Ribera: "La agenda poscovid debe ser verde y ofrecer seguridad a los inversores"

A pesar de que en un primer momento el covid-19 dejó en un segundo plano la lucha contra el cambio climático, se antoja imprescindible seguir avanzando para recuperar la salud del planeta y sacar de nuevo a flote la economía. Según la OCDE (Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico), afrontar estos grandes desafíos generará nuevos servicios cuyo valor podría alcanzar los 140 billones de dólares al año, en torno a un punto y medio más del PIB mundial.

[VÍDEO | Vea aquí el encuentro completo]

Para poner sobre la mesa estos retos y las perspectivas del crecimiento verde tras la pandemia, El Confidencial y Acciona organizaron el foro 'Crecimiento verde. Cómo afrontar la pospandemia', que contó con la apertura institucional de Teresa Ribera, vicepresidenta del Gobierno y ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, y en la clausura con Clara de la Torre, directora general adjunta de Acción por el Clima de la Comisión Europea. En el encuentro, también participaron Joaquín Mollinedo, director general de Relaciones Institucionales, Sostenibilidad y Marca de Acciona; Arturo Pérez de Lucía, director general de Aedive (Asociación Empresarial para el Desarrollo e Impulso del Vehículo Eléctrico); Santiago Gómez, presidente de Appa Renovables (Asociación de Empresas de Energías Renovables); Carlos Mataix, director del Centro de Innovación en Tecnología para el Desarrollo Humano de la Universidad Politécnica de Madrid, y Luis Martí Álvarez, director de Regulación de Acciona.

El camino es largo, pero los pasos son firmes y el motor que impulsa el cambio ya está en marcha. Prueba de esto es que el proyecto de Ley de Cambio Climático y Transición Energética ya está en el Congreso, y el PNIEC (Plan Nacional Integrado de Energía y Clima), en manos de la Comisión Europea. Teresa Ribera explicó que, con esta hoja de ruta, a la que pronto se sumará la Estrategia de Infraestructura Verde, las opciones se disparan: oportunidades industriales de modernización económica y empresarial, infraestructuras, calidad de vida… “La agenda pospandemia debe ser verde, sostenible e inclusiva, y ofrecer confianza y seguridad a las inversiones nacionales e internacionales”, afirmó.

Pero para llevar a cabo esta transformación, la responsabilidad y el compromiso son factores fundamentales. La vicepresidenta del Gobierno destacó como algo positivo el gran consenso social que rodea este asunto, tanto entre grupos políticos como en la inmensa parte de la sociedad, algo que no suele ocurrir. Aun así, explicó que estamos sumergidos en una contrarreloj y no podemos perder el tiempo si queremos evitar los puntos de no retorno: “Tanto los decisores como las empresas y la sociedad civil debemos reorientar nuestros esfuerzos para maximizar los efectos positivos de este cambio. Si nos orientamos en la misma dirección, podremos potenciar la capacidad y la velocidad del mismo”, señaló.

Fondos europeos, ¿cómo se articularán?

De los 750.000 millones de euros que conforman el fondo de recuperación de la Unión Europa para relanzar la economía de los países miembros afectados por la pandemia, España recibirá 140.000 millones. Los expertos coincidieron en que es una oportunidad única para el sector: “Por fin tenemos disponibilidad para invertir, para tener inversión pública que apalanque la privada. Esto nos permitirá abordar todos los retos, invirtiendo en áreas en las que teníamos que haber invertido hace mucho tiempo”, explicó el director de Regulación de Acciona.

Pero la falta de estabilidad normativa y las diferencias entre comunidades autónomas son realidades que han traído complicaciones. Desde el ámbito de la energía, Santiago Gómez explicó que, por primera vez, el sector está de acuerdo en hacia dónde ir y cómo hacerlo: “En los 33 años de historia de Appa Renovables, siempre ha habido discusiones entre los distintos tipos de generadores de energía. Es la primera vez que el sector entero y las empresas que invierten en él coinciden”. Respecto a si serán eficientes estas inversiones en el marco de unas leyes estables, Gómez consideró que, si se lleva a cabo una gestión bien enfocada en I+D en nuevas tecnologías, tendrán más peso las oportunidades que las dudas.

