Gerrard, un icono del Liverpool que arrasa en el Rangers: "Es el sustituto lógico de Klopp"

A menos de tres meses de cumplir 41 años, Steven Gerrard camina con paso firme en su primera experiencia profesional como entrenador de fútbol. Después de una vida deportiva dedicada a su Liverpool -con permiso de unos años finales pre-retiro en el Los Ángeles Galaxy- el inglés hizo las maletas y se marchó a Escocia. Apenas 300 kilómetros separan la ciudad del Merseyside con Glasgow, a donde se desplazó para hacerse cargo de un Rangers que aspiraba a volver a la élite futbolística. Era el año 2018, abril, cuando faltaban escasos meses para finalizar la temporada. Tres años después, el equipo de Glasgow lidera la Premiership con una ventaja de 21 puntos frente a su eterno rival, el Celtic (aunque con dos partidos más por disputar). El conjunto está invicto tanto en la competición doméstica como en Europa League, donde se enfrentarán con el Royal Antwerp belga en dieciseisavos de final.

“Salvo debacle, con esa diferencia de puntos, algo muy extraño tendría que pasar para que el Rangers no gane esta liga”, así de contundente se muestra Carlos Cuéllar, ex jugador español que militó en el club escocés en la temporada 2007/8, “a nivel profesional seguramente fuera el mejor año de mi carrera”. “Cuando estás en activo no te dejan decirlo, pero desde fuera es una Premiership que está ganada”, afirma entre risas el que fuera defensa central, quien atiende a este periódico para repasar el momento de forma del Rangers.

Pese a estar solo una temporada defendiendo los colores del equipo de Glasgow, el impacto de Cuéllar en la grada del Ibrox Stadium todavía se recuerda. Fue nombrado mejor jugador de la Scottish Premiership, también recibió este premio por parte de la prensa, que por primera vez se lo otorgó a un defensa, y por parte de la hinchada del club: “Lo que supone estar en Rangers para Escocia es tremendo, es como jugar en un Real Madrid para ellos. Nos salió un año casi perfecto”.

El madrileño logró ganar tanto la Copa como la Copa de la liga, además de llegar a la final de la Europa League (conocida en ese momento como Copa de la UEFA). El único punto negativo que recuerda fue perder el campeonato doméstico en las últimas jornadas: “En general no nos daban las piernas”. Cuéllar estableció el récord de partidos disputados por un jugador en el Rangers en una sola temporada con 63 encuentros. “Allí antiguamente cuando empatabas en copa en vez de ir a prórroga o penaltis, hacías un replay, de ahí que jugase tantos partidos, fue una locura”, resalta.

La apuesta del Rangers por un entrenador sin experiencia

Apenas un año después de confirmarse su retirada como jugador profesional, en el 2017, Steven Gerrard comenzó a formarse como entrenador. Lo hizo en la academia del Liverpool, bajo la tutela de Jurgen Klopp, quien junto al director de la cantera red, Alex Inglethorpe, le dio la posibilidad de entrenar al conjunto sub 19. Cuando todavía no había acabado la temporada, el despido de Graeme Murty por parte del Rangers le abrió la posibilidad de dirigir a un equipo histórico de Escocia.

“Sorprendió un poco a nivel entrenador”, reflexiona Cuéllar; “Para un club tan grande que está buscando posicionarse de nuevo en la liga escocesa se esperaba a un técnico con algo más de caché. Pero en lo que es la figura del propio Gerrard, por el carácter que tenía en el campo, no me pareció una sorpresa, su trabajo estaba contrastado. Los entrenadores que ha tenido, su bagaje como jugador… El Rangers puede tener entrenador para años”. El equipo de Gerrard únicamente ha perdido un partido en lo que va de temporada, la eliminatoria de Copa de la liga frente al St. Mirren. Para el retirado central español, una de las claves está siendo las rotaciones y la confianza del técnico en su plantilla: “Como jugador Gerrard ha vivido lo que es una temporada completa. Todos los entrenadores dicen de boquilla que van a rotar, pero luego cambian dos jugadores y fuera. Él ha sabido encontrar un equilibrio con la plantilla”. Recuerda Cuéllar que ese mismo modelo lo empleó Walter Smith en su etapa como jugador del Rangers, cuando el histórico entrenador escocés empleaba un once diferente para cada competición.

“Eso le está dando una solidez al equipo. Demuestra que todo el que está ahí luchando día a día va a tener una oportunidad. Esa comunión es uno de los secretos de lo que está consiguiendo, claro, con todo el trabajo que hay detrás. Saben a lo que juegan y tienen una solidez defensiva impresionante”, insiste el madrileño. Tal y como sucedió en aquella temporada 2007/8, un defensa está siendo el jugador más destacado de la plantilla de los Gers. James Tavernier, veterano lateral derecho inglés, lleva 17 goles en lo que va de temporada, siendo el máximo anotador de los escoceses. “Gerrard trabaja mucho la estrategia, les está permitiendo sacar muchos puntos. En la liga escocesa el balón parado decide muchos partidos y están sabiendo explotarlo”, explica Carlos Cuéllar sobre esta sorprendente estadística.

