El sobresalto de Rafa Nadal y la victoria de España en su debut en la ATP Cup

Rafa Nadal hizo bueno el triunfo de Bautista en el partido debut de la Selección en la ATP Cup. El balear, que no suele fallar, le dio el punto definitivo a España frente a la principal raqueta georgiana, Nikoloz Basilashvili, número 26 del mundo (6-3 y 7-5). De esta manera, la Armada empieza su andadura en el torneo con buen pie. El partido de dobles que disputaron después Feliciano López y Pablo Carreño fue intrascendente, pues no cambió el resultado final, aunque sí resultó importante en cuestión de puntos, juegos y sets, ya que a mayor suma, más posibilidades de pasar de fase en caso de no ser primera de grupo. Y es que, al igual que en la Davis, los primeros clasificados de los seis grupos compuestos pasan a cuartos, mientras que las plazas restantes son para los dos mejores segundos. El dobles español redondeó finalmente el trabajo (6-3 y 6-4). España volverá a jugar el lunes contra Uruguay (10:30h), que en la madrugada de este sábado cayó derrotada por Japón, sin Nishikori.

Al contrario que Bautista, que lo tuvo sencillo contra Metreveli, Nadal hubo de aplicarse más para superar a su rival en este segundo encuentro. El número uno empezó perdiendo su servicio, un tanto descolocado en pista, y se fue enchufando a medida que transcurrió el primer set, conectando golpes ganadores y conteniendo las subidas de Basilashvili. Australia no es un país cómodo para Rafa, la pelota bota y corre mucho en la superficie dura de Perth, características que no son de su agrado y que le obligan a tirar más de piernas. Le faltó algo de consistencia al manacorí en el primer set, pero supo rehacerse para solventar momentos complicados. El georgiano, lejos de querer estirar el duelo, conectó sus golpes con potencia para intentar cerrar los puntos rápido. La estrategia le llevó a cometer errores de bulto desde mitad de pista que dieron oxígeno a Rafa. El balear le devolvió pronto el 'contrabreak', se puso por delante y no dejó de pisar el acelerador hasta cerrar la manga a su favor.

A medio gas

El segundo set no deparó muchos cambios: Basilashvili continuó a buen nivel, probablemente desplegando su mejor tenis, pero pecó de imprudente en los intercambios. Su agresividad descontrolada, la mejor arma de Nadal, que en este momento ya estaba más asentado. El resto al revés, eso sí, no terminó de fluirle. De hecho, al balear se le vio ligeramente enfadado cuando su golpeo a dos manos se le iba largo o, directamente, no pasaba de la red. En cualquier caso, su oponente no supo sacar demasiada tajada de las dudas del español. A medio gas, a Rafa le bastó para ganar el partido. Al de Tiflis se le fue haciendo de noche con cada bola a fondo de pista. Nadal incluso se permitió levantar peloteos en contra haciendo gala de su particular 'banana-shot' tras carrera agónica, pero la sensación es que puede mejorar aún más su prestaciones en la competición. El español tuvo un sobresalto importante en el décimo juego, cuando su rival le devolvió el 'break', pero fijó el borrón y cuenta nueva y encarriló el encuentro para darle la eliminatoria a España. Georgia no era rival en la teoría y tampoco resultó serlo en la práctica.

4-0 para Nadal en los cara a cara contra Basilashvili, que no encuentra soluciones a pesar de los numerosos intentos. El manacorí finiquitó su partido pocos minutos después de que Novak Djokovic convirtiera el suyo contra el sudafricano Kevin Anderson, también con victoria (sufrida, eso sí). España y Serbia se podrían cruzar en cuartos, pero nunca si logran pasar como primeras. Ese es el objetivo de ambos combinados.