El PSOE plantea el debate de su congreso como una enmienda a la etapa de Sánchez
Madina sostiene que el partido afronta una reflexión profunda, que no hubo "en dos años y medio", que no es "sectaria" y en la que quiere contar "con todo el mundo", sin una "vocación adanista"
Es inevitable no ver en cada paso que da la gestora y el nuevo equipo que ha tomado las riendas de Ferraz una réplica al tiempo de Pedro Sánchez en el poder del PSOE. Tampoco lo ocultan, porque quienes propiciaron su caída denunciaban que las cosas se estaban haciendo mal, que el partido se acercaba al precipicio por las decisiones tomadas por su secretario general. Y por eso el camino hacia su 39º Congreso se plantea, en cierta medida, como una enmienda a sus poco más de dos años de mandato, porque se van a organizar debates que el PSOE "no ha tenido" en este tiempo, de forma "no sectaria", y reflexionando sobre qué le ha pasado, no buscando razones "exógenas", sino "endógenas".
"Tras más de dos años y medio sin dar una rueda de prensa aquí, es un gusto estar delante de todos ustedes en un momento tan importante". Tenía la "dulce sensación de haber vuelto a casa", como la víspera había dicho Alfonso Guerra. Era esta la tarjeta de presentación que este viernes extendió a los periodistas Eduardo Madina, ya investido como coordinador de la parte política de la ponencia marco, al lado de quien dirige el capítulo económico, José Carlos Díez. Y era verdad: el diputado vizcaíno, rival de Sánchez en las primarias de 2014, se había distanciado de la primera línea tras salir derrotado, pero ha ido ganando protagonismo progresivamente en los últimos meses, hasta asumir un rol fundamental en el proceso congresual.
Madina pronostica que el PSOE avanzará en su cónclave "más que nunca" y subraya que el proyecto "es del partido": "Todos" están en el mismo barco
Él es el encargado de liderar un amplio equipo de dirigentes y expertos —igual que Díez—, que todavía están encajándose en los distintos epígrafes y cuya identidad se conocerá la semana próxima. Todos ellos deberán dar forma al nuevo proyecto socialista.
Madina subrayó, durante la larga rueda de prensa en Ferraz, que ninguno de los coordinadores tiene una "vocación adanista", porque el PSOE dispone de unas bases sólidas, que son sus pilares ideológicos, y que fueron revisados en la conferencia política de 2013 —la que organizó Alfredo Pérez Rubalcaba cuando era secretario general, que pilotó el exministro y hoy portavoz en Bruselas, Ramón Jáuregui, y en cuyo 'staff' figuraba el propio Sánchez—, y en los programas electorales de las generales. "Es a esas medidas a las que nos debemos".
Pero la naturaleza del documento que saldrá en el 39º Congreso es "estratégica, de diagnóstico". Aunque sí quiere dar un salto adelante. "Diría que vamos a avanzar más que nunca, y con debates que no hemos tenido en los últimos dos años y medio [los de Sánchez en Ferraz: de julio de 2014 a octubre de 2016], porque todos y todas estamos en el mismo barco". Porque el proyecto, insistió el parlamentario, "es del partido", y no de una parte.
¿Hay "savia nueva"?
Los dos coordinadores se han visto "desbordados" por las peticiones de aquellos que se han ofrecido a colaborar en la redacción de la ponencia, de "todas las federaciones" y de fuera del PSOE. Pero, a falta de conocer el listado completo, los nombres ya conocidos, los de aquellos que han elaborado las bases del documento marco —Rosa Conde, Rafa Simancas, Luz Rodríguez, Ramón Jáuregui, Matilde Fernández, Amelia Valcárcel y José Andrés Torres Mora, aparte del propio Madina y el diputado por Teruel Ignacio Urquizu, los dos más jóvenes del grupo—, no son precisamente "savia nueva", como les recordaron los periodistas durante la rueda de prensa en Ferraz. "A veces llevar toda la vida en política es bueno. Ojalá hubiera ganado Hillary Clinton [en EEUU]. Ni lo nuevo es bueno ni lo viejo es malo", respondió el diputado vizcaíno, quien recordó que el camino hacia la resolución política del 39º Congreso pasa por distintas fases. En la primera, la ya hecha (y presentada ayer por el portavoz de la gestora, Mario Jiménez), la de la elaboración del capítulo introductorio, se quiso contar con gente "que sepa de lo que hable", que pudiera orientar el debate.
Ahora se abre la segunda etapa, la de la deliberación del borrador de la ponencia, en la que participará más de un centenar de personas, "de todo tipo", "de 20 y de 70 años", algunos muy conocidos y otros menos, que trabajan en empresas privadas, o en fundaciones, o en universidades, aparte de multitud de cargos públicos y orgánicos.
