El Corte Inglés reduce un 50% el dividendo por el covid y renueva al consejero catarí

El Corte Inglés celebrará el próximo 26 de julio la junta general de accionistas que tendrá que aprobar la gestión del ejercicio 2019-2020 y el destino de los 310 millones de euros de beneficios obtenidos en su último año fiscal, acabado el pasado 28 de febrero. Según indican fuentes financieras, el grupo de grandes almacenes ha decidido, ante la incertidumbre provocada por el covid-19 ya en el curso actual, reducir en un 50% el dinero que reparte en dividendos, pese a haber ganado un 20% más y no tener ninguna limitación legal, pese a haber recibido un préstamo del Instituto de Crédito Oficial (ICO). Esa limitación se aplicaría al ejercicio actual, 2020-2021.

Según indican las mismas fuentes, El Corte Inglés, que en el ejercicio 2018-2019 destinó 75 de los 258 millones de euros ganados a remunerar a sus accionistas vía dividendos, va a proponer en la junta repartir unos 37,5 millones. Es decir, la mitad de lo que se pagaron las distintas familias dueñas del 'holding' de la distribución con cargo a las cuentas del año anterior. Esos 75 millones representaron un incremento del 25% sobre los 60 millones precedentes y la cifra más alta repartida desde 2010, gracias a la mejoría por quinto ejercicio consecutivo del beneficio neto, hasta los 256 millones.

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La cadena de tiendas mejoró en 2019-2020 su resultado un 20%, hasta los 310 millones, por lo que podría haber seguido incrementando el dividendo. Pero el consejo de administración presidido por Marta Álvarez Guil ha optado por ser conservador, dada la situación provocada por la expansión del coronavirus. Aunque esos 310 millones se corresponden con el año precedente, por lo que podría haber seguido el ejemplo de compañías como ACS, Telefónica o Naturgy, que han mantenido inalterada su política de retribución al accionista, el órgano de gobierno se ha decantado por destinar a reservas el 88% de las ganancias y repartir únicamente el 12,3% en dividendos. El pasado año, el 'pay-out', como se conoce el porcentaje de los beneficios que se distribuye entre los propietarios de las acciones, fue del 29%.

Pero la pandemia ha interrumpido la mejoría de la cuenta de resultados de El Corte Inglés, que en su primer trimestre fiscal (1 de marzo-31 de mayo) ha sufrido el cierre forzoso de la mayoría de su superficie comercial. Solo pudo abrir la zona de supermercados, lo que le ha permitido mantener un 50% de las ventas habituales de este periodo, por lo que el 'holding' se enfrenta a uno de los años más duros de su historia. Ante la posibilidad de acabar el ejercicio 2020-2021 con pérdidas, el consejo de administración ha optado por la prudencia y proteger la caja, destinando gran parte de lo ganado en el curso anterior a reservas.

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La petición de los 960 millones al ICO y otros 350 millones a la banca internacional sí limitaría el reparto de los dividendos del próximo curso en el caso de que la compañía consiguiera darle la vuelta a la situación actual en la segunda parte del año, especialmente entre el Black Friday y las rebajas de enero, periodo en el que El Corte Inglés logra entre el 30 y el 40% de su beneficio. Si utilizara ese dinero, no podría remunerar a los accionistas porque las ayudas públicas lo prohíben.

La junta general de accionistas también someterá a aprobación la renovación de tres de los actuales consejeros. En concreto, de Marta Álvarez Guil, actual presidenta; de su hermana Cristina Álvarez Guil, y de Shahzad Shahbaz, el representante del jeque catarí dueño del 10% del capital. Se espera que los tres consejeros continúen en sus puestos con el apoyo por unanimidad de todos los accionistas relevantes.

Solvencia estable

Al igual que hiciera Moody's la semana pasada, Fitch ha emitido también su informe sobre la solvencia de El Corte Inglés una vez presentados los resultados del pasado ejercicio y las primeras indicaciones de cómo ha evolucionado el primer trimestre. Como su competidora, la agencia de calificación crediticia ha decidido mantener estable el 'rating' del grupo, al que puso en perspectiva negativa el pasado mes de marzo, cuando se empezaron a sentir los estragos del covid-19.

Fitch reitera su nota de BB+ a largo plazo de El Corte Inglés tras las decisiones adoptadas por el equipo gestor dirigido por Víctor del Pozo para amortiguar los efectos del coronavirus. Especialmente por la rapidez con que la compañía levantó 1.310 millones en líneas de crédito para asegurarse la continuidad de sus operaciones incluso en el escenario más adverso de la pandemia. Sus bonos, que llegaron a caer hasta los 83 céntimos, han recuperado prácticamente todo lo perdido durante la pandemia y se cambian al 99,13% de su valor nominal.