hasta pocos meses". Asimismo, ha añadido que solo podrá darse por finalizado este proceso cuando pasen uno, dos o tres días sin que la lava emita SO2.

"Ahora toca observar la erupción y ver cómo va evolucionando todo juntando diversas señales. En estos momentos, no se puede saber cuánto tiempo va a durar la erupción: quizás horas, días, semanas o meses. Es imposible de predecir a priori", ha explicado el geólogo Nahúm Méndez, a Teknautas. Mientras que el catedrático de Geología de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria, José Mangas, apunta a que el fin de la actividad eruptiva llegará cuando las fisuras de la lava vayan perdiendo fuerza, destacando que "ahora mismo, están saliendo muchísimos metros de lava por segundo de las fisuras", por lo que resulta imposible determinar cuándo puede frenar y anima a esperar unos días para ver cómo evoluciona.

¿Qué pasará ahora?

Desde que Cumbre Vieja entró en erupción, geólogos y vulcanólogos comenzaron sus balances. Según estimaron en un principio, cuando la lava comenzó a correr colina abajo, los expertos auguraron que se trata de una erupción estromboliana —erupciones en las que no es tanta la cantidad de lava que expulsa como la de piroclastos, fragmentos de lava que salen expulsados junto a los gases—, en la cual, el magma del volcán está compuesto por vapor de agua (90%) y toxicidad (10%) que es peligrosa si se inhala por su contenido en carbono, azufre, fluor y cloro. De acuerdo con los cálculos, las erupciones pueden alcanzar un máximo de un kilómetro de altura.

"La erupción significa que el magma se ha podido abrir camino hasta la superficie a través de la corteza. Es normal que durante su ascenso tenga que fracturar la roca y esa facturación provoca que se generen terremotos. También hay que saber que al ascender este magma abomba la superficie de la isla como si fuese un globo y a veces para reajustar esta tensión acaba fracturándose y provocando movimientos. Por lo que el que haya una erupción no implica que acaben los terremotos de por sí, ya que pueden continuar fenómenos de inyección de magma en otros puntos", señala a este medio Méndez. El experto, a su vez, sugiere seguir de cerca la evolución de la lava para prevenir los posibles incendios a su paso, algo que, en su opinión, puede llegar a ser muy peligroso.

La colada de lava alcanza una altura media de seis metros que avanza a 700 metros por hora, arrasando a su paso casas, cultivos e infraestructuras. El nuevo volcán que estalló este domingo en La Palma está emitiendo de 6.000 a 9.000 toneladas diarias de dióxido de azufre (SO2), otro de los grandes riesgos; los gases que contienen elementos tóxicos que pueden ser letales para los seres vivos.

Pero, ¿qué es lo que se puede esperar tras el despertar de Cumbre Vieja? Tal y como se ha mencionado, es casi imposible de predecir cuánto puede durar esta erupción. No obstante, lo que sí han podido avanzar los expertos y así lo ha expresado el presidente del Gobierno canario, Ángel Víctor Torres, la lengua de lava que emite el volcán podría llegar al mar, concretamente en la costa de Tazacorte, posiblemente a través de Playa Nueva, en Los Guirres. Además, aunque se haya producido una ralentización del movimiento lávico que implica que este fenómeno no se produzca durante la noche del martes, Torres ha recalcado que "es absolutamente imprescindible extremar todas las medidas de seguridad porque estamos ante una circunstancia tremendamente peligrosa".

Esto podría suponer un problema, puesto que los ríos de lava sepultarán comunicaciones terrestres, eléctricas y telefónicas y crearán una lluvia ácida cuando lleguen al mar, por lo que a las viviendas y terrenos afectados se sumará la pérdida de infraestructuras. Lo que pase una vez haya alcanzado el mar, será un choque térmico muy notable, a tenor de los 1.100 grados que puede tener el material volcánico que entre en contacto con un agua que está a 23 grados. "Habrá explosiones, es como si mezcláramos aceite hirviendo con agua. Se puede generar una lluvia ácida que cause a la población irritaciones de garganta y de nariz", ha explicado Mangas en declaraciones a Efe.

Pese a las previsiones iniciales, la lava no alcanzó en la noche del lunes el agua marina, sino que ha seguido avanzando, comiéndose más terreno y dando lugar a una ampliación de las evacuaciones, que ya se encuentran en 5.500, dado que en la noche del lunes Cumbre Vieja contó con una nueva boca eruptiva en las cercanías del pueblo de Tacande, en El Paso. Además, sobre las 21:32 horas del lunes se detectó un terremoto de magnitud 3,8 con epicentro en sureste del municipio de Tazacorte.

¿Cuáles son los daños provocados?

