Todo preparado para la final de Copa

Hoy tendrá lugar en Mestalla una nueva edición del partido de mayor colorido y emoción del fútbol español, la final de la Copa del Rey 2009. Aunque en esta ocasión, hay varios indicios que llevan a pensar que la fiesta, protagonizada por Athletic Club de Bilbao y FC Barcelona, se puede aguar. Las secciones más radicales de ambas aficiones quieren aprovechar este encuentro, que cierra el Campeonato de España, para hacer reivindicaciones políticas de carácter independentista.

Suele resultar un cóctel peligroso mezclar la política con la pasión que levanta el deporte en general y el fútbol en particular. Este encuentro es tradicionalmente presidido desde el palco por el rey Juan Carlos, y siempre se hace sonar el himno de España antes del comienzo del mismo. La polémica estará centrada en ese momento concreto, ya que, desde organizaciones independentistas tanto de Cataluña como del País Vasco, se anima a todos los presentes a silbar el himno y dar la espalda al terreno de juego para protestar por “las imposiciones del Estado Español”. Incluso, la Plataforma Pro-Selecciones Deportivas Catalanas repartirá 5.000 silbatos para este fin, a la vez que han hecho una llamada al juego limpio de ambas aficiones para evitar incidentes.

La RFEF, organizadora del partido, tiene previsto hacer sonar el himno a un volumen mayor del habitual para atenuar el efecto de los pitos. 800 agentes de las Fuerzas del Orden velarán por la seguridad de los asistentes a este partido, declarado de ‘alto riesgo’. Se espera la afluencia masiva de seguidores del conjunto bilbaíno, 35.000 aproximadamente, de los cuales 10.000 no tienen entrada.

Tras la vuelta a una final de su torneo favorito 24 años después –cuando perdió ante el Atlético de Madrid en la edición de 1985- en la afición rojiblanca se ha disparado la euforia (ver artículo). Las calles de Valencia se teñirán, como es habitual en este evento anual, de los colores de ambos equipos. Y lo que también preocupa a la Policía es la organización de algunas manifestaciones ultraderechistas en la ciudad del Turia y que podrían provocar enfrentamientos con los ultras de Athletic y Barça.

Mucha expectación en lo deportivo

En el campo, se espera un duelo deportivo por todo lo alto. Aunque en la memoria de muchos está presente la última final que enfrentó a estos dos equipos y que acabó en batalla campal. En aquel partido de mayo de 1984, los vascos vencieron por 1-0 días después de haber logrado su octavo título de Liga. Consiguieron así un histórico doblete de la mano de Javier Clemente. La final de Copa fue muy bronca, con el barcelonista Schuster fuera de sí casi todo el partido y con un joven Maradona que perdió los nervios tras el pitido final dando pie a una de las escenas más bochornosas de la historia de nuestro deporte.

Al igual que ocurriera hace 25 años, los leones llegan hoy a la final empujados por su exclusiva afición y obsesionados con este partido. Los propios jugadores han colgado banderas y camisetas de los balcones de su hotel valenciano, han avisado que irán a por el partido desde el principio y pretenden igualar la evidente diferencia de calidad entre ambas plantillas con dosis enormes de entusiasmo y entrega. Se prevé un partido bronco. Es de desear que no se vuelvan a repetir incidentes parecidos a los del ’84. El arbitraje correrá a cargo del internacional Medina Cantalejo, quien se retira al final de la presente temporada.

El entrenador rojiblanco, Joaquín Caparrós, intentará que sus hombres impriman un fuerte ritmo al partido para así ahogar a los de Pep Guardiola, y tiene prácticamente decidida la alineación. Salvo sorpresa apostará por Iraizoz en portería; Iraola, Aitor Ocio, Amorebieta y Koikili en defensa; Javi Martínez y Orbaiz en la medular; y Fernando Llorente y Toquero en punta de ataque. Parece clara también la participación de Yeste en banda izquierda, y la única duda consistirá en saber si finalmente se decanta por David López o Susaeta para la parte derecha del ataque bilbaíno, una posición en la que su principal tarea será la de surtir buenos balones al ariete Llorente.

El Barça, por su parte, presenta importantes bajas como son las de Andrés Iniesta, Thierry Henry, Rafa Márquez o Eric Abidal. Por ello, el once azulgrana será una duda hasta poco antes del partido. En la portería se espera que Valdés descanse y juegue de inicio Pinto, héroe de la semifinal ante el Mallorca. En la defensa, todo depende de si Puyol juega en el lateral izquierdo, retrasando a Touré Yayá al centro de la zaga, o si finalmente entra en el once Sylvinho. El resto de la alineación es igual de incógnita y Guardiola podría, incluso, plantearse dejar a Messi en el banquillo y utilizarlo como revulsivo.

Sea como sea el resultado final, todo amante del fútbol desea ver un partido vibrante, de los que crean afición, donde la política debería quedarse fuera del estadio, y donde reine la deportividad. Al fin y al cabo, es un momento de celebración y de lo que se trata es de que todos lo pasen bien. Tengamos, pues, la fiesta en paz.

Alineaciones probables:

Athletic Club: Iraizoz; Iraola, Ocio, Amorebieta, Koikili; Susaeta o David López, Orbaiz, Javi Martínez, Yeste; Toquero y Llorente.

Barcelona: Pinto; Alves, Piqué, Puyol, Sylvinho, Sergio Busquets o Touré Yaya, Xavi, Keita, Bojan, Eto'o y Hleb o Messi.

Árbitro: Medina Cantalejo.

Estadio: Mestalla (22.00 horas / TVE1).