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Ferraz desliga a Sánchez del caso ERE y marca distancias con Chaves y Griñán
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BREVE RUEDA DE PRENSA EN FERRAZ

Ferraz desliga a Sánchez del caso ERE y marca distancias con Chaves y Griñán

Ábalos reconoce que la sentencia es "dura", pero subraya que el Gobierno y la actual dirección del PSOE son "muy ajenos". Hace hincapié en que todas las responsabilidades ya se depuraron

Foto: José Luis Ábalos, secretario de Organización del PSOE, este 19 de noviembre en Ferraz. (EFE)
José Luis Ábalos, secretario de Organización del PSOE, este 19 de noviembre en Ferraz. (EFE)

"Absoluto respeto" por una sentencia judicial "muy dura", que no puede dejar "indiferente" ni al Gobierno de Pedro Sánchez ni a la actual dirección del partido pero que no le afecta en absoluto porque el actual presidente no estaba allí, cuando ocurrieron los hechos. "No es un caso del PSOE, sino de antiguos responsables públicos de la Junta de Andalucía".

Era la primera respuesta de Ferraz al impactante revés por el caso de los ERE de Andalucía. La solemnizó el secretario de Organización y titular de Fomento en funciones, José Luis Ábalos, apenas dos horas después de que compareciera en Sevilla su homólogo andaluz, Juan Cornejo. La línea argumental básica de las dos declaraciones era semejante, aunque el ministro introducía más distancia, al no defender la "honorabilidad" de los expresidentes de la Junta (y expresidentes del PSOE) Manuel Chaves y José Antonio Griñán, condenados por la Audiencia de Sevilla este martes. El primero, a nueve años de inhabilitación por prevaricación y el segundo a seis años de cárcel y 15 de inhabilitación por malversación y prevaricación.

Foto: Griñán, a su llegada este martes a la Audiencia de Sevilla. (EFE)

Ábalos, en una breve comparecencia en la sede federal pasadas las 16:30, remarcó desde el inicio su "absoluto respeto" por una sentencia que enjuicia hechos "de la pasada década", entre 2000 y 2009, por lo que "es un caso que no afecta ni al actual Gobierno ni a la actual dirección del PSOE, y por el que el PSOE andaluz ya depuró responsabilidades políticas". En efecto, como indicó el ministro, ninguno de los 19 condenados en esta pieza política de los ERE "ocupa cargo público". Todos "lo abandonaron" y ninguno es ya afiliado al partido. Chaves, Griñán y el exconsejero Gaspar Zarrías —su pena es de nueve años de inhabilitación— dejaron sus escaños en Congreso y Senado en 2015, por lo que perdieron su aforamiento, y un año después, cuando fueron procesados por el juez, salieron del PSOE.

"No es un caso del PSOE, sino de antiguos responsables públicos de la Junta de Andalucía" que dejaron sus cargos y sus carnés, esgrime


Al secretario de Organización no le dolieron prendas al calificar la sentencia de la Audiencia de Sevilla como "muy dura", que no puede dejar "indiferentes" ni al Ejecutivo ni a la cúpula actual del PSOE porque "afecta a personas que tuvieron importantes responsabilidades orgánicas e institucionales", sin perjuicio de que haya recurso ante el Tribunal Supremo y este confirme las penas o no. Chaves presidió la Junta de 1990 a 2009 y el PSOE, desde 2000 hasta 2012. Su sucesor en ambos cargos fue precisamente Griñán, líder de la Junta entre 2009 y 2013 y presidente del partido entre 2012 y 2014, en la ejecutiva que dirigió Alfredo Pérez Rubalcaba y en la que también se sentaba Zarrías. También Magdalena Álvarez, condenada por inhabilitación a nueve años, fue primero consejera de la Junta y luego ministra de Fomento.

Foto: El expresidente de la Junta José Antonio Griñán, antes de entrar en la Audiencia Provincial de Sevilla. (EFE)

Código ético de Sánchez

Pero el fallo, siguió Ábalos, permite al PSOE cerrar "una ceremonia de la confusión" con la que "las derechas y sus epígonos en estos diez años han tratado de normalizar su corrupción o arremeter sin ton ni son contra el Gobierno y su presidente", cuando "a lo más que llegó" Pedro Sánchez en la década en la que ocurrieron los desmanes ya juzgados fue a "concejal de la oposición en el Ayuntamiento de Madrid". El actual jefe del Ejecutivo dejó el consistorio capitalino para poner un pie en el Congreso en septiembre de 2009, como sustituto de Pedro Solbes, y regresó a la Cámara Baja en enero de 2013, como relevo de Cristina Narbona. En julio de 2014, tras vencer en las primarias, se convirtió en secretario general del PSOE. De modo que, a juicio de la actual cúpula socialista, el PP esgrimió el caso ERE "continua y abusivamente" para "tratar de desviar su corrupción estructural y sistémica".

