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Cómo el Real Madrid y el Atleti están al mismo tiempo indignados con la no lesión de Correa
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Cómo el Real Madrid y el Atleti están al mismo tiempo indignados con la no lesión de Correa

En las filas del Real Madrid apuntan al milagro de la recuperación de Ángel Correa y en el Atleti creen que si la entrada hubiera sido a Bellingham se hablaría de cacería

Foto: Ángel Correa en una acción del partido contra el Cádiz. (REUTERS Juan Medina)
Ángel Correa en una acción del partido contra el Cádiz. (REUTERS Juan Medina)

La milagrosa recuperación de Ángel Correa provoca indignación en las filas del Real Madrid. En concreto, a los que consideran que el Atleti mintió en el comunicado médico donde informó de una lesión de grado I del ligamento colateral medial de la rodilla derecha. Lo acompañó de la imagen de la entrada de Jude Bellingham al argentino. Esto sucedió el día después de ganar el derbi y el objetivo del club rojiblanco no era otro que poner en el foco una entrada que podía haber provocado una grave lesión. El Atleti mostró, de esta manera, su indignación por la decisión arbitral. Belligham solo vio la cartulina amarilla.

Cinco días después, el indignado es el Real Madrid por ver cómo Correa es titular en el partido contra el Cádiz y no solo no se le ve con alguna secuela de la entrada, sino que es el protagonista con dos goles. Es lógico que se dude de la veracidad del comunicado médico del Atleti y se interprete como un ataque más al Real Madrid. Es imposible que un jugador dispute todos los minutos si tiene un esguince de rodilla. Aparecen médicos por todas partes para calificar de mentiroso al Atleti y poner en duda a Correa.

placeholder Correa celebra con Lino un gol al Cádiz. (REUTERS Juan Medina)
Correa celebra con Lino un gol al Cádiz. (REUTERS Juan Medina)

Esto no es más que la salsa del fútbol, la polémica de una rivalidad que está caliente en el inicio de la Liga. Miguel Ángel Gil Marín ha filtrado su malestar por las presiones que hace el Real Madrid desde su canal de televisión. Simeone, tras la victoria contra Osasuna, se alineó en la postura del dueño del club para corroborar que el Madrid tiene una potente maquinaria mediática con la que puede influir en los árbitros. Después llegó lo de Correa.

Forzó para jugar

Ya dudamos hasta de la salud de los jugadores y de su palabra. Correa, tras ganar al Cádiz, dijo que forzó para jugar este partido. Comprensible, hasta cierto punto, por las bajas de Morata (sancionado) y Depay (lesionado). Extraño de entender si la lesión parecía tan grave como hizo ver el Atleti. No hay que ser muy avispado para entender que el Atleti utilizó la imagen de la entrada de Bellingham a Correa en el comunicado para trasmitir su malestar. Si la entrada hubiera sido de Correa a Bellingham, en el Real Madrid habrían hablado de dureza y cacería.

Foto: El exárbitro José María Enríquez Negreira en una imagen de 1990. (EFE)

"Quiso forzar con un poco de dolor para ayudar el equipo". Deberían bastar estas declaraciones de Correa para creer que tiene un fuerte compromiso con su equipo y luego pasar a valorar sus dos goles que dan el tercer triunfo consecutivo al Atleti (el derbi, Osasuna y Cádiz). Se debería estar hablando más de la remontada tras ir perdiendo 0-2, de Griezmann está en un estado dulce, en su mejor versión, fino arriba y trabajador sin la pelota, con un Saúl que vuelve a ser un todoterreno, de la verticalidad y desborde de Lino y Riquelme, dos que hacen olvidar la salida de Carrasco, de la mentalidad ganadora de Simeone y, en definitiva, de que el Atleti tiene pinta de competir por la Liga con el Real Madrid y el Barcelona.

No se puede probar que el Atleti mintió en su comunicado con la lesión y lo que sí se puede confirmar es que Correa es ese ángel que tiene Simeone, que le saca de las situaciones de apuro, un suplente de lujo que no se queja y siempre está con buena actitud para sumar, con más o menos salud.

La milagrosa recuperación de Ángel Correa provoca indignación en las filas del Real Madrid. En concreto, a los que consideran que el Atleti mintió en el comunicado médico donde informó de una lesión de grado I del ligamento colateral medial de la rodilla derecha. Lo acompañó de la imagen de la entrada de Jude Bellingham al argentino. Esto sucedió el día después de ganar el derbi y el objetivo del club rojiblanco no era otro que poner en el foco una entrada que podía haber provocado una grave lesión. El Atleti mostró, de esta manera, su indignación por la decisión arbitral. Belligham solo vio la cartulina amarilla.

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