El 'déjà vu' de Ancelotti: el último gran agujero en defensa en el estadio donde ya perdió la Liga

El Real Madrid empieza a tener un serio problema con las lesiones. Acaba de comenzar la temporada, pero hasta ocho jugadores diferentes ya han tenido que pasar por la enfermería por culpa de diversos problemas físicos. Los últimos tuvieron lugar en el partido de este miércoles ante Las Palmas, donde los dos centrales acabaron tocados al acabar el partido: David Alaba, con una lesión en el aductor derecho, y Antonio Rüdiger, con un golpe... lo que deja al equipo bajo en defensas.

El austriaco y el alemán han sido los dos últimos lesionados de un equipo que ya acumula numerosos problemas de diferente índole: las bajas de larga duración de Thibaut Courtois y Eder Militao y aquellas que han sufrido Arda Güler (dos veces), Dani Carvajal, Ferland Mendy, Vinícius (dos veces) y Dani Ceballos. Solo estamos en el inicio de la competición y Ancelotti ya se ha visto obligado a hacer encajes de bolillos con el equipo en varias ocasiones: la próxima, en Girona.

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Y es que, este sábado, el Real Madrid tiene un partido fundamental en Montilivi. Solo se han disputado 7 jornadas de Liga, pero el conjunto blanco busca el asalto a la primera posición de la Liga ante el actual líder, el Girona, la gran revelación de la temporada. No será un encuentro nada sencillo para el conjunto blanco, que se mide a un combinado que está haciendo un fútbol atractivo, de ataque y que está demostrando ser una roca. Y lo hace reviviendo los fantasmas de un pasado reciente.

La pasada temporada, el Madrid no fue capaz de ganarle ningún partido al Girona. En la primera vuelta, los blancos no pasaron del empate a uno en el Bernabéu, mientras que en la vuelta fueron humillados con cuatro goles de Taty Castellanos. Aquel día, el Real Madrid se vio superado en defensa e impotente ante un rival muy superior, firmando uno de los peores partidos del curso. De hecho, aquella derrota fue el adiós definitivo de los de Ancelotti a la lucha por la Liga.

"No fuimos contundentes en los duelos. El partido se complicó, lo intentamos remontar con individualidades y no en grupo. El equipo no ha jugado. El nivel individual ha sido más bajo de lo normal en todos los jugadores, muy bajo. El aspecto defensivo lo hemos olvidado, no hemos tenido ningún tipo de compromiso", explicaba el técnico italiano después de aquel partido. Unos meses después, el Madrid regresa al lugar del crimen con un equipo cogido por pinzas.

Muchas dudas en el equipo

Ahora, con Carvajal y Mendy recién recuperados, el problema está en una zona central donde, ahora mismo, Nacho es el único jugador completamente disponible. Con Militao y Alaba lesionados, si Rüdiger no es capaz de recuperarse a tiempo, Ancelotti deberá de volver a inventar: bien ubicando a Mendy en esa posición -dándole el lateral zurdo a Fran García-; bien retrasando a Aurelien Tchouaméni a un puesto de urgencia; bien tirando del filial, donde Marvel tiene muchas más papeletas.

El agujero con el que se encuentra en la defensa no es más que la confirmación de que el Madrid tiene un serio problema con las lesiones, especialmente las musculares. Parece que el equipo blanco está notando seriamente la fatiga acumulada... y es solo el principio: la carga de la pasada temporada, con Mundial en invierno, es el pistoletazo de una preparación física que debe de tener en cuenta que, en el próximo parón estival, habrá Eurocopa y Juegos Olímpicos.

Pero, además, empieza a haber ciertas dudas en la afición sobre qué pasa en el conjunto blanco. En los últimos años, las lesiones se han convertido en un problema habitual de un Madrid al que siempre se le ha achacado contar con una plantilla corta. A veces, las críticas han ido hacia la preparación física pero, en otras, el gran señalado es un Ancelotti al que se le critica las pocas rotaciones que hace a lo largo de la temporada. Este curso, los cambios son obligados.

Encontrarse desde el comienzo de la temporada con muchos lesionados ha hecho que el italiano no tenga otra alternativa que mover su equipo. Es posible que la plantilla siga siendo corta, pero este curso sí cuenta con soluciones que no tenía años atrás: por fin hay competencia en el lateral izquierdo, hay un nueve de garantías, muchos jugadores de perfiles distintos en la medular y extremos habilidosos capaces de cambiar un partido. Plantilla corta, pero mucho más competitiva.

De momento, el equipo está en buena línea, pues solo ha tropezado en el Metropolitano y está mostrando un gran nivel, pero el partido del sábado no será nada sencillo. El Madrid se juega más que tres puntos o el liderato de la Liga: tiene que demostrar que, en los partidos más exigentes, puede dar la talla. Ante el Atlético no fue capaz y, solo unos días después, llegará el Nápoles. Otra prueba de fuego para un Ancelotti obligado a dar con la tecla de los ajustes defensivos.