Gerrard, el heredero natural de Klopp en el Liverpool

La mejor temporada de Steven Gerrard a los mandos del Rangers está coincidiendo en el tiempo, por caprichos del destino, con el peor momento de Jurgen Klopp desde que se convirtiera en entrenador del Liverpool. Asolado por las lesiones, sobre todo en la línea defensiva, la fiabilidad del conjunto del alemán está puesta en duda. El duro correctivo que le endosó el Manchester City de Pep Guardiola en el pasado encuentro de la Premier, donde los líderes ganaron por un contunden 1-4, causa cierto runrún en la hinchada red. Parte de esta afición señala sin tapujos a Gerrard como el indicado si llega el momento de sustituir al teutón.

Para Carlos Cuéllar, que vivió en primera persona las diferencias entre el fútbol escocés y el inglés, el Rangers es una excelente experiencia de preparación de cara a desembarcar en un equipo grande de la Premier League. “Gerrard está demostrando su nivel en Escocia. Si me dices un club que solo juega el campeonato doméstico, me podría parecer una apuesta arriesgada para el Liverpool, pero el Rangers lleva varios años jugando en Europa, está ganando experiencia”.

“Intentarán hacer lo que hizo el Chelsea con Frank Lampard, pero claro, él tenía mucha menos experiencia, solo estuvo un año entrenando en segunda división”, valora el ex futbolista español; “Imagino que el año que se vaya Klopp, que no creo que sea este, el paso lógico será Steven Gerrard. Es un jugador de la casa, vendrá de tres o cuatro años jugando en Europa”. La afición del Liverpool solía dedicar el cántico de “A scouser born and bred” a su capitán. Un scouser (término utilizado de manera coloquial tanto para el acento y forma de hablar de Liverpool como para su gentilicio) nacido y criado en la ciudad.

“En Inglaterra la figura de un capitán o de un entrenador que dejó huella en el club es un símbolo”, reflexiona Cuéllar sobre cómo sería el paso de Gerrard a un vestuario como el del Liverpool, quien pasó 17 años defendiendo al primer equipo. “Es un poco el símil con Zinédine Zidane, se le criticó al principio por falta de experiencia. Pero si te dice Zidane que te des un cabezazo contra esa pared, pues no es lo mismo que te lo diga otro entrenador: por él te rompes la cabeza, por otro probablemente te lo cuestionas”, sentencia.

Rangers, un equipo refundado y descendido a la cuarta división

A día de hoy el nombre del equipo es The Rangers Football Club Ltd. El original Glasgow Rangers FC desapareció en el 2012 tras sufrir una bancarrota provocada por una desorbitada deuda. El millonario inglés Charles Green compró el club, pero estuvo obligado a refundarlo. La Scotish Premiership decidió, a través de una votación del resto de equipos, reinstalarlos en la liga, permitiéndoles heredar su palmarés e historia, pero descendiéndoles a la cuarta división, “los clubes votaron que no, es un poco la mentalidad británica: tú lo has hecho mal, ahora búscate la vida. Para eso son bastante cuadriculados”.

Cuéllar admite que, cuatro años antes del desastre financiero, la situación de la plantilla no era mala. “Cuando yo estaba a nivel económico la verdad es que no notábamos nada. Recibíamos nuestras nóminas sin problema, no había sensación de que hubiese un problema tan grave como luego se destapó”, explica, “lo viví con mucha pena, es un club histórico. Es como si al Real Madrid le descienden a tercera, pasa a ser un problema casi nacional. Eso es lo que sucedió en Escocía, un gran escándalo”.

El central madrileño, que pasó por clubes como Osasuna, Sunderland o Almería, recuerda aquellos difíciles momentos que atravesó el Rangers: “Estaba en el Aston Villa y viví esos años con bastante dolor. La mayoría de jugadores se fueron, tuvieron que empezar desde cero… Por suerte pudieron regresar pronto a la primera categoría”. Aquel descenso forzado evitó que se pudiera vivir durante cuatro años uno de los derbis más espectaculares del planeta futbolístico, el Old Firm. El encuentro entre Rangers y Celtic, protestantes y católicos, es conocido por su intensidad y dureza: “Es una pasada, creo que ha sido el partido con mayor rivalidad que he vivido. Ya no es algo que engloba el ámbito deportivo, sino que va más allá, histórico, religioso… No hay solo tres puntos en juego. La semana del partido te recomiendan no salir a la calle, no es porque te vaya a pasar nada, sino porque la gente está tan metida que no vas a poder ni tomarte un café tranquilo”. Ahora, los Gers saborean un dulce momento, mirando por el retrovisor, y a gran distancia, a su eterno rival.