Sergio Gómez, la novedad de Guardiola: el diamante que sedujo a Kompany llega al City

Sergio Gómez es la nueva incorporación del Manchester City. Una petición expresa de Pep Guardiola, aunque no se sabe si jugará esta temporada en Inglaterra o se marchará cedido al Girona para tener más minutos. El año pasado jugó a un gran nivel en el Anderlecht (siete goles y 15 asistencias), equipo al que llegó por la insistencia de Vincent Kompany, exentrenador del conjunto belga.

El catalán comenzó su carrera en el Espanyol, aunque rápidamente cambió a los pericos por el Barcelona cuando tenía nueve años. En La Masía era uno de los jugadores más destacados e hizo amistad con algunos compañeros actuales de la Selección sub-21 como Juan Miranda y Abel Ruiz.

Su mejor momento, cuando aún no era profesional, le llegó en la Selección sub-17. Gómez integró el equipo que venció a Inglaterra en la final del Europeo (2-2 y 4-1 en penaltis) y repitió en el Mundial de la misma categoría. En ese torneo, sin embargo, los ingleses se tomaron revancha (5-2). Era un equipo dirigido por Phil Foden y Jadon Sancho, aunque este último, que había cambiado Manchester por Dortmund, solo disputó la fase de grupos porque su equipo lo reclamó.

Las camisetas de Vinicius

Los dos goles de España, que se colocó 0-2 en el marcador, fueron obra de Gómez. Ahí, sin embargo, emergió la resistencia inglesa y, liderados por Foden, voltearon el resultado. Phil fue elegido mejor jugador del torneo, mientras que Sergio tuvo que conformarse con el Balón de Plata.

Gómez había enseñado sus cartas en un gran torneo internacional del que están pendientes numerosos jugadores. La gran ausencia de aquel Mundial sub-17 fue Vinicius, que meses antes había liderado a Brasil para ganar el Sudamericano. Solo tenía 17 años, pero en la India, donde se celebró el Campeonato del Mundo, se vendieron camisetas suyas a pesar de no disputar el torneo.

El Barcelona B, entrenado por Gerard López, estaba en Segunda, una categoría perfecta para el rodaje de los canteranos. Sergio esperaba tener más oportunidades tras su buen rendimiento en el Mundial. Sin embargo, apenas jugó dos partidos, ninguno de ellos como titular. Gómez no tenía hueco ni en el filial. Cómo para pensar en el primer equipo.

La valentía del Dortmund

El primer contrato profesional que Gómez firmó con el Barcelona, en 2016, lo vinculaba a la entidad blaugrana hasta el 30 de junio de 2019.Y se incluía una cláusula de rescisión de tres millones de euros. De esa manera, los culés ahuyentaron el interés de algunos equipos, como el Liverpool. Los 'reds' le habían mostrado su interés en incorporarlo cuanto antes.

El Dortmund, no obstante, lo tuvo claro. En enero de 2018, ante las escasas oportunidades en Barcelona, abonó la cláusula y se lo llevó a Alemania. Como amarillo, sin embargo, no tuvo los minutos esperados (solo jugó dos partidos en el primer equipo) y se marchó cedido al Huesca dos temporadas. Para más tarde ser traspasado al Anderlecht. Ahora le llega el turno de recalar en otro grande, el Manchester City. Y de demostrar que la experiencia alemana le ha servido para algo.