La reinvención de James Rodríguez para hacer olvidar a Di María

James Rodríguez se ha convertido en una de las piezas claves delReal Madrid. Al cierre de la primera vuelta y con el equipo como campeón de invierno, el colombiano se ha ganado un puesto fijo en el equipo. James llegó el pasado verano procedente del Mónaco y entre sus funciones se encontró con la de sustituir a Ángel Di María, un jugador que revolucionó la pasada temporada del conjunto blanco y que fue declarado MVP de la Champions. El argentino dejó el listón muy alto, pero al nuevo 10 del Madrid no le pesó la presión ni tampoco los 80 millones que se habían pagado por él, siendo el quinto fichaje más caro de la historia del club.

Cuando aterrizó en la capital blanca, James Rodríguez venía de haber sido una de las sensaciones del Mundial de Brasil 2014, anotando, además, el considerado mejor gol de la cita mundialista. El colombiano no llegó al Real Madrid en su mejor estado de forma y aunque había terminado como el máximo goleador de la liga francesa, con 12 goles, la exigencia para ganarse el puesto en el club blanco y hacer olvidar a Di María era máxima.

Han bastado unos cuantos meses y partidos para que James se haya convertido en un fijo para Carlo Ancelotti. El técnico italiano ha tenido mucho que ver en esta evolución que ha sufrido el colombiano sobre el terreno de juego. El ’10’ del Real Madrid ha retrasado su posición y, aunque juega escorado a la banda, lo hace acompañando a Kroos e Isco en el medio del campo. Arriba deja vía libre a Cristiano, que con Benzema y Bale conforman la intocable ‘BBC’.

Esta recolocación que ha sufrido el colombiano, le ha hecho ganar en labores defensivas y le ha ayudado a ser uno de los pilares básicos del Real Madrid. A base de trabajo y discreción se ha ganado el puesto. Esta temporada ha disputado 27 partidos, en los que ha marcado diez goles y ha dado nueve asistencias. En esta faceta, James es el tercer máximo asistente del equipo y sólo Cristiano -con 12-, y Benzema -con 10-, le superan.

Precisamente, el portugués es uno de los ídolos de James. Así lo había confesado en más de una ocasión: “Jugar al lado de Cristiano Ronaldo, mi ídolo, sería un sueño cumplido”, reconocía en una entrevista concedida al diario colombiano El Espectador en abril de 2010. Cuatro años más tarde su sueño se hizo realidad. Su papel dentro del vestuario es discreto y no es extraño verlo compartir su tiempo con otros americanos como Chicharito o Keylor Navas, tal y como se vio en la comida de Navidad de la entidad blanca. Se ha adaptado bien al club, con el que tiene contrato hasta el 2020. Por delante, queda todavía mucho tiempo para demostrar toda su calidad. Ganas no le faltan…