En este contexto, el director general de Aedive matizó que es una oportunidad, pero también un desafío: “No tenemos que tener la sensación de que esto ya está resuelto porque nos vayan a llegar miles de millones de euros de Europa”, subrayó. Además, destacó la importancia de la coordinación entre administraciones y la coordinación de estas con el sector privado para poder canalizar esos fondos y tener proyectos que atraigan ese dinero. El abanico en este sentido es amplio: energías renovables, eficiencia energética, movilidad sostenible…

Desde el ámbito de la innovación en tecnología, y en línea con las ayudas europeas, Carlos Mataix destacó la responsabilidad que tenemos todos de aprovechar bien estos fondos: “Si nos equivocamos, habremos hipotecado las generaciones que vienen detrás. Esta cantidad de recursos solo se moviliza una vez y alguien tendrá que devolverlos”. Respecto a la tecnología, “el sector energético está permitiendo que se pueda llevar a cabo gran parte de esta transformación, pero en otros sectores no está tan claro, hacen falta grandes inversiones de entrada, y para eso nos va a servir el paquete”, matizó Mataix.

Hacia una industria fuerte

Los expertos tienen claro que la colaboración público-privada será un factor clave en este camino hacia el cambio. ¿Qué papel jugará la empresa privada en este contexto? Martí explicó que, en ocasiones, existen tensiones al decidir qué prima más, la rapidez de los proyectos o su verdadero poder transformador: “Para conseguir inversiones rápidas y a la vez transformativas, es importante superar algunos tabúes e inercias que hemos ido viendo en el país en los últimos años, tanto regulatorias como de prácticas administrativas, que han hecho que la colaboración público-privada se convierta en una auténtica yincana donde es muy complicado funcionar”, señaló el director de Regulación de Acciona.

Mataix opinó que España necesita proyectos transformadores. “¿Por qué no empezar a construir incubadoras de estos proyectos?”, se preguntó, y añadió que los proyectos que requieren transformación necesitarán de un espacio de convergencia y creación que se podría dar en estas incubadoras diseñadas. “Ya hay algunas experiencias en España de generar espacios de colaboración publico-privada orientados no tanto a hablar sino a actuar”, explicó.

"Estamos ante una oportunidad única para construir una economía moderna, sostenible, con empleos de calidad y duraderos" (Clara de la Torre)

En esta línea, Pérez de Lucía puso sobre la mesa la importancia de las pymes y las microempresas y la necesidad de retener talento. “En España, tenemos muchas pymes y microempresas con mucha capacidad tecnológica, pero que encuentran muchas dificultades para poder arraigar en este país, porque todavía no existe un ecosistema que promueva la innovación y retenga el talento. Sin esa base, vamos a perder mucho”.

Los expertos destacaron el valor de crear una industria fuerte que genere empleo y reactive la economía. Los datos señalan que en el proceso de transición ecológica se generarán más puestos de trabajo de los que desaparecerán; en concreto, cuatro nuevos empleos por cada uno que se destruya, según la Organización Mundial del Trabajo. Gómez consideró que enfocar las inversiones y el crecimiento hacia la creación de un buen tejido industrial es esencial: “Disponemos de un tejido industrial bueno, pero tenemos que reforzarlo con este impulso. Hay multitud de pymes que aportan mucho valor al sector y que están en torno a estas inversiones, y eso hay que favorecerlo y crear el entorno para que puedan desarrollarse”.

Para poner fin al foro, Clara de la Torre, directora general adjunta de Acción por el Clima de la Comisión Europea, destacó que, en estos momentos difíciles, tenemos que utilizar el Pacto Verde como una verdadera estrategia de crecimiento y recuperación: “Es una ocasión única de disponer de una cantidad ingente de recursos de la Unión Europa y de los Estados miembros, no solo para recuperar el crecimiento sino para construir una economía moderna, sostenible, con empleos de calidad y duraderos”.

El plan de recuperación que el Gobierno de España ha hecho público recientemente incluye la transición ecológica como uno de sus cuatro ejes. En esta línea, De la Torre explicó que estos ejes están en total sintonía con las políticas de la Unión Europea: “España es uno de los países europeos que más sufren los efectos del cambio climático, por tanto, estas acciones destinadas a desplegar la electrificación y el transporte son muy positivas”. La directora general adjunta de Acción por el Clima de la Comisión Europea también puso sobre la mesa la importancia de la rehabilitación de edificios, ya que “nos ahorrarán energía, crearán mucho trabajo y aumentarán el bienestar social”.

A modo de conclusión, De la Torre reveló que para reconvertir un sector industrial y toda la cadena de valor que lleva consigo, se necesitan aproximadamente 25 años. En este contexto, “tenemos que tomar las decisiones oportunas en los siguientes cinco años, si no, no nos quedará tiempo”, ultimó.