Pymes y autónomos piden la dimisión de Zapatero ante el Congreso

CCerca de tres centenares de autónomos y pequeños empresarios pidieron hoy la dimisión del presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, ante las puertas del Congreso, en una manifestación que culminó con la entrega de sus reivindicaciones a representantes de todos los grupos parlamentarios.

La protesta, convocada para el mediodía, comenzó en la Plaza de Neptuno, donde se encontraba el cordón policial. Varios manifestantes airados llamaron "hijos de puta" a los socialistas y tildaron de "ladrón" a Zapatero, al que acusaban de empobrecer España y de respaldar más a los bancos que a las pequeñas empresas.

Las 70 organizaciones convocantes, que representan a 1.300.000 autónomos, tenían previsto entregar un documento con sus reivindicaciones a todos los grupos parlamentarios del Congreso, pero los ánimos se fueron calentando entre los manifestantes y en algunos momentos la entrega se convirtió en un verdadero caos.

Fue lo que ocurrió con los dos primeros portavoces en acercarse a la manifestación. Se trataba de Rosa Díez (UPyD) y Gaspar Llamazares (IU-ICV), que tuvo que soportar increpaciones e insultos de los presentes, ante las cuales dijo que lo importante es que sus propuestas puedan llegar a los parlamentarios. Entre empujones, los manifestantes lograron desplazar el cordón policial hasta la puerta de los leones. Poco antes de alcanzarla una amplia delegación del Grupo Popular encabezada por su portavoz, Soraya Sáenz de Santamaría, y por su responsable de economía, Cristobal Montoro, salió a su encuentro. Su llegada a la cabeza de la manifestación fue coreada por los manifestantes y sólo la voz discordante de un autónomo les reprochó que "la oposición no hace nada" para remediar sus males.

Sáenz de Santamaría dijo tras recibir el documento, que la crisis económica se está convirtiendo en una "crisis social" y se comprometió a intentar sacar adelante en el Congreso algunas de las medidas que proponen los pequeños empresarios porque son "de justicia".

Ya a las puertas del Congreso, los máximos representantes de las organizaciones empresariales tuvieron la oportunidad de intercambiar puntos de vista con el resto de portavoces a los que pidieron disculpas por el caos organizativo que achacaron a su "inexperiencia" en organización de protestas. El documento fue recibido por Josep Antoni Durán i Lleida (CiU), Pedro Azpiazu (PNV), Francisco Jorquera (BNG), Joan Ridao y una delegación del PSOE de manos de Lorenzo Amor (ATA) y Josep González (PIMEC).

Momentos de tensión

Los momentos de mayor tensión se produjeron durante el encuentro con los socialistas, encabezador por el secretario general del Grupo, Ramón Jáuregui, y por el portavoz económico, Jesús Membrado. Ambos reprocharon a los autónomos que hayan decidido salir a la calle justo durante el mandato del partido que más ha hecho para mejorar su situación durante la pasada legislatura y la actual.

Membrado echó en cara al representante de ATA "¡que nos hagáis esto a nosotros!" sin "razones objetivas" y justo al día siguiente de que se constituya la mesa negociadora y una semana después de la aprobación en el Congreso de una iniciativa en favor de los autónomos. Amor reconoció avances y aseguró que si bien ahora hay menos motivos para la protesta, si que los había el "12 de marzo, cuando se convocó". Socialistas y autónomos quedaron emplazados para verse y discutir nuevas medidas en una reunión que se podría producir la próxima semana.

Las bases para ese encuentro, las desgranó Jáuregui, quien aseguró que los pequeños empresarios están en su derecho a protestar, puso en valor los hecho hasta ahora y reconoció que quedan problemas que resolver y que lo harán juntos. Por su parte, el portavoz de ATA insistió en que necesitan medidas en "un mes", porque "no podemos permitirnos perder 1.000 autónomos cada día".