El dirigente defiende la respuesta "rotunda" de la dirección ante los casos de corrupción y recuerda que Sánchez en esos años era concejal en Madrid

Ábalos también quiso deslindar el caso ERE de la trama Gürtel. Así, en esta última el PP sí fue condenado por la Audiencia Nacional, mientras que el PSOE-A no ha sido "investigado" por la Justicia. "No es un caso del PSOE, sino de antiguos responsables públicos de la Junta", remarcó. También enfatizó que, a diferencia de lo que ocurre con los diversos escándalos que han salpicado a los populares, no se atribuye "enriquecimiento ilícito". Y el PSOE, como contraste con lo que hizo el PP, siguió, "no trató de ocultar el caso", ni "arremetió contra los jueces", ni buscó "comprar el silencio de ningún inculpado", ni "destruyó pruebas". El problema de la corrupción, que debe ser "extirpado", no es "tener que presenciar hechos" que son en sí mismos "lamentables y rechazables", sino cómo las organizaciones reaccionan ante ellos. Y no es lo mismo apartarlos, dijo, que "contemporizar", "encubrir", "convivir" con ellos o "minusvalorarlos".

El PSOE dice que la condena del caso ERE no afecta ni al Gobierno ni a la dirección del partido

Este martes, tanto el PP como Ciudadanos cargaron muy duramente contra los socialistas. Los naranjas incluso reclamaron la dimisión de Sánchez. Ábalos recordó, a preguntas de los periodistas, que la formación que pilotaba con Albert Rivera ayudó al PSOE andaluz en la pasada legislatura (2015-2018), "cuando las presunciones de responsabilidad eran mayores" y no puso pegas. Y resulta "satírico" y hasta "hilarante" que el PP pida la cabeza de Sánchez, añadió, porque este no tenía ningún cargo orgánico ni institucional estatal cuando ocurrieron los hechos, y en su gestión como secretario general se depuraron responsabilidades.

El PSOE andaluz se reafirma en la "honorabilidad" de Chaves y Griñán

Subraya el contraste con el PP

El número tres recordó que fue con él con quien el PSOE se dotó de un código ético que exigía la renuncia a los cargos y al carné del partido cuando hubiera imputación y apertura de juicio oral. Defendió así que Sánchez actuó "con rotundidad", cuando en cambio el PP trató de "encubrir" a su extesorero Luis Bárcenas, a quien el entonces presidente, Mariano Rajoy, mandaba mensajes de ánimo y otorgó "indemnizaciones en diferido".

Enfatiza que el PSOE no trató de ocultar el caso, ni "arremetió contra los jueces", ni "destruyó" pruebas, ni tampoco intentó buscar su "impunidad"

El secretario de Organización advirtió de que en el PP se destruyeron ordenadores y convivieron simultáneamente diversas tramas, como la Lezo, que ayer supuso el procesamiento del expresidente madrileño Ignacio González. Presuntos casos de corrupción que también han supuesto que desfilaran ante la Justicia las expresidentas de Madrid Esperanza Aguirre y Cristina Cifuentes. Destacó que lo importante es "no banalizar" la corrupción "venga de donde venga", solo para "buscar la impunidad".

Así que de nuevo Ábalos trazó las diferencias entre los dos grandes partidos. Mientras los populares hablaban en 2009, cuando estalló la Gürtel, de "causa general" contra el PP, el PSOE se ha pasado "diez años conviviendo" con el caso ERE. Pero "afortunadamente ya hay sentencia" y se pone "punto final" a la "propaganda" y "explotación" del PP como "elemento compensatorio para sus tramas de corrupción". "Para tratar de igualarnos en lo peor, hay quien hace concursos", desdeñó.

Cárcel para Griñán e inhabilitación para Chaves por los ERE

El número tres indicó que esta sentencia no afectará a la investidura de Sánchez puesto que son hechos "muy ajenos" al actual Gobierno y a su presidente y a su ejecutiva federal. Además, deslizó que la dirección cree amortizado este caso, como también lo estima el PSOE-A. El caso ERE "ha hecho su efecto, sin duda, pero ahora tenemos la formalización", vía sentencia, de unos hechos que "en todo este tiempo se han dado por ciertos", concluyó.

"Absoluto respeto" por una sentencia judicial "muy dura", que no puede dejar "indiferente" ni al Gobierno de Pedro Sánchez ni a la actual dirección del partido pero que no le afecta en absoluto porque el actual presidente no estaba allí, cuando ocurrieron los hechos. "No es un caso del PSOE, sino de antiguos responsables públicos de la Junta de Andalucía".

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