Rivera ofrece al Rey los escaños de C's para "desencallar la situación" de bloqueo

El Rey recibió este jueves por la tarde al presidente de Ciudadanos en el Palacio de la Zarzuela en el marco de la ronda de consultas que el Monarca está manteniendo con todas las fuerzas políticas con representación en el Congreso. En la reunión -de una hora y 40 minutos, la de duración más larga hasta ahora-, Albert Rivera transmitió a Felipe VI su voluntad de que España “tenga una legislatura fructífera” en la que por fin “haya los cambios y el diálogo que los ciudadanos pidieron en las urnas”, explicó.

El líder del partido centrista hizo saber al jefe del Estado que su partido “no tiene la voluntad” de apoyar ninguna de las dos candidaturas -es decir, la de Mariano Rajoy y Pedro Sánchez-. “Haremos una oposición responsable”, explicó el dirigente barcelonés, que sí se mostró dispuesto a desbloquear la situación actual entre el PP y el PSOE. “He ofrecido al Rey los escaños de Ciudadanos para desencallar el bloqueo”, aseguró, con el objetivo de que España “tenga un Gobierno que ejecute las reformas que necesita”.

Eso sí, Rivera quiso hacer hincapié en que el diálogo con el resto de fuerzas deberá enmarcarse dentro de los pilares fundamentales de la democracia. “Toda nuestra predisposición para garantizar que cualquier pacto se haga en el marco de la Constitución y respetando el sistema del bienestar, la economía de mercado y la pertenencia a Europa”, afirmó. El presidente de C’s quiso erigirse frente al Monarca como garante del cambio y las reformas. “La nueva política tiene que ser responsable, pero está llamada a hacer esos cambios”, espetó tras su cita en Zarzuela. De hecho, el dirigente quiso mostrarle al Rey “la oportunidad” que supone una Cámara Baja sin mayorías absolutas, que obliga al diálogo, a los matices y “a ponernos de acuerdo”.

También hubo tiempo para abordar el tema catalán, más teniendo en cuenta la condición de Rivera, que conoce bien el terreno. “Nosotros hemos manifestado nuestro compromiso en la defensa de la igualdad de todos los españoles”. El barcelonés no dudó en mostrar la contundencia que siempre ha demostrado sobre el desafío separatista de Cataluña y ha asegurado al Rey que su partido defenderá que “no se puede negociar con la soberanía nacional”.

En cuanto a una futura reforma de la Constitución, el presidente de Ciudadanos sí transmitió al Monarca -con el que tiene buena sintonía- su visión sobre “revisar” la Carta Magna, tal y como recogía su programa electoral. Aun así, Rivera insistió en que no basta con que su partido y el PSOE estén de acuerdo para reformarla, sino que el PP “debe mover ficha también”. Precisamente en el marco de acometer “grandes reformas” que, a juicio del líder centrista, necesita el país, sugirió Rivera la posibilidad de que “mucha gente desencantada con el proyecto español se reenganche”.

El dirigente catalán no abordó con el Monarca el posible escenario de nuevas elecciones ni tampoco qué candidato debería ser el primero en someterse a una sesión de investidura. Rivera prefirió mostrarse como el posible ‘mediador’ para acabar con la “guerra fría” existente entre socialistas y populares, y sí transmitió a Felipe VI las dificultades que supondría una alianza de Pedro Sánchez con el partido liderado por Pablo Iglesias y las distintas marcas territoriales. “Una cosa es dialogar manteniendo los principios básicos, y otra es hablar con todas estas fuerzas, que cada una pide lo que quiere”, aseguró Rivera en referencia a la petición del derecho de autodeterminación y sistemas similares al régimen foral.