Cuando "el bien del equipo" no va a satisfacer a David Villa, suplente en Milán

Seguro que cuando firmó en verano tras su sorprendente fichaje con el Atlético de Madrid, David Villa no se imaginaba viendo desde el banquillo de San Siro un decisivo partido ante el Milan en la Liga de Campeones. Simeone inició la semana ensayando de cara a este duelo con el ataque que recuperó la senda de la victoria el pasado sábado ante el Valladolid. Y en él todavía no estaba el asturiano, recién salido de una leve lesión muscular.

El buen momento por el que atraviesa Raúl García de cara a gol y la intensidad prevista ante los ‘rossoneri’ quizá echen para atrás al técnico argentino a la hora de poner a Villa de inicio el miércoles. Preguntado en un acto con la afición a través de Twitter ayer, lunes, el Guaje afirmó que siempre intenta hacer las cosas “por el bien del equipo”. Se sobreentiende, viniendo de todo un campeón del mundo y máximo goleador de la historia de la selección española, que se refiere a hacer las cosas sobre el césped.

La suplencia es algo extraño en la carrera de David Villa, fue descubierta en Barcelona pero nunca ha sentado nada bien a un jugador no problemático pero sí ambicioso. Además, no hay que olvidar que se encuentra en plena ‘carrera’ por llegar a integrar la lista de 23 que Vicente del Bosque confeccionará de cara al Mundial del próximo mes de junio. Y estar en grandes partidos partiendo desde el banquillo seguro que no es la mejor manera de hacer méritos.

Esa es la nueva tesitura que debe manejar el Cholo respecto al delantero de Tuilla. Lo cierto es que en Europa apenas ha tenido una aportación relevante, jugando la mitad de los seis partidos de su equipo, sólo dos de titular (siendo sustituido al descanso en uno de estos, en Oporto) y sin haber marcado en Champions ninguno de los 13 tantos que suma esta temporada. Durante la fase de grupos, su papel de segundo delantero tuvo mucho menos peso que el que sí ha ido teniendo de continuo cada fin de semana en la Liga. Ahora, cuando empieza la fase determinante de la competición más importante de clubes, todavía no va a poder ser una de las referencias de su equipo. Al menos, desde el principio.

Parece primordial que recupere su mejor tono tras las molestias musculares que le han obligado a estar en la enfermería durante tres partidos, precisamente, los tres que perdieron los rojiblancos de forma consecutiva y sin marcar ni un gol. Esa ausencia puso en contraste su aportación al equipo en cuanto a trabajo sucio y complemento del goleador Diego Costa, algo muy alabado por el técnico argentino cada vez que le han dejado caer en rueda de prensa que las actuaciones de Villa parecían lejanas a las que acostumbró en el Valencia y en su primera etapa en el Barcelona, antes de la grave lesión de hace dos años.

Diego también iría al banquillo

El caso es que llega un histórico Milan-Atlético y el Guaje apunta al banquillo. Allí compartirá asientos con el otro gran fichaje rojiblanco de la temporada, aunque éste más reciente, Diego Ribas. También rodeada de particularidades, la suplencia del brasileño tiene que ver más con su proceso de adaptación al equipo tan ensamblado que tiene formado Simeone desde hace meses.

De hecho, y salvo la presencia de Insúa por la lesión de Filipe Luis, el once que disponga el Atlético en San Siro estará formado íntegramente por jugadores que ya estaban en el club antes de la llegada del Cholo en 2011. Miembros de un bloque convertido en ganador donde no se echa en falta ni a todo un campeón del mundo. Ahí sí que ninguno sin excepción se ha acostumbrado a hacer lo que sea por el ‘bien del equipo’. Mérito de Simeone, sin duda.