Vuelve el choque Moncloa-Madrid: "No hay un señalamiento así con otra región"

Otro enfrentamiento entre el Gobierno y la Comunidad de Madrid. Ocurrió en la primera ola de la pandemia y todo apunta a que habrá un nuevo choque entre administraciones en lo que muchos llaman ya la segunda oleada por el avance de los contagios. La presidenta de la comunidad se revolvió ayer cuando Fernando Simón aseguró que “una gran parte de los diagnósticos y defunciones se deben a una sola comunidad, la de Madrid”. “Es un ensañamiento injusto”, lanzó Isabel Díaz Ayuso.

En su equipo, reconocen que “se sorprendieron mucho” al escuchar al director del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias (CCAES) “señalar con el dedo de manera tan contundente” una autonomía. Un “señalamiento” que a ojos del Gobierno regional se repitió esta mañana con las afirmaciones de Pedro Sánchez en la Cadena SER: “Nos preocupa el estado de la salud pública y la evolución de la pandemia en Madrid”.

En entorno de Ayuso entiende los últimos movimientos del Ejecutivo, a través de sus portavoces y hoy por boca del presidente, como una nueva campaña contra la comunidad. “En Cataluña hubo una incidencia brutal en agosto, igual que en Aragón. Jamás hubo un señalamiento así. Nunca. Estamos viendo una estrategia clarísima y es cargar contra Madrid”, repiten desde la Puerta del Sol, sin esconder un malestar que va en aumento y que recuerda mucho a la situación de enfrentamiento vivida hace meses.

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Para el Gobierno regional, son distintos factores los que influyen. “Sánchez quiere tapar su incapacidad de una estrategia nacional que todas las comunidades exigen. A eso se suma el problema de los Presupuestos y la crisis que tenga dentro del Gobierno”, aseguran. Pero, fundamentalmente, la comunidad cree que lo que distingue a las dos administraciones ha sido la gestión de la pandemia: “Madrid le ha llevado la delantera en muchas cuestiones. Hemos solicitado cosas que parecían muy razonables, como un plan específico para Barajas o una estrategia nacional anti rebrotes, que nunca han sido respondidas. Madrid creó Ifema, donde, por cierto, el presidente jamás vino. Presentamos el plan de la vuelta al cole antes de la reunión con Celaá porque no podíamos esperar más y el Gobierno quería que no lo hiciéramos. Al final, son dos modelos distintos”, zanjan.

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El propio vicepresidente regional, Ignacio Aguado, tachó este martes de “hipócritas” las declaraciones de Sánchez sobre Madrid. “Si le preocupa tanto, podría llamar a la presidenta o reunirse con ella. Preocuparse de verdad por los 1,2 millones de alumnos que este viernes vuelven a clase”. Aguado aseguró que el Ejecutivo central actúa con “oportunismo político” y lo acusa de una “cierta fijación” con Madrid.

A este respecto, en el equipo de Ayuso recuerdan que en un año de presidencia autonómica, el presidente del Gobierno aún no ha recibido a la presidenta regional, “toda una anomalía”, dada la tradición de que el jefe del Ejecutivo se vea con los líderes territoriales al poco de tomar posesión.

Los desencuentros entre las dos administraciones estuvieron muy presentes en los primeros meses de pandemia. Tanto, que Madrid acabó llevando a la Justicia los criterios del Ejecutivo en mayo para decidir qué autonomías pasaban de fase en la desescalada. El Tribunal Supremo lo admitió a trámite y la Administración regional sigue a la espera. El entorno más cercano de Ayuso recuerda que no fue un recurso “por pasar o no de fase como tal”, sino por lo que entendían como “criterios políticos y arbitrarios” para decidirlo, y aseguran que gracias a aquella denuncia, "se supo, entre otras cosas, que no existía el comité de expertos para la desescalada". En una respuesta oficial a Transparencia, Sanidad reconoció que la toma de decisiones en esa materia correspondía al ministerio.

Durante semanas, el Gobierno regional ya amenazó con llevar a los tribunales la decisión del Gobierno, que dejó en fase 0 la comunidad mientras la mayor parte de España avanzaba. El principal choque entre administraciones se produjo cuando Ayuso insistió en que “no existían criterios objetivos” para denegar el salto en la desescalada, y exigía un “informe por escrito” con los detalles. Entonces ya advirtió de que recurriría a “todas las medidas legales” a su alcance “para defender los derechos de los ciudadanos madrileños”.

En esta ocasión y en pleno arranque del curso político, el Gobierno regional reprocha a Moncloa emprender una nueva campaña contra el Ejecutivo regional y asegura que el “choque será inevitable” si Sánchez mantiene “el señalamiento” contra Madrid.