Es noticia
Los sonados regresos de Luis Suárez, el "fichaje del confinamiento" en el Barcelona
  1. Deportes
  2. Fútbol
No hay revulsivo para él

Los sonados regresos de Luis Suárez, el "fichaje del confinamiento" en el Barcelona

Siempre que ha vuelto de una lesión de rodilla, ha enlazado grandes rachas goleadoras. El coronavirus le ha permito recuperarse a tiempo del menisco y estar listo para el tramo final de temporada

Foto: Luis Suárez celebra un gol anotado al Mallorca en el partido de la primera vuelta en Liga. (Reuters)
Luis Suárez celebra un gol anotado al Mallorca en el partido de la primera vuelta en Liga. (Reuters)

Como LaLiga, Luis Suárez está de vuelta y en el Camp Nou saben que eso es sinónimo de gol. Desde que se lesionara el pasado mes de diciembre en la Supercopa de España (o de Arabia Saudí), el uruguayo ha necesitado cuatro meses para recomponerse. En condiciones normales se hubiera perdido casi toda la temporada, pero el coronavirus y el posterior confinamiento le han otorgado al Barça el fichaje que más necesitaba y que no fue capaz de encontrar en invierno. Porque ni Griezmann ni mucho menos Braithwaite habían convencido a la parroquia blaugrana durante su ausencia. Leo Messi ya vuelve a tener a su lado a uno de los puntas más incómodos del campeonato, capaz de fijar a los dos centrales para crearle rutas de espacio. 14 goles en 22 partidos antes de su lesión, pólvora que el Barça ha echado en falta.

Los culés se juegan Liga y Champions en dos meses y el alta de Súarez es la mejor de las noticias para los de Setién. “Le hemos visto trabajar como un salvaje, machacándose e intentando acortar plazos. Vi todos los goles que ha metido en el Barça y se me caía la baba. Será un muy buen fichaje del mercado de confinamiento”, comentó Eder Sarabia, segundo a los mandos. Suárez podría ser de la partida este sábado contra el Mallorca (22:00h) porque se encuentra más que preparado y porque su sola presencia podría servir de recurso intimidatorio contra un rival que ya no juega con el factor cancha a su favor, pero en la mente del cuerpo técnico también pasa reservarlo hasta el segundo tiempo. Suárez aprovecharía su frescura para percutir en las piernas fatigadas de los defensas bermellones e ir ganando en confianza.

placeholder Luis Suárez, durante un entrenamiento con el Barça este mes de junio. (EFE)
Luis Suárez, durante un entrenamiento con el Barça este mes de junio. (EFE)

“Está mucho mejor de lo que esperábamos. La duda es si estará para ponerle de inicio o a lo largo del partido”, esgrimió Setién. El uruguayo viene sufriendo de su rodilla desde 2017. En aquel entonces paró y optó por un tratamiento conservador que le permitió volver con fuerza para anotar 17 goles en 14 partidos. Posteriormente, hubo de tomarse un nuevo respiro y a su regreso siguió pletórico en la definición, con seis tantos en cuatro choques. No obstante, los sobreesfuerzos volvieron a castigarle y en noviembre del 2018 el menisco le obligó a guardar reposo durante dos semanas. Una vez más, volvió a mostrar todo su olfato goleador a la vuelta, con 16 goles en 13 encuentros. Antes de la Copa América del pasado verano, Suárez decidió al fin pasar por quirófano para solventar su afección, en un movimiento que no gustó nada en Can Barça por las circunstancias (se perdió la final de Copa), pero este mes de enero, contra el Atético en Arabia Saudí, recayó de nuevo. Esta segunda operación se espera que sea ya la definitiva.

Porque el Barça necesita a su '9' como el comer. Sin él, cuyo último gol liguero fue en el derbi ante el Espanyol que cerraba la primera vuelta, el equipo perdió mordiente. En LaLiga, en los 17 partidos con Suárez, el Barça anotó una media de 2,47 goles por encuentro. En las nueve jornadas de la segunda vuelta en las que no estuvo, su equipo bajó el promedio a 2,1. 19 tantos, diez de ellos en dos partidos saldados por 5-0 (Leganés y Eibar). Sólo en un partido más, contra el Betis, fueron capaces los azulgranas de anotar más de dos goles. Ni Antoine Griezmann, ni Ansu Fati ni Martin Braithwaite fueron revulsivos. Tampoco la 'segunda línea', pese a Arturo Vidal, compensó la baja.

placeholder Luis Suárez y Griezmann volverán a formar parte del tridente junto a Leo Messi. (EFE)
Luis Suárez y Griezmann volverán a formar parte del tridente junto a Leo Messi. (EFE)

Y es que aparte de 'killer', Suárez también es el mejor asistente del campeonato doméstico. Su figura es esencial en el Barça de hoy en día. Domina su parcela como nadie, siempre bien posicionado, mezclando estupendamente con los compañeros, algo que Griezmann no ha conseguido aún. Solo, en su casa, se fue poniendo a tono para llegar lo más fino posible a los entrenamientos y ahora, tras un mes de preparación intensiva en la ciudad deportiva, tocando pelota, se encuentra en la línea de salida del que puede ser su último curso plácido en el Camp Nou. Lautaro Martínez, ariete del Inter de Milán, podría llegar próximamente como competencia para la 2020/2021.

Tampoco le extrañaría. El uruguayo, que tiene 34 años, hace tiempo que viene aconsejando a la directiva que mire hacia el futuro y le busque un recambio de garantías para cuando no esté. Griezmann nunca lo fue porque, con un Mundial bajo el brazo, un salario alto y un prestigio sobresaliente tras su trayectoria en el fútbol español, pasó inmediatamente a la banda izquierda del tridente titular. Lautaro, de 22 años, sí da el perfil por juventud y condiciones físicas. Aún no está maduro, por lo que al lado de Suárez solo puede progresar. Pero para esto todavía falta. Por el momento, la única preocupación de Suárez, que después de las interrupciones siempre tiene sed, pasa por Mallorca.

Como LaLiga, Luis Suárez está de vuelta y en el Camp Nou saben que eso es sinónimo de gol. Desde que se lesionara el pasado mes de diciembre en la Supercopa de España (o de Arabia Saudí), el uruguayo ha necesitado cuatro meses para recomponerse. En condiciones normales se hubiera perdido casi toda la temporada, pero el coronavirus y el posterior confinamiento le han otorgado al Barça el fichaje que más necesitaba y que no fue capaz de encontrar en invierno. Porque ni Griezmann ni mucho menos Braithwaite habían convencido a la parroquia blaugrana durante su ausencia. Leo Messi ya vuelve a tener a su lado a uno de los puntas más incómodos del campeonato, capaz de fijar a los dos centrales para crearle rutas de espacio. 14 goles en 22 partidos antes de su lesión, pólvora que el Barça ha echado en falta.

Leo Messi Antoine Griezmann
El redactor recomienda