Es noticia
Por qué el rebrote del fenómeno Fernando Alonso es un caso único en la historia
  1. Deportes
  2. Fórmula 1
UN NUEVO TIPO DE SEGUIMIENTO

Por qué el rebrote del fenómeno Fernando Alonso es un caso único en la historia

El bicampeón ha regresado a la zona alta de las carreras con tres podios consecutivos y su apoyo es masivo, incluso entre aficionados que no disfrutaron de sus mejores años

Foto: Fernando Alonso está feliz y eso se le nota en su conexión con la afición más joven (REUTERS/Jaimi Joy)
Fernando Alonso está feliz y eso se le nota en su conexión con la afición más joven (REUTERS/Jaimi Joy)

La Fórmula 1 vive un momento dulce y su interés se ha disparado a nivel mundial, y nuestro país no ha sido una excepción a esta tendencia. Ayuda, por supuesto, contar con Fernando Alonso y Carlos Sainz en lo alto. Pero cuando el efecto se eleva a la categoría de fenómeno social, hay algo más. Y en ese plus de las percepciones sobre los aficionados es donde sale a relucir el descomunal carisma del piloto asturiano. La singladura deportiva del piloto asturiano y su polarizante personalidad nunca deja a nadie indiferente. Pero ahora se ha añadido a la ecuación un factor inédito: el apoyo del seguidor joven e incluso el adolescente. Hablamos de un sector de público nunca antes visto que se han entregado a la causa Alonso con una devoción inusitada.

La Fórmula 1 siempre fue un deporte para adultos. En todos los estudios sociodemográficos que analizaban el perfil del seguidor de este deporte, de forma recurrente el grueso se situaba en la franja de los 45-55 años. La siguiente se situaba en los 55-65 y la tercera entre los 35-45. Los adolescentes, o incluso veinteañeros, eran absolutamente irrelevantes en su seguimiento. Aquella famosa frase de Bernie Ecclestone "no me interesan los jóvenes, porque ellos no pueden comprar un Rolex y los que siguen la Fórmula 1 si pueden comprarlo", no era una boutade. Hay varias causas, pero la mayor sorpresa de este cambio de paradigma es que, no sólo un sector de seguidores muy jóvenes se han unido a la competición, sino que están enfervorizados con un cuarentón como Fernando Alonso. Un piloto al que la mayoría de los nuevos aficionados nunca vio competir en sus días de gloria.

Fernando tiene un 'algo' especial

Por regla general, el aficionado joven es menos reflexivo que el maduro. De media, las nuevas incorporaciones a un deporte suelen apuntarse al caballo ganador con mucha más facilidad que los seguidores de toda la vida. A mayor perspectiva, más racionales suelen ser las preferencias. Sin embargo, si se analiza el fenómeno de crecimiento de la Fórmula 1 en estas últimas cuatro temporadas, objetivamente Carlos Sainz ha sido más exitoso que Fernando Alonso en los años de incorporación de este nuevo contingente. Algo pasa aquí. Los nuevos fans quizás sepan, que hace muchos años, su ídolo ganó campeonatos del mundo, pero casi una década después de su última victoria, está claro que hay algo más que un ilustre palmarés detrás en esta pasión desatada por el español.

La consultora Personality Media, referencia en España en el análisis de la percepción pública de deportistas, no dejaba espacio a la duda en su último estudio. Fernando Alonso arrasa entre el público español más joven en detrimento de Carlos Sainz, que goza de un excelente predicamento en las franjas más maduras de seguidores de la Fórmula 1 por encima de los 45 años. Superior incluso al de su veterano compatriota. ¿El mundo al revés? Podría parecerlo, pero es que ninguno de los nuevos seguidores ha conocido al Fernando áspero del pasado, a diferencia del público más maduro. Los 'niños' se han encontrado con una personalidad que, en general, ahora resulta más divertido, persuasivo y menos borde en sus aseveraciones. Y lo que es más decisivo aún, con un carisma, una historia personal y una conexión emocional que los enloquece.

placeholder Fuente: Personality Media
Fuente: Personality Media

El injusto contraste con Sainz

Aunque Alonso sigue siendo una máquina de generar controversias cuando habla, pero por hacer un paralelismo futbolístico, sus declaraciones hoy podrían asimilarse a esa arrogancia canallita y simpática de Zlatan Ibrahimovic, que a la más difícil de digerir de Cristiano Ronaldo. Los jóvenes adoran su espontaneidad, su transparencia y por supuesto las pullas y recaditos a sus rivales o detractores. Basta con darse un paseo en las redes, para darse cuenta del fenómeno. Luego, pesar de no ser un nativo en el mundo de las redes sociales, el asturiano está en su salsa en este medio. Los canales oficiales de la Fórmula 1 se hacen eco de las bromas y el lenguaje de los seguidores del bicampeón mundial, porque a través de sus datos son más que conscientes de las pasiones que desata el piloto español.

En el análisis realizado por la consultora, no sólo se tienen en cuenta las magnitudes típicas de nivel de conocimiento sugerido o espontáneo, donde Fernando alcanza el 96% del total de la población española, por un más que notable 86% de Carlos. El estudio profundiza también en los detalles que rodean a la personalidad de los pilotos y como son percibidos por la sociedad. El rechazo irracional, como el sufrido el pasado fin de semana cuando involuntariamente chocó con Fernando Alonso, es también el efecto indeseado de esta resurrección en popularidad del piloto asturiano.

Liberty Media se adelantó a su competencia, abriendo la mano del contenido audiovisual. No es sólo Netflix, es también la presencia de imágenes en redes sociales dando cierta manga ancha a equipos y pilotos para poder interactuar con sus seguidores. Fueron los primeros promotores en darse cuenta de que existe un número muy importante de aficionados que no necesariamente quieren o pueden seguir la competición en directo a través de la televisión. Es en ese terreno de los tuits, de los videos de Tik Tok, de las stories de Instagram, donde el cuarentón Fernando ha entrado en tromba haciendo sentir a muchos que podrían ser sus hijos, que sus 'padreadas' le hacen ser uno de los suyos. No debe haber muchos casos similares en la historia del deporte, pero en la de la Fórmula 1, es seguro que es algo único.

La Fórmula 1 vive un momento dulce y su interés se ha disparado a nivel mundial, y nuestro país no ha sido una excepción a esta tendencia. Ayuda, por supuesto, contar con Fernando Alonso y Carlos Sainz en lo alto. Pero cuando el efecto se eleva a la categoría de fenómeno social, hay algo más. Y en ese plus de las percepciones sobre los aficionados es donde sale a relucir el descomunal carisma del piloto asturiano. La singladura deportiva del piloto asturiano y su polarizante personalidad nunca deja a nadie indiferente. Pero ahora se ha añadido a la ecuación un factor inédito: el apoyo del seguidor joven e incluso el adolescente. Hablamos de un sector de público nunca antes visto que se han entregado a la causa Alonso con una devoción inusitada.

Fernando Alonso Carlos Sainz Fórmula 1