Mourinho necesitaría otra excusa para no dejar marchar a Pedro León

Mourinho y Pedro León son como el agua y el aceite. No hay feeling y nunca lo hubo. Desde que llegaron a Chamartín, el murciano y el portugués no han llegado a comprenderse, aunque el peor parado ha sido el jugador. Hizo una buena pretemporada y en un primer momento pareció que durante la presente campaña León contaría con más oportunidades de las que a día de hoy le han sido concedidas. Pero la actitud del jugador en ocasiones puntuales ha sido razón suficiente para que Mourinho empezara castigándole y terminara prácticamente 'marginándole'. Apenas cuenta con minutos, es apartado de las convocatorias sistemáticamente y no entra en los planes del técnico, pero, paradójicamente, tampoco permitió su marcha en el mercado de invierno. Ahora, el Hércules puja por él y de nuevo será el luso quién decida el futuro de su jugador menos querido. Ahora está por ver si dará luz verde a su salida o si utilizará otra excusa para evitarlo.

Mourinho ha ganado el pulso que mantenía con Jorge Valdano y ha conseguido acaparar la responsabilidad en términos deportivos. Era lo que exigía y se ha salido con la suya. Todas las competencias de carácter deportivo las aglutina en su persona, sin injerencias. Por tanto, él decide si un jugador sale del equipo o no. La decisión última corresponde a Florentino Pérez, pero éste actuará guiado por el técnico. Es decir, la última palabra de Florentino es en realidad la de Mourinho.

El entrenador del Real Madrid ya frustró la salida del jugador durante el mercado de invierno, cuando equipos como Chelsea o Milan le pretendían. En aquella ocasión, la excusa de Mourinho para retener al jugador fue que un club como el inglés tampoco jugaría, y en caso de hacerlo no quería reforzar desde el banquillo a un equipo rival. Ahora, la marcha de Pedro León sí sería para jugar, concretamente en el puesto de Jorge López Marco 'Tote', por lo que Mourinho tendría que buscar otro argumento para justificar otra negativa de este estilo.

El Hércules insiste y no aparta sus ojos de Pedro León. El club herculano ve en él la solución perfecta para suplir la baja de Tote, que sufre una triada en la rodilla y se perderá lo que queda de temporada. A través de su secretario técnico ya ha reconocido públicamente su interés y este fin de semana se reunirá con la directiva blanca aprovechando su visita al Santiago Bernabéu, donde ambos equipos se enfrentan en partido de Liga.

Más sentido común que intereses económicos

La ficha del '21' le cuesta al Real Madrid cerca de dos millones de euros al año, por lo que la salida del jugador no responde a motivos económicos y sí a una cuestión de sentido común. El Hércules, como mucho, asumiría la parte proporcional correspondiente al tiempo que León milite en su equipo como jugador cedido, una cantidad asumible para el club alicantino, y un ahorro apenas perceptible para las arcas de la entidad presidida por Florentino Pérez.

Si el centrocampista termina en Alicante, el Madrid le recuperaría a final de temporada pero con un rodaje del que ahora carece debido a la falta de minutos. León tendría la oportunidad de continuar creciendo como jugador y adquirir un nivel al que no llegaría teniendo en cuenta su situación actual y su condición de 'renegado'.

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