Pallete pidió 5,3M a Credit Suisse para comprar 'Telefónicas' cuando valían el doble

José María Álvarez-Pallete, presidente de Telefónica, no deja de hacer gestos personales de compromiso con el futuro de la compañía, que cotiza en mínimos desde hace 25 años. El primer ejecutivo de la teleco ha invertido en numerosas ocasiones para demostrar su confianza en la acción y en el plan estratégico. Hasta tal punto que, según fuentes financieras, pidió un crédito de 5,3 millones de euros a Credit Suisse para financiar la compra de títulos, por lo que ha llegado a pagar dos veces más de lo que valen ahora.

Según estas fuentes, Pallete solicitó este préstamo en 2016, meses después de que fuese nombrado presidente en sustitución de Alierta. A finales de ese año, el primer ejecutivo del grupo de telecomunicaciones compró en un primer momento 40.000 acciones, por 320.000 euros, y después invirtió 5,3 millones en adquirir 615.000, por las que pagó 8,62 euros por cada una de ellas. En ese momento, su participación se elevó hasta los 1,23 millones de acciones.

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Europa Press

En diciembre de 2017, repitió la maniobra y se hizo con otros 121.000 títulos, que en ese momento se cambiaban en bolsa a 8,32 euros, por un millón de euros. En agosto de 2019, en plena crisis de la cotización por las tensiones en Argentina, se gastó casi 600.000 euros en adquirir 100.000 acciones más, que en el mercado valían 5,92 euros.

Poco antes de estallar la pandemia en Europa, Álvarez-Pallete también hizo pública su confianza en la compañía. "Si explico los planes de Telefónica, te pondrías ‘morao’ a comprar acciones", respondió en febrero a un periodista en una intervención pública. En mayo, con el covid haciendo ya estragos en la bolsa, el presidente de la multinacional compró 100.000 acciones más, por 400.000 euros, al tiempo que explicaba en la presentación de los resultados que “no me preocupa el precio actual”.

En agosto, Pallete publicó que compraba otras 100.000 acciones, por 352.000 euros, ya que el valor apenas se cambiaba a 3,52 euros, un 60% por debajo de como cotizaba cuando hizo sus primeras adquisiciones con el préstamo de Credit Suisse a finales de 2016. Fuentes del mercado indican que la garantía de ese crédito son, precisamente, las acciones, que al tener un valor muy inferior al pagado, no cubren el importe de la financiación otorgada por el banco suizo. Por tanto, indican que el ejecutivo ha tenido que renegociar las condiciones de su deuda con la entidad helvética. Ni Telefónica ni Credit Suisse han querido hacer ningún comentario sobre esta información.

Desde que fue nombrado presidente, Pallete ha invertido cerca de ocho millones de euros en comprar 1,09 millones de acciones de Telefónica, una apuesta en la que pierde más de la mitad de lo invertido. El primer ejecutivo del grupo tiene un sueldo anual de 5,3 millones, de los que 1,93 millones son sueldo fijo y los 3,44 millones restantes, una remuneración variable a corto plazo.

Preocupación en el consejo

Además, cuenta con un plan de pensiones de 8,86 millones y 889.000 acciones pendientes de recibir de los planes de incentivos a largo plazo si se cumplen determinadas condiciones. En conjunto, según los registros de la operadora, Pallete cuenta con aproximadamente un 0,045% del capital de Telefónica.

Peor le ha ido aún a Francisco Riberas, vicepresidente del consejo y propietario de Gestamp. El burgalés se ha gastado 65,53 millones de euros en acciones de la operadora, a precios entre 8,23 y 8,30 euros en enero de 2018, a entre 6,84 y 6,94 euros en diciembre de 2019 y a 4,13 euros el pasado mes de marzo. El año pasado, este vicepresidente del consejo de Telefónica invirtió 25 millones en comprar 3,6 millones de títulos, una operación que se sumó a la inyección de 20 millones acometida en 2018. La adquisición de 2019 se realizó en dos operaciones a 6,84 y 6,94 euros por título, respectivamente, mientras que la de 2018 fue a precios de entre 9,22 y 8,30 euros por título. Actualmente, acumula pérdidas latentes por 29,28 millones.

Fuentes próximas a la alta dirección de Telefónica admiten que la preocupación por la cotización es máxima en el consejo de administración, donde existe una frustración evidente, al haber intentado todo tipo alternativas para rebajar la deuda, mantener el dividendo y continuar con la transformación de la teleco en una compañía tecnológica. Pero el mercado, lejos de reconocerlo, mantiene una presión bajista que ha provocado incluso la expulsión de Telefónica del Euro Stoxx 50, el índice de referencia de las bolsas europeas, lo que 'de facto' se traduce en la salida del accionariado de numerosos fondos que invierten en cestas de índices.