El área política se divide en tres ejes: la panorámica mundial, que pilota Jáuregui; el diagnóstico, de Urquizu, y el futuro, de Torres Mora y Valcárcel
La parte política de la ponencia, la que pilota Madina, se articulará en torno a tres bloques. Uno primero, 'El mundo en nuestro tiempo', que desgranará la posición de la socialdemocracia ante los "desafíos globales", lo dirigirá Ramón Jáuregui. El segundo, 'La situación de España hoy', lo coordinaráIgnacio Urquizu. Y el último, 'La España de 2020', lo capitanearán la filósofa, experta en igualdad y consejera de Estado Amelia Valcárcel y el diputado por Málaga (y exjefe de Gabinete de José Luis Rodríguez Zapatero) José Andrés Torres Mora. Esta última parte actuará de "guía de oposición", puesto que el PSOE, "frente a otros partidos que han decidido no asumir la iniciativa", el PSOE sí la ha desplegado, y tendrá "apoyatura en este documento".
Madina incidió en que la redacción no tendrá "nada de sectario", porque se contará "con todo el mundo" y se compondrá un debate "serio" tras dos derrotas electorales en las que, remarcó, el PSOE obtuvo los peores resultados de su historia. Y aquí fue donde calzó otra recriminación a Sánchez: "El PSOE es responsable de lo que le pasa al PSOE, y ese principio de responsabilidad ya está aquí", no hay que buscar "razones exógenas", como a juicio de la gestora hacía el ex secretario general para explicar el hundimiento en las urnas, sino "endógenas".
Las aportaciones de los dos grupos de trabajo dirigidos por Madina y Díez (unas 250 personas en total) se llevarán a las dos convenciones temáticas que se celebrarán en estos meses —la económica, a finales de febrero, y la política, a últimos de marzo, y no habrá una específica de estatutos—, para que allí se "fijen las conclusiones". Estas serán elevadas al 'comité de sabios' (los nueve miembros que redactaron las bases de la ponencia), que darán el visto bueno definitivo, para que la gestora traslade el borrador de documento marco al comité federal que convocará formalmente el 39º Congreso, y a partir de entonces arrancará el debate dentro del partido, desde las agrupaciones hasta el mismo cónclave, el 17 y 18 de junio en Madrid. El economista sostuvo que los foros temáticos de febrero y marzo estarán "abiertos a la sociedad" y se busca que sean "estimulantes intelectualmente", donde se favorecerá la participación de "todos", porque el PSOE pretende "ilusionar" a sus votantes y a aquellos electores que les dieron la espalda. Díez, por cierto, no ve problema en no ser militante, porque él es "un socialdemócrata" de pura cepa —"He votado al PSOE toda mi vida"— y ha ido a "todas" las agrupaciones del partido que le han invitado, y en todas recibió "cariño" de las bases. Y ahora aceptó la oferta de la gestora "por convicción".
Que nadie espere al PSOE con un proyecto irreal e imposible para minorías; saldrá un proyecto posible, real y para una mayoría
Tampoco la confección de equipos de trabajo multidisciplinares e intergeneracionales es una novedad en el PSOE. De hecho, Sánchez ya montó sendos 'comités de sabios' antes de las dos últimas generales, en los que integró a veteranos y jóvenes. También la elaboración de los programas electorales llevó meses de deliberación, y para ello se contó con dirigentes y expertos de distinta procedencia.
Partido "feminista" y de "ciudadanía"
Madina avanzó que el PSOE que saldrá del 39º Congreso será un partido "feminista", de "ciudadanía" —una "sociedad abierta frente a tentaciones y tentativas de muros, fronteras y rechazo al que es distinto"— y que "aspira a ser un partido de mayorías" que ofrece reformas institucionales para construir un mejor país. "Que nadie espere al PSOE proponiendo un proyecto imposible e irreal para minorías; de este congreso va a salir un proyecto posible, real y para una mayoría social", declaró el diputado, quien enfatizó que el partido no hará en este cónclave ordinario una "apuesta por un proyecto vinculado a la vanidad ideológica o a la prepotencia programática". El proyecto socialista discurrirá por "carriles racionales, conscientes y centrados en mejorar las condiciones de vida para la sociedad española".
La participación de la militancia no es coacción, es reforzar la democracia interna de nuestra organización.
