Arroz, pasta, lácteos... Primeras compras públicas de comida para necesitados

La incipiente crisis económica provocada por la pandemia del coronavirus empieza a aflorar ya algunos de sus efectos más preocupantes. Los servicios sociales de diferentes administraciones públicas están dando la voz de alarma por la situación de severa necesidad que observan ya de damnificados por los efectos económicos derivados de la lucha contra el Covid-19.

Así lo ha hecho, por ejemplo, el Cabildo de Fuerteventura. El Gobierno insular canario ha lanzado un "contrato de emergencia para el suministro y distribución de kits de productos de primera necesidad".

Justifica el trámite de urgencia en que "las medidas de contención en el ámbito de la actividad comercial, equipamientos culturales, establecimientos y actividades recreativos, actividades de hostelería y restauración, y otras adicionales, tienen una especial incidencia en la isla de Fuerteventura, economía sustentada básicamente en el sector servicios, eminentemente de carácter turístico, al igual que en el conjunto del archipiélago canario".

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Por lo anterior, la Administración isleña destaca que "si a ello se acompaña la disminución del tráfico aeroportuario y el control de la libre circulación de las personas, se dibuja un contexto socioeconómico crítico, en el que varias empresas turísticas comienzan a adoptar medidas que implican el cierre de la actividad comercial y/o el establecimiento de expedientes de regulación temporal de empleo (ERTE), que dejarán en situación de desempleo a muchas familias".

"Ello deriva en la más que presumible creación de bolsas de pobreza y exclusión social y el debilitamiento de las personas más vulnerables", concluye el Gobierno de esta isla canaria. Por lo que ve "incidencia directa en la situación de desempleo y desprotección social del colectivo de personas más vulnerables".

Ante esta situación de emergencia, el Cabildo de Fuerteventura persigue dar "la cobertura de alimentación básica, limpieza e higiene personal y sanitaria a personas en situación de necesidad, bien porque se trata de personas mayores, con discapacidad, enfermedad crónica y/o dependencia, que viven solas, o carecen de redes de apoyo familiar o social; o familias en situación de desempleo, con o sin hijos/as a cargo, que lo precisen por carecer de recursos económicos". Para ello, ofrece paquetes de ayuda de 120, 240 y 320 euros dependiendo de la situación familiar.

Las ayudas tienen una dotación presupuestaria de tres meses y en cada lote de productos de primera necesidad se incluyen lácteos, legumbres, agua, pan, cereales, arroz, pasta, frutas, verduras, carnes, pescado, embutidos, conservas, gel de baño, champú, jabón, higiene personal, esponja, dentífrico, papel higiénico, productos de higiene doméstica para el lavado de ropa o limpieza como lejía, friegasuelos, lavavajillas, material de limpieza, así como otros productos de primera necesidad.

Se entragarán lácteos, legumbres, agua, pan, cereales, arroz, pasta, frutas, verduras, carnes, pescado, embutidos, conservas, entre otros

La isla canaria de la provincia de Las Palmas no es la única que ya detecta insuficiencias básicas entre su población a consecuencia del coronavirus. El Ayuntamiento de La Unión, en la provincia de Murcia, también se ha visto obligado a lanzar una compra exprés de alimentos para dar cobertura a los castigados por la nueva crisis.

"Ha acontecido una catástrofe sanitaria, a causa del virus Covid-19, especialmente agravada en España, que precisa del refuerzo de servicios sociales para la atención de los colectivos más vulnerables". En este sentido, el consistorio municipal murciano señala que la Coordinadora de Servicios Sociales ha elaborado un informe relativo a la necesidad de proceder a contratar el suministro de alimentos básicos para familias del municipio en situación de vulnerabilidad, como consecuencia de la actual catástrofe sanitaria del coronavirus".

Justifica esta operación de emergencia porque "un procedimiento con licitación conlleva una tramitación de varios meses, lo que impide la actuación inmediata de la Administración que se requiere ante el acontecimiento catastrófico acontecido y el grave peligro que supone para los vecinos del municipio que carecen de recursos para poder alimentarse durante esta crisis".

El "acontecimiento catastrófico" supone un "grave peligro para los vecinos que carecen de recursos para poder alimentarse durante esta crisis"

Por todo lo anterior, el ayuntamiento resuelve la "adquisición de productos de primera necesidad de alimentación básica familiar en favor de la población en situación de vulnerabilidad del municipio de La Unión, en el marco de la emergencia sanitaria declarada por el Covid-19”, y explica que "queda acreditado que la presente contratación mediante un contrato por tramitación de emergencia está plenamente justificada". Por ello, el alcalde firma la contratación de dos supermercados para la provisión de alimentos a sus ciudadanos más necesitados por más de 30.000 euros.

Los casos anteriores son los primeros síntomas de las consecuencias de la crisis que pueden aparecer para los colectivos más vulnerables, muchos de los cuales se verán golpeados por la fuerte crisis económica y de desempleo que ya se da por hecha.

En este contexto, el Gobierno ha anunciado la creación de un ingreso mínimo vital para las familias más desfavorecidas. Aunque el Ejecutivo aseguró tenerlo ya acordado, explicó que no será hasta el mes de mayo cuando esté listo para su aprobación. Se espera que esta renta llegue a un millón de hogares, que esté dotada de alrededor de 500 euros al mes y tenga un coste de 6.000 millones de euros al año. Sin embargo, el Gobierno no ha confirmado los detalles de este programa.