Santander contrata a Deloitte para su primera gran venta de activos desde el covid

Santander vuelve al mercado de las carteras de activos problemáticos. La entidad presidida por Ana Botín ha contratado a Deloitte para diseñar una cartera de créditos impagados de empresas y sacarla a la venta en las próximas semanas, según fuentes financieras consultadas por este medio. La operación abarcará préstamos valorados en su origen en alrededor de 700-800 millones de euros, según las mismas fuentes.

Será la primera operación que lance el primer banco español desde que se extendió la pandemia, obligando a la entidad a paralizar una gran desinversión de hipotecas minoristas que tenía casi cerrada con M&G y Pimco, como publicó este medio.

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Jorge Zuloaga

Este mercado se ha secado casi por completo en los últimos meses, salvo algunas operaciones esporádicas lideradas principalmente por Sabadell, CaixaBank y BBVA.

El encargo a Deloitte es el primero de los que se espera que dé la entidad española a asesores externos durante el año, que en su conjunto podría ascender a unos 2.000 millones de euros de activos traspasados en el conjunto del ejercicio, según las fuentes consultadas.

Herencia de Popular

Para Santander, es prioritario reabrir este mercado ante su situación de mayor morosidad en España. El grupo es el que mayor tasa de impagos tiene entre las grandes entidades del país, con una ratio del 6,23% a finales de 2020, tras un pequeño repunte en el último trimestre. La media del sector se encuentra en el 4,2%.

La entidad presidida por Botín ha explicado en alguna ocasión que esta mayor morosidad se debe a la compra de Banco Popular, que tenía una exposición a créditos débiles mayor de lo que esperaban al principio. A esto se suma que la entidad antiguamente presidida por Ángel Ron era líder en pymes junto a Sabadell, el segmento más afectado 'a priori' por la crisis del covid.

Para Deloitte, esta operación es su primera gran cartera de 2021. El año pasado, tuvo algunos encargos como los de Sabadell, con la venta de unas hipotecas problemáticas, y del EPA (esquema de protección de activos) de CAM. Esta 'Big Four' ha sufrido recientemente la marcha de parte de su equipo internacional de venta de carteras, que ha fichado por Alvarez & Marsal.

El sector de la desinversión de activos tóxicos vivió en 2020 uno de sus años más flojos, con compraventas por valor de 6.900 millones, según datos de Prime Yield, firma que calcula que este negocio se mantendrá en un nivel similar en 2021, con unos 7.100 millones. El volumen en 2019 fue de 19.000 millones.