Sánchez a Rajoy: "Haga una reflexión, es usted un tapón para la renovación en el PP"

Pedro Sánchez tenía una difícil papeleta. Escoger el tono con el que contestar a un durísimo Mariano Rajoy redivivo tras semanas opacado por las luces de neón de las negociaciones para intentar formar Gobierno. El presidente en funciones había vuelto este miércoles en el Congreso por sus fueros, tirando de retranca y de un discurso sin concesiones, en el fondo y en la forma.

[Siga en directo el debate de investidura de Pedro Sánchez]

El candidato socialista eligió un tono no bronco. Una intervención "respetuosa", como él mismo dijo. Lo fue. Hasta el punto de que le faltó el mordiente que le sobró a Rajoy. Porque su intención era mostrar que lo que toca ahora es "desterrar el insulto, la descalificación" perpetrada minutos antes por el presidente en funciones, que abusó de "soberbia", la forma más "débil" de ejercer el poder. Una prueba, vino a decir, de su propia impotencia, la de un líder demediado y al que llamó "tapón" para la regeneración en el PP.

Sánchez, para empezar, reivindicó lo hecho en las últimas semanas. Cómo su partido había sido "coherente desde el primer minuto". Cómo aguardó a que Rajoy moviera ficha, puesto que había ganado las elecciones generales del 20-D. Pero el líder del PP "no fracasó" en su intento, sino que "renunció a formar Gobierno". "Ese es su mayor fracaso, su renuncia, este debate es la viva prueba de ese fracaso. No nos reproche a quienes durante este mes hemos estado trabajando para lograr un acuerdo".

"Y luego me llama frívolo"

El secretario general socialista, pues, afeó a Rajoy que se "escabullera" y excusara su rechazo a acudir a la investidura utilización como argumento un presunto Gobierno de coalición con Podemos. Y ahí miró fijamente a Pablo Iglesias, a su principal objetivo en este debate de investidura: "Los que utilizó como excusa pueden ser la única tabla de salvación para que usted siga siendo presidente del Gobierno". La misma expresión, por cierto, que utilizó el pasado domingo en una entrevista en 'La Vanguardia'. Una reformulación de la pinza con la que quiere atraer a Podemos.

El candidato defiende que su programa acordado con Ciudadanos sí es una "enmienda a la totalidad" de las políticas impulsadas por el Gobierno del PP

Defensa de su actuación. Esa fue la viga maestra sobre la que construyó Sánchez su discurso. Porque antes Rajoy había hablado de una candidatura "ficticia", de una investidura que sólo buscaba su "supervivencia" al frente del PSOE. "No critique a quienes hemos puesto el reloj de la democracia en marcha y quienes hemos hecho un ejercicio de valentía y coraje". "Tenía que haber estado en la tribuna defendiendo su investidura y no en su escaño", le lanzó al final.

Nunca diré que el PP es corrupto. Cuestión distinta es que muchos dirigentes hayan traicionado a sus militantes y sus votantes

Si algo demostró el careo Rajoy-Sánchez (breve, por cierto, apenas una hora y cuarto de refriega en total), es que no hay acuerdo por ninguna parte. Ambos demostraron nula simpatía personal, y eso que el socialista no saltó a degüello contra el presidente del Gobierno en funciones. "Propone cambiar de Gobierno pero con la condición de que Rajoy sea presidente y hagamos las políticas del PP. Y luego usted me llama frívolo, señor Rajoy", ironizó.

Más tarde se adentró en por qué son incompatibles PSOE y PP. El acuerdo firmado con Ciudadanos, esgrimió, es una "enmienda a la totalidad" de las políticas del PP. Tanto en materia laboral, como en estabilidad presupuestaria, en energía o en blindaje de derechos. Y corrupción. El Gobierno que aspira a liderar -y que hoy por hoy es un imposible- quiere "sacar a la política de la crónica de sucesos" a la que le metió el PP por sus "casos de corrupción". En su segunda respuesta amplió su andanada contra Rajoy, sin excederse ni caer en el "no es una persona decente" del debate a dos en campaña: "Nunca diré que el PP es un partido corrupto. Cuestión distinta es que muchos dirigentes en distintos territorios hayan traicionado la confianza de sus militantes y sus votantes. Es necesario que se produzca la verdadera regeneración democrática".

Fue aquí donde Sánchez le pidió a Rajoy que haga "una reflexión" desde el "máximo respeto a sus 122 diputados y sus siete millones de votantes": "Si usted no se está convirtiendo en un tapón para la renovación y la regeneración del PP en España. El PSOE siempre estará promoviendo el cambio de políticas y esto hace incompatible que usted y yo nos podamos entender para formar Gobierno". "Es usted el tapón", le replicó Rajoy desde su escaño.