"¡Qué idiota!" Por qué la personalidad de Fernando Alonso atrae y divide en la Fórmula 1

“Si quieres tener un pura sangre en tu equipo, tienes que estar preparado para ello…”. Alguien que conoce bien a Fernando Alonso se expresaba así en relación a un conflicto interno en los tiempos de Toyota en el Mundial de Resistencia. Una definición del asturiano que sirve como patrón para interpretar y descifrar su actitud y presencia en la Fórmula 1.

Sin duda, el ‘viaje’ de Alonso a Lewis Hamilton este fin de semana resulta comprensible dentro de un habitáculo, como la mayoría en semejantes circunstancias. Un piloto no está pendiente de que su comunicación interna con el equipo salte a las retransmisiones, y la adrenalina y la tensión del momento justifican muchas de las reacciones, exabruptos e insultos que se escuchan durante un gran premio. Sin embargo, en la segunda parte de su ‘mensaje’, Alonso sacaba a relucir esa ‘aguja’ que también acompaña una personalidad en el mundo de las carreras (en la vida privada será otra historia) dura, asertiva y, en ocasiones, hasta áspera.

No siempre se es segundo con un Alpine

Son recurrentes los ejemplos de pilotos que se insultan unos a otros en medio del fragor de la pelea, aunque luego se les vea convivir entre ellos fuera del monoplaza. Alonso estaba legítimamente frustrado. No todos los días se llega a rodar en segunda posición con un Alpine. Quizás se entienda mejor ese "idiota", aunque no todos los días se escucha algo así entre dos campeones del mundo. Sin embargo, añadió un segundo dardo, este más elaborado si cabe: “alguien que solo sabe comenzar y pilotar cuando es primero”, diría del británico. Bueno, precisamente Hamilton es el único piloto de la parrilla que ha ganado con todo tipo de monoplazas desde 2007. No todo el mundo puede decir lo mismo. Quizás en 2022 sea la primera que no lo consigue.

Cabe reconocer al británico su elegancia al reaccionar posteriormente. Primero reconociendo inmediatamente su responsabilidad en el incidente. Luego, evitando responder a las palabras del español. “Al menos, sé lo que piensa”. Hamilton reconoció que iba a disculparse con Alonso hasta que conoció la reacción del español. “Estaba enfadado en la radio… De todas formas, la radio, cuando hablas, lo haces a tu ingeniero y a tu equipo. Es una pena que a veces se retransmita, porque si sale, es lo que dices (públicamente), cómo te comportas con los medios, normalmente es un comentario al equipo…”, se justificaba el español.

La larga trayectoria de Fernando Alonso en la Fórmula 1 está repleta de ejemplos de su acerada actitud al volante y con la radio, reflejo de una personalidad extraordinariamente directa. El epítome de todos fue el famoso “GP2 engine”, quizás sacado entonces de contexto y con un impacto desproporcionado para las intenciones y la realidad del momento. Aunque en la parrilla actual posiblemente sea Max Verstappen el más agresivo y desacomplejado de todos. En Austin, el pasado año, llamó “estúpido idiota” a Hamilton, haciéndole también el gesto de la 'higa'. Tras el incidente con Stroll en Portimao durante los segundos libres, el holandés hizo entrar el limitador de vueltas de su carácter. "¿Está ciego este jod… tío? ¿Qué coño está haciendo? ¿Qué coño pasa con él? ¡Jesucristo! ¡Qué retardado! ¡Qué mongol!”, y alguna lindeza más del estilo. Altas instancias de la Fórmula 1 tuvieron que intervenir sobre el vocabulario utilizado por los pilotos en la radio.

Cuando ataca, no hay prisioneros

“Para ser un ganador en este deporte tienes que ser un luchador, no confío en la gente que quiere parecer un ángel, es mejor ser tú mismo. Esta honestidad es parte del carácter de Alonso, lo que puede hacer difícil tratar con él en ocasiones”, comentaba en su día Andrea Stella, ingeniero del español en los tiempos de Ferrari, y quien le acompañaría después a McLaren, donde hoy es uno de los responsables del equipo. Alonso ha vivido toda su carrera en cuerpo y alma para la Fórmula 1, con una intensidad inusual para quien ha superado los cuarenta años, y ya con veinte en este mundo a sus espaldas. Con una patológica vocación ganadora y una singular inteligencia e intensidad mental, es implacable con su entorno para conseguir sus objetivos, porque es el primero en exprimirse en cuerpo y alma. Por eso, cuando Alonso ataca, no hace prisioneros.

Pero también le distingue esa singular ‘aguja’ que en ocasiones linda con cierta aspereza de carácter. Massa, Raikkonen y Vandoorme eran víctimas de ella cuando no cesaba de recordar sin venir a cuento los parciales a su favor cada temporada, por ejemplo. Reglas del juego entre machos alfa, en todo caso. O como esta misma temporada, Alonso cancelaba inadvertidamente la rueda de prensa ya programada con los medios españoles en el pasado GP de España, quienes si tuvieron su sesión con Ocon y Szafnauer, mientras Alonso se paseaba por el 'motorhome' ¿Habría actuado de forma similar Hamilton ante el Gran Premio de Gran Bretaña o Max Verstappen ante el de Holanda? Aquel mismo fin de semana estaba presente en Montmeló toda la cúpula de Renault, incluido Luca de Meo.

La foto en el parque

Este fin de semana, Alonso dejaba otra pequeña muestra de esa personal ‘aguja’ antes de comenzar el GP de Bélgica. Acosado por la prensa para que ampliara los detalles del proceso de su fichaje por Aston Martin, se le preguntó por qué Otmar Szafnauer, jefe del equipo, se enteraba por el comunicado del equipo rival de la marcha de su piloto. “Es cierto, Otmar no sabía nada, pero informé a Laurent Rossi y a Luca de Meo, mis mecánicos y mis ingenieros antes del anuncio. Toda la gente involucrada en las negociaciones. Otmar no lo estaba, y quizás Laurent o Luca no le llamaron antes del anuncio, y le sorprendió”.

El mismo día en que Otmar Szafnauer comentaba a los medios, caliente el fichaje del español, que no había hablado con él porque pensaba que estaba en un barco en las islas griegas, Alonso publicó dos fotos. Una, en su pista de karts, otra, en el Parque San Francisco de Oviedo, donde cada día del año se modela la fecha con dibujos de jardinería. Luego, se enfocó a sí mismo, dejando en evidencia una vez más a Otmar Szafnauer ¿Le ha estado pasado factura al responsable de Alpine por desavenencias entre ambos? Solo ellos lo saben. La ‘aguja’ de Fernando Alonso…