Sánchez e Iglesias rubrican su acuerdo a la espera de fijar la fecha de la investidura
Los dos líderes presentan su pacto, cerrado el domingo, y subrayan su carácter "histórico" y la oportunidad de "revitalizar" la política. El presidente pide a las fuerzas que salgan del bloqueo
Los movimientos se aceleran de cara a la investidura de Pedro Sánchez. Hay más votos garantizados (los de PNV y Más País-Equo y la abstención de EH Bildu), hay programa de Gobierno, hay foto de quienes serán presidente y vicepresidente del nuevo Ejecutivo. Todo listo a falta de que ERC dé su sí definitivo al acuerdo y pase a la abstención. A esa ceremonia de presión se añadió la presentación, este lunes por la tarde, de la entente de PSOE y de Unidas Podemos. El documento definitivo y la rúbrica final, que compartieron, como hace casi dos meses, Pedro Sánchez y Pablo Iglesias. Otra vez en el Congreso. Otra vez con imágenes de abrazos y cordialidad. Otra vez con pequeños discursos de ambos y ni una sola pregunta de los periodistas. Los redactores, de hecho, fueron vetados a la entrada y no pudieron ser testigos del momento. Todo está cogido con alfileres a falta de que ERC dé el paso final y los socialistas no quieren palabras en falso que arruinen el camino recorrido con mucha dificultad.
De hecho, ni Sánchez ni Iglesias mentaron a ERC durante sus pequeños parlamentos en la Cámara Baja. Ni tan siquiera la fecha de la investidura, que llegará en cuestión de muy pocos días. La fecha más probable que se baraja en la Moncloa es la de arranque el sábado 4 de enero y primera votación el domingo 5, y segunda y última ronda el martes 7. El pleno arrancaría, por tanto, después del 'consell nacional' de ERC. Será "más pronto que tarde", según dijo el presidente, quien pidió a las fuerzas que aún siguen instaladas en el no que se sumen al "avance". Esa fue, sin duda, una de las palabras fetiche.
Porque, a su juicio, fue ese el mensaje que lanzaron los votantes el 10-N. Avanzar para formar un Gobierno de coalición articulado en torno a un programa "progresista", en defensa de la cohesión social y "frente a la desigualdad", que camine hacia la conquista de nuevos derechos o hacia la cohesión territorial desde el "diálogo, el acuerdo y el entendimiento". Avanzar, sostuvo, es lo opuesto al "bloqueo" y la "parálisis", es sacar a España adelante, es "progresar" todos juntos y "sin dejar a nadie atrás".
"Es un programa de coalición progresista, pensado para hacer progresar a un país que lo tiene todo para ser aún mejor de lo que es", dice Sánchez
Sánchez hiló de nuevo un discurso más filosófico que concreto. Más de grandes pinceladas que medidas, que ya están plasmadas en el acuerdo conocido en su integridad este lunes y que fue cerrado ayer domingo tras una reunión en la Moncloa de él mismo con Iglesias. "Quiero reivindicar la idea de los valores colectivos. Es un acto de reivindicación de la mejor de las políticas, de la política útil. La sociedad la necesita para afrontar desafíos que no permiten más demoras. Si alguien tuviera que preguntar cuál es el eje central de este acto, sería la idea de progreso. Es un programa de una coalición progresista, pensado para hacer progresar a un país que lo tiene todo para ser aún mejor de lo que es hoy".
El "gesto", "hablar"
El acuerdo de PSOE y Unidas Podemos, el primero para un Ejecutivo de coalición en España desde la II República, obedece a la "normalidad institucional", a la voluntad de las dos fuerzas no solo de "ser Gobierno, sino de hacer Gobierno", de ir más allá de compartir el Consejo de Ministros. Se trata de compartir, incidió, "políticas y propuestas" y "mejorar la vida de la gente". Los ejecutivos mixtos, presentes en democracias vecinas, argumentó, son "parte de esa normalidad" que ha de asumirse "con inteligencia y generosidad", y con "vocación de compartir el poder". Es una "oportunidad para revitalizar y regenerar la política", remachó.
El presidente señala que los ejecutivos bicolores han de asumirse "con inteligencia y generosidad", y con "vocación de compartir el poder"
El líder socialista asumió que el camino no será fácil, que el reto es "enorme" y el panorama es diverso en lo territorial y en lo ideológico, y eso hace "compleja la gobernabilidad", pero "no la imposibilitan". El nuevo Ejecutivo "no se rendirá" para sacar adelante las reformas que necesita el país y para abrir ese periodo "útil" para España.
