Podemos e IU chocan en la sentencia de los ERE: de una época pasada a la "red mafiosa"

De la suavidad de Podemos y su crítica modulada, sin apuntar directamente al PSOE, a la dureza de Izquierda Unida contra la "red mafiosa" de los socialistas andaluces. La sentencia condenatoria del caso ERE ha visibilizado diferentes posiciones dentro del grupo confederal, solo una semana después de firmar el preacuerdo para el Gobierno de coalición progresista. Esta primera prueba de fuego sobre la lealtad de los morados al PSOE, con la contradicción implícita de minimizar la corrupción cuya contestación fue una de las señas de identidad con que nació el partido, se ha saldado vinculando estas actuaciones a otra época pasada frente a la que "ahora se abre a la oportunidad de defender la justicia social y garantizar la limpieza de las instituciones", en palabras de Pablo Iglesias, que parecían coordinarse con el mensaje de los socialistas. Al igual que Ferraz, desligaba a Sánchez del caso ERE.

Esta ha sido la posición oficial del partido, sin apenas voces discordantes. "El bipartidismo trajo corrupción y arrogancia. Llegarán más sentencias como esta que retratan una época. España ha cambiado y no volverá a tolerar la corrupción", concluía Iglesias, cuya reacción acaparaba todas las miradas para calibrar la fortaleza de su acuerdo con Sánchez. En la misma línea se expresaba la portavoz del partido, Noelia Vera: "Con la sentencia de los ERE, se cierra una época oscura que hizo muchísimo daño a Andalucía. Una de las razones de que hoy mucha gente nueva participemos en política es que ni nuestra tierra ni España vuelvan a vivir momentos tan vergonzosos como los que trajo el bipartidismo. Nunca más".

Echando mano también de la dualidad entre pasado y futuro, el portavoz de los 'comuns', Jaume Asens, valoraba que la sentencia de los ERE "pone de manifiesto cómo la corrupción se convirtió en una forma de gobierno durante décadas", por lo que "hay que abrir las instituciones de par en par y asegurar que en esta nueva etapa cada euro de dinero público se destine a nuestras escuelas y hospitales".

TE PUEDE INTERESAR

Iglesias protege a Sánchez: vincula el fallo de los ERE a "una época" de bipartidismo

Iván Gil

La coordinadora andaluza de Podemos, Teresa Rodríguez, se desmarcaba de la contenida línea oficial con un discurso más cercano al de IU —con quien comparte coalición bajo el paraguas de Adelante Andalucía— que de su propia formación. Para Rodríguez, la sentencia demostraría que "el PSOE-A es un partido cargado de corrupción", a quien ha acusado de haber estado "40 años tejiendo redes clientelares malversando fondos públicos".

Para el dirigente de IU y portavoz de Adelante Andalucía, Toni Valero, la sentencia "supone una enmienda a la totalidad de la forma de gestión poco transparente, manijera y torticera de gobiernos socialistas con mayoría absoluta que han hecho y deshecho a su antojo, en este caso, en un tema tan sensible como eran las políticas de ayuda a empresas en crisis". Mirando también hacia el futuro, ha advertido de que "las vamos a seguir pagando" si no se acometen cambios en el modelo productivo y no se desarrollan mecanismos independientes de control para lo que calificó de "historia de un latrocinio".

Opinión

TE PUEDE INTERESAR

Justicia ciega, política daltónica 

Marta García Aller

"Nadie está reparando en que esto que ha pasado podría volver a ocurrir, porque no hemos hecho absolutamente nada para evitar que vuelva a ocurrir", completaba Rodríguez durante una comparecencia ante los medios de comunicación, la única de un dirigente morado, pues todos se limitaron a valorarlo a través de las redes sociales. Al mismo tiempo, la líder de Podemos en Andalucía lamentaba que "se han cargado la confianza que todos y todas deberíamos tener en la gestión de los fondos públicos para generar empleo en una tierra que lo necesita".

El coordinador federal de IU y diputado por Málaga, Alberto Garzón, era de los primeros en marcar posición propia cargando contra los dirigentes del PSOE andaluz por "utilizar dinero público en Andalucía para sostener una red mafiosa que compraba la paz social y alimentaba la corrupción". Frente a ello, concluía que "Andalucía merece pasar página para tener un futuro digno". Por otra parte, el dirigente de IU y exconcejal en el Ayuntamiento de Madrid Carlos Sánchez Mato concluía que "no hay justificación posible" porque "los gobiernos del PSOE de Andalucía crearon un entramado delictivo y corrupto para lucrarse con algo tan doloroso como los ERE y el paro de trabajadores".

La Fiscalía Anticorrupción ha cifrado la malversación del caso ERE en 680 millones de euros entre los años 2000 y 2009, condenando a los expresidentes de la Junta de Andalucía Manuel Chaves y José Antonio Griñán en un juicio que ha sentado en el banquillo a un total de 21 ex altos cargos de los gobiernos socialistas durante más de una década. Chaves es culpable de prevaricación y afronta una pena de nueve años de inhabilitación, mientras que la pena para Griñán es de seis años y dos días de cárcel, sumando al delito de prevaricación el de malversación de fondos públicos. Por otra parte, el exconsejero Antonio Fernández y el ex director general de Trabajo Francisco Javier Guerrero han sido condenados por malversación a ocho años de cárcel y 20 de inhabilitación.