— Pedro Sánchez (@sanchezcastejon) 27 de enero de 2017
Mi respuesta a propósito de supuestas reuniones ultrasecretas https://t.co/nZQqjqZVB4 pic.twitter.com/27GK9FkKwp
— Pedro Sánchez (@sanchezcastejon) 27 de enero de 2017
El PSOE, añadió, no va a "funcionar sobre nostalgias que ya se fueron", sino que mantendrá una "actitud positiva y constructiva con todos los que quieran llegar a acuerdos", también en el Parlamento. Así defendió la política de oposición que está desplegando la dirección en el Congreso, donde nada se puede aprobar sin el concurso de la formación. "El PSOE no pretende tener la razón en todo, sino sus razones", que están en avances como la subida del 8% del salario mínimo, la prohibición de los cortes de suministro eléctrico o la paralización de las reválidas.
El diputado vizcaíno también respondió a las acusaciones, vía Twitter, de Sánchez. El ex secretario general advertía de que la participación de la militancia en las consultas no es "coacción", sino "reforzar la democracia interna". Madina recordó que la potestad de convocar referendos entre las bases la tenía y la tiene el comité federal, y le parece "bien". "Nadie quiere limitar nada", el poder del líder, especificó. Como tampoco desaparecerán las primarias para elegir secretario general: "En 2014 les dejé una frase: 'un militante, un voto'. Esa frase es mía, y vino para quedarse. Este congreso se solucionará con votación directa de hombres y mujeres, en votación secreta y libre, tan secreta y libre como lo fue en 2014". Madina resaltó que aquel cónclave fue "respetuoso, plenamente democrático, muy ilusionante, muy épico", y lanzando una señal de alerta, recordó que en ese combate hubo un "comportamiento ejemplar de los candidatos", un "debate en profundidad", y eso es "una buena guía" para ahora.
Edu Madina: "La dimisión de Santi Vidal no absuelve a Carles Puigdemont de dar explicaciones"
Eduardo Madina fue preguntado por la polémica del día: la dimisión del exjuez Santi Vidal como senador de ERC después de sus controvertidas declaraciones. Entre ellas, cosas como que la Generalitat tenía ilegalmente datos fiscales de los catalanes. El diputado avisó que la renuncia de Vidal "no absuelve" al presidente de Cataluña, Carles Puigdemont, de tener que acudir al Parlament a dar explicaciones, como ya de hecho le ha pedido el PSC.
Vidal también dijo en una conferencia que Pedro Sánchez prometió negociar un referéndum en una reunión secreta con ERC, según reveló La Sexta. Madina dijo no tener "conocimiento" de esa cita que el exjuez aseguró que se produjo en abril, con Meritxell Batet y Antonio Hernando, por parte del PSOE, y él mismo, Gabriel Rufián y Joan Tardà, por parte de los republicanos. Sánchez habría pedido a ERC el apoyo a su investidura a cambio de modificar el artículo 155 de la Constitución, cerrar las causas abiertas contra el independentismo y desarrollar por completo el Estatut.
"No sé si es peor ver a un juez mintiendo o ver a un senador de Esquerra diciendo esta verdad", señaló Madina. Y con cierta retranca, emplazó a los periodistas a interrogarle mañana en su acto de Dos Hermanas: "Quizá conteste Pedro Sánchez mañana en Sevilla. Es una muy buena pregunta para él".
Sánchez, en un post en Facebook, acusó a La Sexta de "manipular" y de haber dado pábulo a una "sarta de mentiras".
El exlíder atribuyó la información a una alianza contra él: "El día que anuncié mi encuentro con los militantes socialistas en Sevilla, supe que no iba a dejar a muchos indiferentes. También supe que algunos poderes no iban a quedarse quietos, y tratarían de truncar el proyecto político que muchos queremos para el PSOE. Un proyecto que se resume en ser un partido de izquierdas y autónomo de todo poder económico, un PSOE abierto y participativo, donde la militancia decida en las cuestiones decisivas para nuestra organización política. No lo vamos a tener fácil, de hecho nunca lo tuve como secretario general, y siempre supe que los ataques se producirían. Tampoco pensé que fueran a venir tan pronto, incluso, antes de yo anunciar si presento mi candidatura o no a la secretaria general del PSOE", indicó en su publicación.
Es inevitable no ver en cada paso que da la gestora y el nuevo equipo que ha tomado las riendas de Ferraz una réplica al tiempo de Pedro Sánchez en el poder del PSOE. Tampoco lo ocultan, porque quienes propiciaron su caída denunciaban que las cosas se estaban haciendo mal, que el partido se acercaba al precipicio por las decisiones tomadas por su secretario general. Y por eso el camino hacia su 39º Congreso se plantea, en cierta medida, como una enmienda a sus poco más de dos años de mandato, porque se van a organizar debates que el PSOE "no ha tenido" en este tiempo, de forma "no sectaria", y reflexionando sobre qué le ha pasado, no buscando razones "exógenas", sino "endógenas".