Sánchez reconoció que PSOE y Unidas Podemos no tienen una mayoría parlamentaria. Solo suman 155 escaños. Pero tienen la voluntad y determinación de "forjar esa mayoría día a día, ley a ley, presupuesto a presupuesto, con hechos concretos". Añadió que el mecanismo será el diálogo. Bastará "un solo gesto": "Hablar. Hablar para entendernos o discrepar, para acordar o disentir, para pactar o confrontar".
En ese punto, el presidente pidió a las demás fuerzas parlamentarias "que se sumen al avance y no al bloqueo". Era un último llamamiento a los demás partidos. Por supuesto a ERC, quien esta tarde convocó a su 'consell nacional' para el próximo jueves, y ahí decidirá si se abstiene o no. Será el último escollo a remover para el líder del PSOE.
"Enorme generosidad" del PSOE
Iglesias, tras agradecer el esfuerzo a los dos negociadores del programa —la ministra de Hacienda en funciones, María Jesús Montero, y el secretario de Acción de Gobierno de Unidas Podemos, Pablo Echenique—, remarcó el carácter "histórico" del acuerdo, que ocombinará la "experiencia del PSOE" con la "frescura" de los morados para afrontar una etapa que también es "histórica". Porque el propósito del Ejecutivo de coalición es convertir España en "un referente en Europa y en el mundo" en modernidad y políticas de justicia social y de ayuda a los más vulnerables, en medidas feministas, verdes y sociales, que servirán como "mejor vacuna contra el crecimiento de la extrema derecha".
A juicio del líder de UP, la última década ha quedado "perdida" por los recortes o el conflicto territorial, pero también lo ha sido de "esperanza", por la pujanza del 15-M, de las mareas que lucharon por la pervivencia de los derechos o la fuerza del movimiento feminista. Ahora se trata de "convertir el sí se puede" que fue grito de guerra en las calles en acción de gobierno.
El nuevo Ejecutivo será el del "sí se puede", dice Iglesias, el que convertirá a España en "referente" internacional y servirá de "vacuna" frente a Vox
Iglesias acabó su breve discurso agradeciendo al PSOE y a Sánchez su "enorme generosidad" para alumbrar el primer Ejecutivo bicolor en democracia. "Va a ser un honor que Sánchez sea nuestro presidente y compartir el Gobierno con hombres y mujeres del PSOE. Estamos deseando ponernos a trabajar lo antes posible. Ojalá sea pronto la investidura", concluyó.
Aplausos de cada uno de los equipos, sonrisas, abrazos y más abrazos. Rostros distendidos. Relajados. Ambos líderes sienten que lo peor ha pasado. Queda apenas el último empujón. Que ERC dé el visto bueno y que la investidura arranque. Ya todo parece listo. Ahora sí. O al menos eso creen los dos nuevos socios de gobierno.
Los movimientos se aceleran de cara a la investidura de Pedro Sánchez. Hay más votos garantizados (los de PNV y Más País-Equo y la abstención de EH Bildu), hay programa de Gobierno, hay foto de quienes serán presidente y vicepresidente del nuevo Ejecutivo. Todo listo a falta de que ERC dé su sí definitivo al acuerdo y pase a la abstención. A esa ceremonia de presión se añadió la presentación, este lunes por la tarde, de la entente de PSOE y de Unidas Podemos. El documento definitivo y la rúbrica final, que compartieron, como hace casi dos meses, Pedro Sánchez y Pablo Iglesias. Otra vez en el Congreso. Otra vez con imágenes de abrazos y cordialidad. Otra vez con pequeños discursos de ambos y ni una sola pregunta de los periodistas. Los redactores, de hecho, fueron vetados a la entrada y no pudieron ser testigos del momento. Todo está cogido con alfileres a falta de que ERC dé el paso final y los socialistas no quieren palabras en falso que arruinen el camino recorrido con mucha dificultad.
- Sánchez e Iglesias regularán el alquiler, los juegos de azar y derogarán la 'ley mordaza' Juanma Romero Iván Gil
- Así se cerró el pacto PSOE-UP: reunión de tres horas en Moncloa de Sánchez e Iglesias Juanma Romero
- PSOE y UP derogarán parte de la reforma laboral y subirán el IRPF a las rentas altas Javier G. Jorrín Iván Gil