Mapfre gana un 28% menos hasta junio por el aumento de la siniestralidad con el covid

El beneficio de Mapfre cayó un 27,7% en la primera mitad de 2020 respecto al mismo periodo del año anterior, según la presentación de resultados que ha enviado a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) a media mañana. El deterioro de las cifras se explica, principalmente, por una caída del negocio en España y por el aumento de la siniestralidad, que impacta en Mapfre RE, el segmento reasegurador que pasa de restar 47,7 millones en 2019 a restar 130,8 millones este año.

De hecho, el conjunto del negocio asegurador de Mapfre, aislando el reaseguro, tuvo un crecimiento positivo por el aumento en Latinoamérica del 26,8% y en Norteamérica del 16,8%. Estas variaciones compensaron la caída del 4,6% en España. Pero no compensaron el aumento de la siniestralidad, con 56,9 millones por el covid-19, cifra que se suma a los 77,3 millones por siniestros climatológicos y catástrofes naturales. Esto es, por los terremotos en Puerto Rico (60,2 millones) y las tormentas en España (16,1 millones). Asimismo, hay un deterioro de 15 millones por reorganización de operaciones, que contrasta con una aportación positiva de 4,5 millones el año anterior por este concepto. Dentro de esta línea se incluye una reorganización de la estructura (14,7 millones), venta de activos financieros en 2019 en Mapfre USA (19,2 millones) y una provisión para reestructuración en 2020 de 15 millones.

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Ó. Giménez

Los ingresos de Mapfre cayeron un 11,8% en el semestre, en términos interanuales, hasta los 13.277 millones. La caída de las primas emitidas y aceptadas totales fue del 12,3%, hasta los 10.983 millones, con un descenso del 9,7% en no vida (8.763 millones) y del 21,4% en vida (2.220 millones). El ratio combinado no vida (siniestros y gastos respecto a primas, cuanto más alto peor) se situó en el 96,7%, 0,8 puntos porcentuales más que en el año anterior.

Mapfre explica que la actividad económica y el confinamiento afectaron a la contratación de seguros, además de sufrir un entorno desfavorable en los productos de vida-ahorro. Sobre siniestros, ha habido un aumento en decesos y salud, que se ha mitigado parcialmente por una menor frecuencia en autos. La aseguradora que preside Antonio Huertas señala que ha revisado las carteras de renta variable, renta fija e inmobiliaria, "así como intangibles y cuentas por cobrar".

La presentación no deja clara una postura sobre dividendos. Los supervisores, EIOPA desde Europa y la DGS en España, han recomendado cancelar la remuneración a los accionistas, como ha hecho la banca. "El consejo de administración continuará monitorizando la situación actual y evaluará los dividendos futuros en el cuarto trimestre", se limita a decir la presentación.

La ratio de siniestralidad que recoge la presentación es la de marzo, del 177,2%, cuando se deterioró en 9,6 puntos porcentuales hasta el registro más bajo en la serie de la aseguradora, que arranca con las métricas actuales en 2016 con la entrada en vigor de Solvencia II. La ratio de solvencia muestra el margen de las aseguradoras para hacer frente a imprevistos a través del exceso del patrimonio propio (el mínimo es el 100%). El capital de solvencia obligatorio (SCR) disminuyó desde 4.805 millones a 4.625 millones, pero los fondos propios admisibles para cubrirlo cayeron en mayor medida, desde 8.976 millones hasta 8.197 millones.