Santander vuelve a ser español: gana un récord de 5.241 M con España como impulsor

Banco Santander vuelve a ser español. La entidad presidida por Ana Botín ha cerrado la primera mitad del año con un beneficio récord de 5.241 millones, un 7% más que el año pasado. Y lo ha hecho con una gran diferencia frente a las últimas décadas, con la filial española como principal motor del resultado, por encima de su bancos en Brasil, Estados Unidos y Reino Unido.

De este modo, Santander España ganó 1.132 millones, un 74% más que en el primer semestre de 2022, gracias a la subida del euríbor y la materialización de las reestructuraciones llevadas a cabo en los últimos años. Aun con el nuevo impuesto del Gobierno, esta filial despuntó dentro del grupo y compensó los pinchazos en Brasil y Estados Unidos, donde la morosidad ha lastrado los beneficios.

TE PUEDE INTERESAR

Santander sube un 4% en bolsa al elevar dividendo al 50% del beneficio y augurar más rentabilidad

Jorge Zuloaga

La filial brasileña se convirtió en la segunda mejor filial a pesar de una caída del resultado del 40%, con 823 millones a portados al grupo. La morosidad en el país mejoró en el segundo trimestre, aun así se sitúa en el 7%, frente al 3,07% del grupo. "Las perspectivas macroeconómicas en Brasil son favorables, ya que la inflación se está desacelerando y se espera que los tipos caigan a corto plazo este año", expone el grupo.

Santander UK vuelve a situarse como una filial en mejoría gracias a las subidas de tipos en Reino Unido, y se consolida como tercer mejor mercado con un beneficio de 818 millones, un 11% que en el mismo periodo del año pasado.

También hay sorpasso en Norteamérica, donde el banco mexicano cosechó mayores ganancias que el de Estados Unidos: 760 millones (un 39% más), frente a 667 millones (un 39% menos). El repunte de la morosidad, hasta el 3,46%, explica la mala evolución de la filial estadounidense, aunque desde la entidad explican que el coste del riesgo está siendo "mejor de lo esperado".

Valor de la diversificación

Estos resultados dan la razón al grupo con el valor de la diversificación geográfica, ya que mientras España estaba digiriendo la crisis del ladrillo en 2012 las filiales de Brasil y Reino Unido tiraban de la cuenta de resultados. Y ahora está ocurriendo al contrario.

Otros mercados clave del banco son Digital Consumer Bank (OpenBank más Santander Consumer en Europa), que ganó 521 millones (un 9% menos); Santander Chile, donde el beneficio fue de 330 millones (un 16% menos); Portugal, con un resultado de 321 millones (un 43% más); Polonia, con ganancias de 321 millones (un 55% más); y Argentina, donde el beneficio fue de 252 millones (un 73% más).

Al margen de sus filiales, la entidad destaca en sus resultados que "va cumpliendo con sus objetivos para 2023: crecimiento de ingresos a doble dígito; RoTE [rentabilidad] por encima del 15%; eficiencia del 44-45%; CET1 fully loaded [capital] por encima del 12%, y coste del riesgo por debajo del 1,2%". De estos, el único que todavía no se ha cumplido es el RoTE, que se quedó cerca en el 14,5%, algo que podría mejorar en el segundo semestre si Brasil y EEUU vuelven a tirar de la cuenta de resultados.

El banco resalta en sus presentaciones al mercado los frutos que está dando la estrategia de transformación que está impulsando el nuevo CEO, Héctor Grisi, en especial en eficiencia, que se sitúa por primera vez en mucho tiempo en el 44,2%. El objetivo es llegar hasta el 42% en 2025. Para ello el grupo está simplificando la oferta de productos a nivel global, digitalizando el negocio, apostando por filiales que presten servicio a todo el grupo y mejorando la tecnología. La meta es ser "un banco digital con sucursales".