Es noticia
Rajoy aconseja a Casado aguante en la adversidad y huir de los doctrinarios
  1. España
Elogios al ex presidente en la asamblea del PP

Rajoy aconseja a Casado aguante en la adversidad y huir de los doctrinarios

El PP dedicó la primera jornada de su Convención Nacional a volver a despedir y cubrir de elogios a Rajoy, quien confesó que está "estupendamente" después de dejar La Moncloa

Foto: El expresidente del Gobierno Mariano Rajoy. (EFE)
El expresidente del Gobierno Mariano Rajoy. (EFE)

El Partido Popular dedicó la primera jornada de su Convención Nacional a volver a despedir y cubrir de elogios a Mariano Rajoy. El anunciado "rearme ideológico", más reafirmación del PP es sí mismo como lo definió Alberto Núñez Feijóo, empezó por rendir tributo a la herencia más próxima, la recibida del expresidente del Gobierno, por parte del equipo de Pablo Casado. Rajoy no quiso pronunciar un discurso y se limitó a contribuir a la asamblea con un coloquio a medias con Ana Pastor para deslizar algunos consejos a su sucesor al frente del partido, como el de tener aguante en los momentos difíciles, no asustarse ante las críticas o el de huir de "los doctrinarios".

Rajoy: ''No es bueno el sectarismo ni son buenos los doctrinarios''

Abrumado por las alabanzas de los primeros oradores, el exjefe del Ejecutivo cumplió con el papel asignado: contribuir con su presencia a la imagen de unidad que su partido reclama en el arranque del año electoral, con municipales, autónómicas y europeas de entrada en mayo. El dirigente del Partido Popular Europeo y candidato a presidente de la Comisión, el alemán Manfred Weber, fue el primero en referirse a Rajoy como el campeón de la recuperación económica de España.

Después de inagurar la Convención junto con Casado al presentarse juntos en el escenario sin más acompañantes, los participantes en la asamblea se pusieron en pie en varias ocasiones para aplaudir a su antiguo presidente. El primero que lo logró fue el democristiano alemán cuando le citó como responsable del "milagro" español por haber sacado a España de la recesión.

placeholder El presidente del PP, Pablo Casado (i), y el presidente de la Xunta de Galicia, Alberto Núñez Feijóo. (EFE)
El presidente del PP, Pablo Casado (i), y el presidente de la Xunta de Galicia, Alberto Núñez Feijóo. (EFE)

Nuñez Feijóo y el secretario general, Teodoro García Egea, hicieron después nuevas referencias a Rajoy en el mismo tono de homenaje hasta que le llegó él turno a la presidenta del Congreso. "Gran amigo y maestro", "político de peso y de poso", "discreto", "íntegro", "generoso" o "eficaz" fueron algunos de los calificativos que Pastor dedicó a su antiguo jefe, "que tanto bien a hecho a España".

El expresidente del PP agradeció los elogios y advirtió que no venía a dar doctrina, ni a ajercer de "tertuliano". Repitió pasajes de su conocido discurso estadístico sobre lo mucho que ha avanzado España desde la Transición, recordó los teléfonos que inauguró en su tierra natal en los años 80 y quiso citar a los personajes clave para que España sea hoy una democracia: el Rey Don Juan Carlos y Adolfo Suárez.

Preguntado por los retos del futuro, Rajoy apuntó la consolidación del "proceso europeo", el sostenimiento del estado del bienestar, el crecimiento económico y el empleo y "no hacer demagogia". Después de recordar el drama demográfico de España, el exjefe del Ejecutivo tuvo la única aproximación a una crítica directa al gobierno de Pedro Sánchez cuando sacó a relucir "el descontrol" de la inmigración irregular en los últimos meses.

Sólo al final y preguntado por el balance que hacía de sus 37 años en la política, Rajoy confesó que no se arrepiente de la experiencia, que en ocasiones lo pasó muy mal pero que tiene la virtud de que esos momentos se le olvidan enseguida. "Lo mejor de la política es que me ha permitido conocer España, que es mi país", remachó.

El PP de Casado escenifica una nueva etapa en la que quiere rearmarse en lo ideológico

Preguntado por Pastor sobre cómo se sentía fuera de la política, el expresidente del Gobierno respondió que "estupendamente", que la gente le trata muy bien y que los que no le quieren "tienen el buen gusto de no contármelo". Después de cumplir con el guión pactado, Rajoy todavía se quedó un rato en la asamblea, por donde ya no aparecerá, ni tendrá que coincidir con José María Aznar ni en la clausura del domingo reservada en exclusiva para Casado. El registrador de la propiedad libra el fin de semana y un viaje previsto fuera de Madrid.

El Partido Popular dedicó la primera jornada de su Convención Nacional a volver a despedir y cubrir de elogios a Mariano Rajoy. El anunciado "rearme ideológico", más reafirmación del PP es sí mismo como lo definió Alberto Núñez Feijóo, empezó por rendir tributo a la herencia más próxima, la recibida del expresidente del Gobierno, por parte del equipo de Pablo Casado. Rajoy no quiso pronunciar un discurso y se limitó a contribuir a la asamblea con un coloquio a medias con Ana Pastor para deslizar algunos consejos a su sucesor al frente del partido, como el de tener aguante en los momentos difíciles, no asustarse ante las críticas o el de huir de "los doctrinarios".

El redactor recomienda