Rhône extrae 1.150 M de la española Maxam tras un superbonus para la cúpula

Rhône Capital, el fondo estadounidense liderado en España por José Manuel Vargas, ha aprobado el reparto de un primer dividendo de 1.150 millones de euros gracias al troceo de Maxam, la empresa española de explosivos fundada por Alfred Nobel. El private equity ha decidido llevar a su cuenta esta cantidad tras la venta de Expal, la división de defensa, operación por la que su equipo directivo cobrará un bonus de hasta 99 millones de euros, del que el principal beneficiario es el directivo que antes fue presidente de Aena.

Según consta en el informe anual del ejercicio 2023, cerrado a 31 de agosto, Rhône Capital, dueño del 75% de Maxam, y el resto de accionistas acordaron reducir el capital social de la compañía en 68,75 millones para su posterior amortización. Una operación que fue acompañada de la adquisición de 191.667 acciones para autocartera por 1.150 millones de euros. El consejo aprobó también llevar a cabo una segunda fase de compra de acciones propias antes del próximo 31 de marzo de 2024, momento en el que "el capital social se reducirá en la cuantía que resulte de la autocartera finalmente adquirida".

En ese momento, Rhône Capital definirá el dividendo total que se repartirá a cargo de las cuentas de Maxam, que el año anterior fueron históricas tras la desinversión de Expal. El grupo alemán Rheinmetall acordó a finales de 2022 pagar 1.215 millones por esta negocio, dedicado a la fabricación de explosivos militares, transacción que quedó finalmente cerrada el 31 de julio de este año. Un día más tarde, el consejo aprobó esas operaciones con acciones propias, que tenían también un precio adicional para la cúpula ejecutiva.

Porque unos meses antes de acometerse la venta de Expal a Rheinmetall, la junta de accionistas aprobó un plan de retribución para determinados directivos del grupo. Según figura en las últimas cuentas anuales, el cobro de este bonus está ligado a que el accionista obtenga "una retribución y una rentabilidad mínimas determinadas" por la venta de partes de Maxam. A 31 de agosto, la compañía había provisionado 99,1 millones por este concepto, de los que ya había pagado 83,5 millones. El principal beneficiario es José Manuel Vargas, que en mayo de 2020 asumió la presidencia ejecutiva de la multinacional.

Fuentes del sector del capital riesgo agregan que Rhône Capital podría vender lo que resta de Maxam a partir del próximo año

Vargas, que ya trabajaba para Rhône Capital desde 2017, se puso al frente de Maxam para sacarla de una crisis de resultados motivada por problemas en algunos de los países en los que estaba presente, así como por diferencias entre el equipo gestor. El que fuera consejero delegado de Vocento y presidente de Aena tras su privatización tomó las riendas para darles la vuelta a los números. La compañía estuvo tres años consecutivos sin repartir dividendos a sus accionistas, hasta que en 2022 pagó 40,99 millones, y el pasado mes de agosto, 120,99 millones.

A estas cantidades se sumarán ahora los al menos 1.150 millones que se han destinado a comprar acciones propias para su posterior amortización. Por lo que Rhône Capital va a obtener una generosa rentabilidad por Maxam, por la que pagó unos 700 millones en 2018, cuando compró el 45% del capital. Posteriormente, en 2020, se hizo con otro paquete próximo al 25%, lo que le dio el control de la sociedad. Algunas fuentes sostienen que, en esa segunda fase, la valoración fue inferior a la acordada en la primera adquisición.

Fuentes del sector del capital riesgo agregan que Rhône Capital podría vender a partir del próximo año lo que resta de Maxam, el negocio de explosivos civiles para los sectores de la minería, canteras, obras e infraestructuras. Sobre todo porque la compañía ha recuperado los márgenes previos a la crisis y tiene su deuda refinanciada hasta 2017. El pasado año, el grupo llegó a un acuerdo con BBVA y Santander para extender el vencimiento de un préstamo de 528,8 millones, dividido en dos tramos de 402 y 125 millones, respectivamente.

Hasta el pasado 31 de agosto solo había dispuesto del primero, por el que había pagado unos intereses anuales de casi 20 millones. Además, cuenta con 200 millones de euros en pagarés en el Mercado Alternativo de Renta Fija (MARF) con la ayuda de Banca March.

Salida de Rusia

Los buenos resultados de Maxam han llegado pese al arbitraje por su inversión en Uzbekistán y sus problemas en Rusia, donde tiene cuatro filiales. La compañía se ha comprometido a vender todo su negocio —valorado en 19,5 millones de euros, con una facturación de casi 45 millones— en este país, después de que el régimen de Vladímir Putin confiscara su producción. De hecho, la española, para cumplir con las sanciones internacionales, solo fabrica para empresas rusas después de que Moscú confiscara de facto sus fábricas.

Además de Rhône Capital, entre los accionistas destacados de Maxam se encuentran Santiago Eguidazu, presidente de Alantra; Santiago Bergareche, accionista y consejero de Vocento, y Rafael del Pino, el máximo responsable de Ferrovial. Los tres han compartido consejos de administración de sus sociedades, hasta el punto de que Eguidazu fue consejero de Maxam y de Ferrovial, lo mismo que Bergareche, que llegó a ser consejero delegado de la constructora.