Los últimos datos registrados y aportados por el Cabildo de La Palma, Mariano Hernández Zapata, centenares de viviendas se han visto afectadas por la cola de lava de Cumbre Vieja y, al menos hasta el momento, han sido evacuadas más de 5.000 personas procedentes de diferentes zonas de la isla: El Paso, Tazacorte y Los Llanos de Aridane. Por el momento no ha habido que lamentar daños humanos.

Además, el volcán ha provocado el cierre de siete carreteras, algunas sepultadas por la lava. Las vías afectadas son la LP301 (El Refugio del Pilar-San Isidro) y la LP212 (Tacande), en El Paso; la LP214 (Los Llanos-Mirador de los Brecitos), la LP211 (Las Manchas-Todoque) y la LP213 (Los Llanos-Tajuya-Todoque-Puerto Naos), en Los llanos, la LP2 en Tajuya. Además, el Cabildo de La Palma informa de la suspensión de las líneas regulares de guagua 210 (Los Llanos-Fuencaliente) y la 24 (Los Llanos-Puerto Naos).

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EFE

Uno de los inmuebles más castigados por las lenguas incandescentes ha sido el colegio de Los Campitos en El Paso, donde estudiaban 23 alumnos. También peligra el de Todoque, en Los Llanos de Aridane; por lo que Educación mantiene, hasta nuevo aviso, la suspensión de las clases en El Paso, Tazacorte y El Paso, una medida que afecta a un total de 20 centros. Según han informado desde el 112 Canarias, los "núcleos más vulnerables" son El Paraíso y Los Llanos. Un investigador del Real jardín Botánico estima que el suelo volcánico de La Palma podría tardar más de 20 años en volver a ser fértil.

Tal y como ha explicado el presidente de Canarias, se vive una "situación tremendamente peligrosa" en La Palma y la isla está "gravemente afectada" por la emergencia, especialmente por las zonas de cultivo, carreteras e infraestructuras (entre ellas, colegios y viviendas) que están siendo engullidos por la lava. Asimismo, ha anunciado que el Gobierno regional está trabajando en un borrador de decreto ley para poder recalificar los terrenos afectados por la erupción.

Los daños no solo han llegado a escuelas y hogares, sino también a entre 300 y 400 explotaciones agrícolas, especialmente de plátano, que han sido arrasadas por las lenguas de lava. En el caso del ganado, la previsión de que la erupción acabaría produciéndose, permitió evacuar a los animales hacia zonas seguras, según ha especificado, según ha indicado el secretario de Organización de UPA Canarias, Jorge Pelayo, a Efe. Para consultar, en tiempo real, las zonas que están sufriendo más las consecuencias de la actividad volcánica se ha activado este enlace.

¿Cuándo fue la última erupción?

Precisamente este año se cumplen 50 años de la última erupción terrestre de un volcán que asoló la isla de La Palma. La última afectó a la zona sur y fue el Teneguía. El 20 de octubre de 1971 comenzaron a surgir los primeros temblores en la tierra, pero no fue hasta seis días más tarde cuando entró en erupción. Sin embargo, otras han surgido más recientemente que esta en las Islas Canarias.

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La última catástrofe natural de este calibre que afectó a la región se produjo en 2011, en El Hierro. La actividad sísmica del volcán se prolongó durante semanas. No obstante, la erupción de entonces no fue terrestre, sino submarina. Según publicaron en la revista 'Nature Ecology & Evolution', el despertar de Tagoro duró 138 días y, según comprobó un equipo de expertos, aunque tuvo fatales consecuencias para la fauna marina, la erupción también dio lugar a la creación de unas bacterias hasta el momento desconocidas para la comunidad científica.

¿Quién cubre los daños ocasionados?

Como ocurre en casos de inundaciones o tempestades ciclónicas, las aseguradoras no cubren los daños ocasionados por la lava de Cumbre Vieja, puesto que las indemnizaciones corren a cargo del Consorcio de Compensación de Seguros, una empresa pública que se nutre de las aportaciones de las aseguradoras, informan desde el comparador Acierto.com.

Para que esto ocurra, es indispensable que los propietarios de las viviendas afectadas cuenten con un seguro de hogar y estar al corriente del pago de las cuotas y lo mismo sucede con la póliza del coche si, por ejemplo, la lava lo engulle o la ceniza daña el motor. Los inmuebles que se han visto castigados por la erupción tendrán que contactar con su aseguradora, en primer lugar y seguir las indicaciones para reclamar al Consorcio de Compensación del Seguro.

Para estos casos, es recomendable hacer una lista de todos los daños materiales. Ahora bien, en caso de que se declare esta actividad eruptiva como una catástrofe natural, las indemnizaciones a las viviendas correrán a cargo del Gobierno, y no el Consorcio de Compensación de Seguros ni la aseguradora.