KO del Atleti en San Mamés (2-1): el Barça depende de sí mismo para ser líder
El Atlético de Madrid cae derrotado frente al Athletic de Bilbao. Sigue primero en la clasificación, a la espera de lo que haga el Barcelona frente al Granada el próximo jueves
Dura derrota para el Atlético de Madrid. El equipo dirigido por Diego Pablo Simeone se marcha de San Mamés con un 2-1 que no solo le priva de puntuar, sino que permite al Barcelona depender de sí mismo para colocarse como líder de LaLiga si gana el partido que tiene aplazado. Después de dos buenas victorias frente a Eibar y Huesca, los colchoneros impactaron con un trabajador Athletic de Bilbao. El conjunto de Marcelino fue muy superior en la primera mitad, con un gol tempranero de Berenguer. El Atleti salió a por la remontada en los segundos 45 minutos, con Luis Suárez y Joao Félix regresando de lesión. Empataron de saque de esquina gracias a Savic, pero respondió Iñigo Martínez a falta de siete minutos para el final de la misma manera. Si el Barça de Koeman gana al Granada el próximo jueves, será el nuevo líder de la competición doméstica.
Tras una primera mitad en la que el Athletic impuso su ley, el equipo de Simeone saltó al campo con la idea de generar ocasiones a base de avanzar metros. El juego era estático, pero poco a poco el líder se acercaba a portería rival. Marcos Llorente buscó sorprender en el minuto 52, con un zurdazo raso que se marchó a menos de un metro del palo. Instantes antes, la plantilla colchonera pidió una mano de Núñez. El defensa local impacta con su codo en el balón, pero la mano está pegada al cuerpo. ¿El problema? La falta de criterio en las manos durante toda la temporada. Esta vez el árbitro decidió que no era causa para pitar penalti, otras similares sí significaron pena máxima.
Correa y Carrasco avisaron. El Atleti se estaba estirando, el partido era completamente distinto a los primeros 45 minutos. Tocaba intentar la remontada mientras Luis Suárez mostraba su desesperación en la banda mientras calentaba. Tanto el uruguayo como Joao Félix y Lemar entraron al partido rozando la hora de encuentro. Herrera, Trippier y Saúl dejaron su puesto. El canterano se marchó con mal sabor de boca, instantes antes de su cambio un fallo suyo casi provoca el segundo gol del Athletic. Entregó con demasiada facilidad el balón a Morcillo, que recorrió 50 metros hasta dejar a Sancet con una ocasión clara que mandó por encima del larguero.
Marcos Llorente pasó de jugar como delantero a hacerlo de lateral derecho. Y por su banda llegaron las ocasiones de más peligro en la última media hora. Quizás temiendo una alineación demasiado ofensiva, Simeone decidió dar salida a Correa para que Torreira reforzase el centro del campo. Había vuelto a avisar el Athletic con sus contras. Los cambios que debían de provocar reacción acabaron por anestesiar los buenos minutos colchoneros. En estático, solo Carrasco estuvo cerca de empatar con un centro raso, con un desborde previo espectacular, que Suárez no llegó a rematar. Los de Marcelino, por su parte, se encomendaron a las individualidades de Iñaki Williams, que sustituyó a Villalibre.
Como un gigante se elevó Savic en el minuto 77 para culminar el empate con un gran remate de cabeza. Un córner lanzado por Carrasco fue peinado por el defensa montenegrino en un sutil cabezazo que salió imparable. La jugada a balón parado dio oxígeno a Diego Pablo Simeone. El central, tan cuestionado en temporadas anteriores, está demostrando ser un baluarte defensivo para el líder. Pero la alegría le duraría menos de diez minutos al Atlético de Madrid. También de saque de esquina, el Athletic se volvió a poner por delante con un testarazo de Íñigo Martínez. El central completó un partidazo gracias a un remate, extrañamente solo, a dos metros de Oblak. Falló la defensa rojiblanca. No hubo tiempo para más, el partido se murió en jugadas sin peligro. Mereció el empate el todavía líder de la competición, pero en el fútbol manda el marcador.
