'No sé qué pasará si el Athletic gana la Copa'

“Vamos a ganar la Copa, no importa que nuestro rival sea el Barça, llevamos esperando este momento 25 y años y será difícil volver a repetirlo. Para nosotros lo es todo, es un sentimiento inexplicable, es un momento único, en Bilbao, en Vizcaya, en cualquier rincón de la ciudad, no hay conversación que no termine con el Athletic” matiza a El Confidencial un ferviente seguir de los ‘Leones’ que ha vivido el ambiente que se respira en Bilbao.

 

Y es que la ilusión, tanto de jugadores como de aficionados del Athletic, ha desatado la locura en Bilbao. El Ayuntamiento instalará 22 pantallas gigantes para ver la final, además de las seis que habrá en San Mamés. Se han distribuido de manera gratuita 15 mil carteles para ambientar la ciudad con la iniciativa de “¡A por la Copa!”. Más de 20 comercios del Casco Viejo ofrecen descuentos a quienes compren portando prendas del Athletic. Toda la ciudad luce de color rojo y blanco. Algunos niños asisten al colegio con camisetas del Athletic, que comienzan  a agotarse en los puntos de venta, mientras que en bares, restaurantes, locales comerciales, peluquerías, no falta una foto, una bufanda o una bandera del Athletic.

 

No hay entradas para asistir a la final desde que el conjunto de Joaquín Caparrós dejó fuera al Sevilla en semifinales. Según pudo saber este diario, una entrada en reventa para la final oscila entre los 600 y 800 euros. Miles de aficionados han comenzado a desplazarse a Valencia, aún sin tener entrada. “Media ciudad irá a Valencia, lo importante es estar con el Athletic, será un momento histórico, si te soy sincero, no sé qué pueda pasar si ganamos la final, la ciudad enloquecería y todo se paralizaría”, sentencia esta misma fuente.

 

Falta un día para el ansiado día. El domingo ya se vivió un momento espectacular. Cerca de 20 mil aficionados asistieron el domingo al último entrenamiento del equipo rojiblanco antes del viaje a Valencia. Los jugadores están contagiados por ese desbordamiento de sentimientos que transmiten los seguidores rojiblancos. Son conscientes de que se enfrentarán al equipo que mejor fútbol hace hoy en día, sin embargo, su confianza está intacta. “Nosotros tenemos jugadores que hace un año o dos jugaban en campos de tierra, como Toquero por ejemplo. El Barça no, el Barça tiene a Xavi, Iniesta, Messi. Pero aquí no importa eso, nosotros somos un equipo que vive para la Copa, porque ganar la Liga es muy complicado, cabe destacar que la Copa la hemos ganado más veces que el Madrid”, replica este aficionado al Athletic.

 

Todo Bilbao está de fiesta. Las horas previas al partido pasan lentamente. Miles de aficionados se desplazarán para acompañar a su equipo en Valencia. Otros lo verán en las calles, en San Mamés, en los bares, en donde haya una pantalla. No es fácil encontrar billetes de avión. Tampoco de autobús. “No importa como sea, así tengamos que ir de rodillas, iremos a Mestalla” sentencia otro seguidor rojiblanco. Ion Vélez, jugador del Athletic, refleja la consigna del equipo. “Vamos a salir en tromba, a comérnoslos”.

 

Athletic, un equipo enamorado de la Copa

 

La Copa lleva años intentando renacer, y con la finalísisma de mañana podría empezar a hacerlo. El último entrenador que llevó al Athletic Club de Bilbao a conquistar la Copa del Rey, Javier Clemente, confesó este lunes que el conjunto vasco debería ganar al FC Barcelona “por el bien del fútbol”. Según el ex seleccionador nacional, el vigésimo cuarto título de los rojiblancos en el torneo del KO tendría mucho mayor significado que el vigésimo quinto culé.

Es evidente que para un club como el bilbaíno -históricamente grande pero cuyas vitrinas llevan sin acoger un nuevo trofeo desde 1984- el partido de mañana es de una trascendencia extrema. Para el Barça todo es diferente. Inmerso en la consecución de un histórico triplete (Liga, ‘Champions’ y Copa), el título que se pone en juego mañana es el de menor prestigio, pero igual de necesario para conseguir el soñado objetivo de todo equipo grande. En la Ciudad Condal no se toman este encuentro como una ocasión única ni muchísimo menos.

Desde el prisma histórico, es importante para los azulgranas mantener su dominio en el palmarés de la competición. El Athletic, conocido como el ‘rey de copas’ durante años, perdió este privilegio tras los dos últimos títulos culés, logrados de forma consecutiva en 1997 y 1998. Los vascos tienen una oportunidad de oro para empatar a 24 Copas con los catalanes, y ese orgullo también estará en juego en Mestalla.

Clemente también habló de lo necesario que sería el título para reafirmar el singular proyecto de cantera autóctona del Athletic. En ese aspecto, mañana se enfrentarán en el césped dos formas muy diferentes de gestionar un club. Por una parte estará uno de los equipos más famosos del mundo, con estrellas contrastadas conocidas en todo el planeta y con una capacidad económica aplastante, es decir, un producto de la globalización. Por el otro, el trabajo de cantera llevado al extremo, con jugadores desconocidos para el gran público, y con unas señas de identidad apenas modificadas durante un siglo. Por ello, Joaquín Caparrós, entrenador rojiblanco, avisó a sus jugadores que serían el centro de atención del ‘Planeta fútbol’ si logran vencer al todopoderoso equipo que ha engrasado a la perfección Pep Guardiola.

Pero ante tanta calidad como tiene el Barça, y que le hace ser gran favorito, los bilbaínos atesoran un bien preciado: la pasión por este torneo. La importancia que se le da a la Copa del Rey en la ciudad vizcaína es difícil de comprender si no se vive de primera mano. No es extraño ver desplazamientos de 3.000 ó 4.000 aficionados que siguen al equipo en unos octavos de final de Copa (un miércoles de invierno) a Valladolid, Torrelavega o Soria. Y ese tipo de partidos en otras aficiones no son seguidos ni por la radio.

El torneo copero ha entrado en un desprestigio constante en los últimos años. La RFEF ha peleado, a través de diversas fórmulas, para reflotarlo, aunque sin mucho éxito. No hay que olvidar que el torneo del KO es el Campeonato de España de fútbol, y es el torneo más antiguo de los que se juegan en nuestro país. En sus más de cien ediciones, pocos equipos han sabido guardar y transmitir la importancia de este campeonato como el Athletic de Bilbao. Mañana, los Leones vuelven a ser protagonistas de una final de Copa (la fiesta más importante de nuestro fútbol por su habitual colorido y emoción), y para los aficionados a este deporte será una delicia disfrutar de once jugadores derrochando entrega durante 90 minutos. Ese plus que da la historia es la única arma fiable con la que cuentan para evitar el triplete del Barça. Pase lo que pase, ganará la Copa. Y con ella, el fútbol.