Alcaraz, el tenista que "no ha empatado con nadie" y sueña con brillar donde Rafa Nadal no lo ha hecho

El español Carlos Alcaraz se ha convertido en la gran sensación del tenis mundial. Con solo 18 años, ha demostrado al circuito que ha llegado para quedarse y la pregunta ya no es tanto cuál es su techo, sino cuándo será capaz de lograr meterse entre los mejores del mundo. Con una cabeza privilegiada, una gestión de las situaciones en pista impropias de un jugador de su juventud y un tenis de enorme nivel, el murciano sueña con hacer historia... fuera de la 'zona de confort' española.

Tradicionalmente, el jugador español se ha caracterizado por brillar en tierra batida. Pistas más lentas y bolas con mayor peso se han adaptado mejor a las cualidades de los grandes nombres del tenis nacional, que han hecho historia en la arcilla de medio mundo, con Rafa Nadal como gran ejemplo. Pero Alcaraz es diferente: tiene un potencial difícil de calibrar y sabe que necesita seguir mejorando para alcanzar el techo del tenis mundial. Eso sí, tratando de marcar una época en pista rápida.

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Rubén Rodríguez

De sobra es conocido que Alcaraz es un gran seguidor de Nadal e, incluso, le recuerda por momentos: su manera de moverse en pista, su poder con el 'drive', su mente privilegiada para analizar situaciones de juego y su atrevimiento a pesar de su insultante juventud. Pero, curiosamente, cree que su estilo de juego se adapta mejor a las superficies más duras, donde entiende que puede llegar a conseguir grandes éxitos si es capaz de no perderse por el camino.

"Mi juego se adapta a todas las superficies, pero creo que terminaré estando más cómodo en dura porque se juegan más torneos que en arcilla", aseguraba recientemente Alcaraz en una entrevista con 'Marca'. Ahí es, precisamente, donde aparece una de las grandes diferencias con Nadal: no solo en sus preferencias sobre la pista, sino en el propio juego. Mientras al balear se le ve como un jugador que se 'agarra' en pista a base de coraje, Alcaraz es capaz de llevar el ritmo de los encuentros.

Actualmente, Alcaraz es el décimo noveno mejor jugador del mundo y está a menos de 1.500 puntos de conseguir el objetivo del año: acabar entre los diez mejores. Pero viendo su progresión, da la sensación de que se ha quedado corto en sus previsiones... pero todo tiene una razón de ser. Y es que su entrenador, Juan Carlos Ferrero, es el primero que pone al murciano los pies en la tierra para que no pierda la perspectiva de quién es y lo que debe hacer si quiere triunfar.

"Cada vez que consigo algún éxito, me dice que aún no he empatado con nadie y que tenga los pies en el suelo", confirmaba Alcaraz en la entrevista. Pero, lo cierto es que, comparativamente, sus números asustan: ha ganado más títulos que Nadal a su edad y, mirando a la clasificación al siguiente jugador de su generación (18 años), no aparece hasta el puesto 86, honor que ostenta el noruego Holger Rune. Por ello, las expectativas son tan altas con el jugador español.

Curiosamente, los dos títulos que ha ganado Alcaraz (Umag y Río de Janeiro) los logró en arcilla, pero entiende que sus condiciones le hacen ser un jugador que puede sacar su mejor versión en pista dura. Aún ve lejos ganar su primer Masters 1.000 o un Grand Slam, pero no se cierra puertas y es consciente de que el trabajo es la única razón para tratar de luchar por sus sueños. Por ello, el único secreto de su juego es ese: esfuerzo, sacrificio y ser inconformista con los logros.

Alcaraz sabe de dónde viene y dónde quiere llegar. Acaba de aterrizar en el mundo del tenis, pero lo tiene todo para triunfar: el camino no es sencillo y su gran referente, Nadal, ha puesto el listón muy alto. Buscará dar la sorpresa en Indian Wells, donde intentará volver a mostrar su mejor versión y, por qué no, tratar de levantar su primer gran título en su superficie favorita. Pero Alcaraz irá con pies de plomo: sabe que, para lograr los éxitos, la humildad es el camino a seguir.