El Santander propondrá otro recorte de hasta 800 empleos en su centro corporativo

El inicio de las negociaciones entre Banco Santander y los sindicatos para pactar el ajuste de plantilla y de oficinas que la entidad presidida por Ana Botín pretende llevar a cabo no despejó todas las incógnitas. En la primera toma de contacto, que tuvo lugar este miércoles, el banco comunicó a los representantes sindicales que recortará un máximo de 1.200 puestos de trabajo en su división española, Santander España, pero dejó para la siguiente reunión, que tendrá lugar mañana, la propuesta para reducir la plantilla del centro corporativo.

A la espera de que la entidad detalle sus intenciones, fuentes sindicales consideran que los recortes en el centro corporativo de Boadilla del Monte rondarán los 800 empleados. Al cierre de 2015, el Santander precisaba que la plantilla del centro corporativo era de 2.006 personas, con lo que una reducción de esa magnitud afectaría el 40% de los empleados. En caso de confirmarse estos datos, el ajuste laboral presentado por la entidad financiera alcanzaría los 2.000 puestos de trabajo.

Objetivo sindical: más prejubilaciones

Por el momento, en la primera reunión con los sindicatos, el banco les comunicó una reducción de hasta 1.200 empleos. Aunque todas las partes matizaron que se trató de "una primera toma de contacto" y que "las cifras pueden sufrir cambios", los planes de la entidad pasan por repartir esa reducción a partes iguales entre prejubilaciones (600) y bajas incentivadas (600). Los representantes de los trabajadores ya han anticipado que intentarán incrementar el número de prejubilaciones. Comisiones Obreras (CCOO) considera que las prejubilaciones deben cubrir "un mínimo del 80% del total de salidas".

Las prejubilaciones se ofrecerían a partir de los 58 años de edad con el 70% del salario bruto anual, aunque fuentes sindicales precisan que propondrán rebajar esa edad. En cuanto a las bajas incentivadas, el Santander ofrecería 40 días por año trabajado con un máximo de dos anualidades. Además, entre 900 y 950 de los empleos serían recortados en la red comercial, con lo que estarían vinculados al cierre de 450 oficinas propuesto por el Santander, y los 250 ó 300 restantes se recortarían en servicios centrales o territoriales.

Por las consecuencias laborales que puede provocar el cierre de oficinas, la entidad ampliará la movilidad geográfica hasta los 100 kilómetros, con alguna compensación económica que no ha sido especificada. En el caso de que se produzcan traslados forzosos, afectarán a un número máximo de empleados que tampoco ha sido definido y se ofrecerá una compensación de 20.000 euros. El cierre de oficinas, la mayoría centros con uno o dos empleados, afectará al 13% de la red del Santander, que cuenta con 3.467 oficinas en España.

Los sindicatos comunicaron a la entidad que no están de acuerdo con este plan. UGT reconoció que "no acepta" la propuesta del Santander. "Entendemos que este proceso tiene que estar basado en la voluntariedad y rechazamos cualquier medida traumática para la plantilla del Banco Santander", expone el sindicato. Comisiones Obreras (CCOO) manifestó que "no es justificable ninguna pérdida de empleo y el número de salidas se debe reducir sustancialmente"

La entidad afronta este ajuste en Santander España y en su centro corporativo en un contexto en que el negocio bancario está sometido a una creciente presión. Con los márgenes menguando por los bajos tipos de interés y una insuficiente demanda de crédito, con la presión regulatoria exigiendo más capital y con la creciente competencia de las nuevas iniciativas tecnológicas ('fintech'), el Santander recurre a la reducción de costes como medio para defender su cuenta de resultados.

En 2015, el margen de intereses de Santander España cayó un 5,4%, hasta los 3.430 millones, el margen bruto bajó un 8,4%, hasta los 6.080 millones, y el margen neto menguó un 15,7%, hasta los 2.646 millones. Solo el descenso de las dotaciones para insolvencias permitió que el beneficio creciera un 18,2%, hasta los 977 millones de euros. Incluyendo el negocio inmobiliario y la parte española de Santander Consumer Finance, el banco ganó en España 727 millones durante el pasado ejercicio.