El Athletic, claro dominador de la 1º mitad
El partido comenzó de la peor manera posible para las aspiraciones del líder de LaLiga. En frente se encontró un equipo con directrices claras: entregar el balón donde el Atleti no hace daño, tapar la amplitud de los de Simeone y salir sin miedo al contraataque. Así llegó el primer gol de la noche. Lodi se equivocó y Felipe mostró una falta de contundencia decisiva en el carril derecho. Esta tímida defensa fue aprovechada por Capa, poderosísimo en la zancada, que consiguió remontar hasta la línea de fondo. Su centro tocó en el central brasileño de los visitantes, despistando al resto de la zaga y dejando a Álex Berenguer un balón sencillo para rematar de cabeza, imposible hacer nada por parte de Oblak. Era el minuto 8 y el gol dejó tocado al Atleti.
Aún más doloroso podría haber sido el resultado para Simeone en los primeros 20 minutos. Se equivocó el árbitro González Fuertes al interrumpir un contragolpe del equipo de Marcelino. Berenguer, después de un rebote, tenía terreno libre por delante, pero pecó de falta de paciencia el árbitro, pitando una falta de Marcos Llorente en el inicio de la jugada. Era una infracción evidente, pero provocó gran enfado entre los jugadores del Athletic de Bilbao. También se quejaron los locales de un duro choque de Llorente, que arrastraba una amarilla desde la anterior falta, sobre Íñigo Martínez. Se la jugó en exceso el centrocampista.
La primera gran ocasión del Atlético de Madrid llegaría de las botas de Ángel Correa, un jugador de dulce y que marcó en los dos anteriores partidos. En el minuto 28, el argentino se generó en solitario una clara ocasión sobre la portería defendida por Unai Simón. El mediapunta recibió a pocos metros de los tres palos, realizando un excelente giro de tacón. Lamentablemente para los intereses del líder, su remate se marchó muy desviado.
La tónica general de estos primeros 45 minutos fueron de dominio para el Athletic. Los contraataques, capitaneados por el imponente físico de Capa, superaron con facilidad la timidez de las líneas defensivas colchoneras. El lateral derecho fue, probablemente, el mejor jugador de este primer tiempo, pero una fortuita acción con Dani García acabó en lesión para él, teniendo que ser sustituido. En el Atleti, tan solo Correa daba síntomas de intentar alguna jugada de peligro, pero sin plasmar jugadas que hicieran temblar a Unai Simón. En cambio, cada balón perdido en el centro del campo era castigado por los locales con peligrosísimas contras.
Hubo susto incluso antes del pitido inicial. Raúl García abandonó San Mamés poco antes del partido debido a que los servicios médicos del Athletic Club detectaron que padecía una leve fiebre. Por los protocolos de anti covid-19, el club mandó al jugador a descansar a casa, pese a estar citado para integrar el banquillo de Marcelino.
Dura derrota para el Atlético de Madrid. El equipo dirigido por Diego Pablo Simeone se marcha de San Mamés con un 2-1 que no solo le priva de puntuar, sino que permite al Barcelona depender de sí mismo para colocarse como líder de LaLiga si gana el partido que tiene aplazado. Después de dos buenas victorias frente a Eibar y Huesca, los colchoneros impactaron con un trabajador Athletic de Bilbao. El conjunto de Marcelino fue muy superior en la primera mitad, con un gol tempranero de Berenguer. El Atleti salió a por la remontada en los segundos 45 minutos, con Luis Suárez y Joao Félix regresando de lesión. Empataron de saque de esquina gracias a Savic, pero respondió Iñigo Martínez a falta de siete minutos para el final de la misma manera. Si el Barça de Koeman gana al Granada el próximo jueves, será el nuevo líder de la competición doméstica.