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"Harían falta 70.000M para el plan de digitalización de pymes y autónomos"
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"Harían falta 70.000M para el plan de digitalización de pymes y autónomos"

Hugo Arévalo, que acaba de dar otra vez la campanada con la venta de Glovo, es una de las voces más autorizadas de nuestro país para hablar de emprendimiento y digitalización

Foto: Hugo Arévalo. (EC)
Hugo Arévalo. (EC)
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Hugo Arévalo es una de las voces más autorizadas de nuestro país para hablar de emprendimiento y digitalización. Se estrenó con Tuenti cuando su edad hacía honor al nombre de la compañía, ha invertido en una veintena de proyectos, que van desde las gafas Hawkers a la tienda online Deporvillage, y acaba de dar la campanada con la venta de Glovo por 2.300 millones de euros.

Considerado el único inversor que ha apostado por tres unicornios —Glovo, Jobandtalent y Cabify— desde su origen (fase 'seed'), Arévalo está ahora volcado en su propio proyecto empresarial, The Power MBA, una iniciativa que busca democratizar la educación de élite y adaptarla a la realidad del mundo, tanto en el fondo (nuevos perfiles profesionales), como en la forma (nuevas herramientas tecnológicas de aprendizaje).

Foto: Dos repartidores de Glovo. (Reuters/Valentyn Ogirenko)

Este bagaje le permite ser un referente a la hora de analizar el plan del Gobierno para invertir los 140.000 millones de fondos europeos, un dinero que el Ejecutivo ha prometido aprovechar para llevar a cabo la mayor modernización de la economía española en décadas y en el que ha reservado un capítulo especial a apoyar la digitalización de pymes y autónomos.

Un relato que suena muy bien, pero que adolece de falta de contenido cuando se pasa de las palabras a los hechos. "El concepto, la idea de base, puede ser buena, pero la ejecución no", sostiene Arévalo, para quien el problema de origen está en la pobre dotación económica, por una parte, y en un enfoque equivocado, por otra.

"Estamos hablando de un plan de 3.000 millones, cuando las pymes representan el 65% del PIB (Producto Interior Bruto) y el 75% del empleo. Por tanto, se está destinando menos del 2% a la digitalización de estas empresas cuando, como mínimo, por su peso en la economía real, debería ser un 50%. Esto significa que, si realmente se quieren aprovechar los fondos europeos para la transformación digital de pymes y autónomos, haría falta dotar el plan con 70.000 millones de euros.

placeholder Hugo Arévalo  en un momento de la entrevista.
Hugo Arévalo en un momento de la entrevista.

Pero, incluso multiplicando los recursos financieros, hay serio riesgo de fracaso por un error de concepción inicial. "El Gobierno define la transformación digital como crear webs, dar facturas electrónicas, usar un software de procesos... Pero eso no es transformación digital porque, por ejemplo, si no puedes vender a través de internet, para qué sirve crear esa web. Lo lógico es que primero haya un cambio de modelo de negocio y eso pasa por la formación".

Convencido de que siempre "es mejor enseñar a pescar que dar el pescado", Arévalo sostiene que "la transformación digital sin acompañamiento de formación va a ser un fracaso" y aboga por destinar a este fin la mitad de los 70.000 millones que harían falta para una auténtica modernización del tejido empresarial patrio.

Si no puedes vender a través de internet, para qué sirve crear una web. Lo lógico es que primero haya un cambio de modelo de negocio

Del mismo modo, defiende que sean los jóvenes líderes emprendedores los que lideren este plan, un colectivo al que apenas se ha consultado antes de anunciar, a finales de noviembre, el programa bautizado como Kit Digital, cuya primera convocatoria de ayudas, con una inversión de 500 millones de euros, irá dirigida a pymes de entre 10 y 49 trabajadores.

Aquí surge otro enorme interrogante, y es cómo hacer que autónomos y pequeños empresarios conozcan este plan y sepan realmente como llegar a él y aprovecharlo. "Se necesita una campaña de comunicación del Gobierno sobre cómo pedir estas ayudas y explicar muy sencillamente cómo se hace para aplicar, al igual que hay una campaña de seguridad vial", defiende el 'business angel', nombre con el que se conoce en la jerga del sector a los inversores que apuestan por nuevos proyectos empresariales desde su origen tomando una participación en el capital.

A pesar de su dilatada experiencia, tanto desde el lado del inversor como desde la silla de empresario, Arévalo reconoce que "yo, ahora mismo, no sabría decir a qué ayudas puedo aspirar. Se necesita más transparencia y que lleguen de verdad a todo el mundo estos fondos".

Foto: iStock.

De cara a futuro, y como receta que va más allá del Kit Ditigal y los fondos europeos, Arévalo recomienda todo emprendedor o empresario que quiere digitalizar su negocio que, primero, se pregunte qué le piden los clientes para adaptar su modelo de negocio a cubrir esa necesidad y, "a partir de ahí, ya te apalancas en la tecnología", dice.

¿Qué están pidiendo los clientes? "Las grandes tendencias para los próximos diez o quince años son Blockchain, que ha venido para quedarse y va a quitar muchos intermediarios; también va a haber una revolución en el mundo de la salud por encima de los 100 años; derivado de esta longevidad va a haber una revolución en las ciudades y en los pueblos; y una preocupación por la vida sana que va a disparar el interés por el deporte y la comida saludable".

Y, por supuesto, metaverso. "Las grandes tecnológicas se han dado cuenta de que los países desarrollados pasamos el 50% de nuestro tiempo 'online'. Si es así, ¿por qué no crear un mundo 'online'?". No hay duda, el mundo, y los modelos de negocio, están cambiando.

Hugo Arévalo es una de las voces más autorizadas de nuestro país para hablar de emprendimiento y digitalización. Se estrenó con Tuenti cuando su edad hacía honor al nombre de la compañía, ha invertido en una veintena de proyectos, que van desde las gafas Hawkers a la tienda online Deporvillage, y acaba de dar la campanada con la venta de Glovo por 2.300 millones de euros.

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